33: Amante.

1.9K 266 74
                                    

El ruido en la cafetera era evidente, Atem comía tranquilamente, sin duda alguna comer una hamburguesa y beber una soda dietetica era lo mejor para ese entonces, ya que se moría de hambre, además de que debía de darse ese tiempo para desestresarse un poco  e ir a caminar por el jardín que tenía el edificio, sin duda alguna serviría de mucha ayuda debido a que debía despabilarse antes de volver a su oficina y volver a trabajo.

Ya solo le quedaba poco, y además con la ayuda de Rosé el trabajo sería mucho más rápido, ya no tendría que ir a casa en una semana.

Estaba seguro que para esa noche estaría en casa, resguardado, calentito en su cama y sobre todo, disfrutando del calor humano que le ofrecía su pequeña familia.

Su corazón dio un salto de la alegría, realmente Atem deseaba con todas sus fuerzas estar con Yugi y su hijo.

— ¿Debería de llevar algo?, ¿la cena?, ¿un regalo?. — Se decía así mismo mientras sacaba su teléfono para enviarle un mensaje a Yugi, pero cuando encendio su teléfono, vio que tenía varias notificaciones de su hermano.

— ¿Haku?. —

Confundido, desbloqueo su teléfono y reviso las notificaciones de su hermano.

“¿Esta todo bien?, ¿quieres que suba ayudarte?”

Enviado 8:15.

“Oye, ¿puedes contestar el maldito teléfono?, estoy preocupado.”

Enviado a las 8:25.

“Dime, ¿que le hiciste a Yugi?, ¿por qué está enojado contigo?”.

Enviado a la 8:30.

“¡CONTESTA MALDITA SEA!.”

Enviado a las 8:40.

Esto era totalmente extraño, ¿por qué Haku le enviaría todos estos mensajes?  ¿Qué significaban?, ¿cómo qué Yugi estaba enojado con él?, ¿a qué se refería?, ¿acaso era por el día anterior?.

—“ Todo está bien. No hay nada porqué preocuparse.”

Escribió Atem  y después lo envío, para enseguida obtener una respuesta de su hermano.

“Me alegro... Pensé que estabas muerto ya. Supongo que han arreglado las cosas ustedes dos.”

Atem sonrió.

—“Así es... Ahora solo quiero ir a casa para verlo, me falta tan poco trabajo.”

Volvió a enviar Atem para después tomas su soda y beberla, cuando le llegó otro mensaje.

“¿Verlo en la noche?, no entiendo... ¿Qué no está contigo ahora?.”.

Atem frunció el ceño notablemente confundido.

—“ No, no está conmigo.”

“Qué extraño. Dijo que quería verte, por eso hemos venido.”

— “¿Qué?.”

“Me dijo que esperara en el auto junto con Yami, que iría verte a tu oficina.”


Atem comenzó a levantarse.... Asustado.

“¿Dónde estas ahora?.”

Soltero y con un bebé. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora