Katsuki.

3.8K 349 220
                                        

La mente de Bakugou era extensa, pero estaba actualmente reducida a un tema sobre alguien, Todoroki. Es simplemente extraño, un par de meses conviviendo y se sentía extraño al sólo estar a su alrededor o escucharlo hablarle.

Era como, si empezará a tenerle interés. No sabía si sólo era interés de amistad, o de plano interés amoroso, sea cual sea, lo estaba perjudicando de alguna manera; odiar a Deku era rutina, pero no pensaba en él cada maldito momento, sólo eso pasaba con el bicolor.

Súmale con el sueño extraño que tuvo anoche.

- †‡† -

- Katsuki-kun, ¿No vendrás a la cama?. - Una vista muy tentadora y malpensable se mostraba de perspectiva en primera persona en el sueño de la granada musulmana. Todoroki tenía una de sus camisas puestas, y parecía no tener nada debajo, dado a que las sábanas no lo cubrían y dejaban relucir sus tonificadas piernas. Bastante masculino, pero su cadera fina lo reducía todo.

- ¿No vamos a continuar?. - Una sonrisa seductora se mostraba en su rostro, por no mencionar que notó en su cuello mordidas y chupetones, todo apuntaba a que lo hizo él dado a que no se encontraba con ropa, sumale su erección.

Se acercó, acorraló al contrario e imagino lo suaves que eran sus labios cuando esté lo beso en su más atrevida fantasía. Levantó su pierna a la altura de los hombros, este le miró de forma plena, calmado ante todo. No sabía si tenía un fetiche, pero ser el que podía tocar y disfrutar de alguien que era centímetros más grande que él, lo tenía bastante ... ¿Exitado?, sí, ese podría ser el término.

Pero antes de siquiera poder tener un sueño húmedo como debe ser, despertó por el maldito despertador.

- †‡† -

Sí, así de extraño era todo. Tener ese tipo de sueños no era algo de todos los días, en especial con alguien como Todoroki; sí, era bastante atractivo y no dudaría siquiera en intentar algo si fuera una versión femenina en ese sentido.

¿Cómo lo miraría sin tener ese pensamiento?, sabía que Todoroki no podía saber lo que había dentro de su cabeza, pero terminaría preguntándole tarde o temprano el cambio tan repentino en sus interacciones.

¡Por dios!, la respuesta más suave que se le ocurre es decirle que es sexy. Su mente se encontraba ocupada en eso, pero ... Cierto, pero realmente cierto nerd acosador de All Might, le lanzó una bola de papel. Lo fulminó con la mirada, quería matarlo en ese momento por sólo hacer eso; de todas formas, abrió la misma para ver el contenido.

"¿Te gusta Todoroki?".

Le dirigió una mirada digna de perro rabioso al autor, pero le respondió y la mando la bola con una rudeza notable.

El de pelo verde leyó la nota, su cara fue de sorpresa.

"¿Qué te importa?, ¿A ti te gusta, MALDITO NERD?".

La Real Academia Española se estaba cortando las venas por la forma equivocada de como Kacchan usaba las mayúsculas en las clases de español y en estos momentos. Respondió, sabiendo que podía romper la delegada línea de tolerancia que Kacchan tenía con él.

El rubio abrió el papel.

"Si, y me importa porque no quiero tenerte de rival. Y más porque compartes clase extraescolar con Shouto y haces pareja con él en eso del club".

En el club, él y Todoroki habían hecho pareja al ser las presentaciones más estéticamente espectaculares a la vista. Deku hizo equipo con Uraraka al ser las más sencillas y agradables, Uraraka alcanzaba grandes alturas con pocos saltos y Deku, sí que destrozaba cosas sin perder carisma.

Gruño, dejando una respuesta bastante agresiva y lanzando la bola con intenciones de golpear al de cabellos verde de forma rápida. Deku detuvo muy apenas la bola y leyó la respuesta.

"Muy tarde, soy tu rival y te informó que él YA es mío".

Izuku Midoriya, por primera vez en su vida, frunció el ceño con disgusto, y lanzó la bola con algo de fuerza, Katsuki leyó lo escrito con un sentimiento de ser intimidado.

"Ni siquiera lo llamas por su nombre"

Bakugou ahora sí parecía perro rabioso.

"Tu tampoco".

Un ambiente de tensión se sintió entre ambos durante todas las clases, por no mencionar que parecían querer matarse a golpes al momento de tener un enfrentamiento casual. Detenidos por Todoroki y la hermosa presidenta de la clase, Momo Yaoyorozu. (Juró que si escribí mal su nombre, me mato)

Es más, el bicolor acompaño al rubio cenizo a una parte de la enfermería para ayudarle con sus leves heridas, como lo hacía Momo con Izuku. El chico tenía bastante paciencia al escuchar sin opinar, hastarse o ofenderse, la versión de los hechos, por parte de Bakugou sobre lo que pasó.

Lo llamaba por su apellido y apodo bastantes veces, y aunque se sintió algo incómodo de que se tomará esa confianza con él, no le molestaba en lo más mínimo, en absoluto, era cosa de ... ¿Acostumbrarse?.

- Básicamente, se pelearon por ... ¿Mí?. - Todoroki estaba casi muriendo de la risa por dentro, la historia parecía subrealista, ¿Él, motivo de una riña?, ¡Ja!, ni que estuviera tan bueno como para provocar eso.

- Sí, el maldito me vino con eso de que ya me empezaba a volver su rival sólo por pasar más tiempo contigo últimamente, como si le estuviera quitando su puesto de mejor amigo. - Bastante infantil, y más con como lo contaba el rubio cenizo, pero creíble hasta cierto punto tomando en consideración la actitud competitiva que solía sacar Midoriya en ciertas ocasiones con algunos temas primer mundistas o tontos en cierta manera.

- Sólo para acabar con eso, los llamaré a ambos por sus nombre y podrán decir el mío con toda confianza ... Dime el tuyo. - La sonrisa de Todoroki para trabquilizarle le hacía efecto, un calor invadió sus mejillas.

- Es Katsuki, Shouto. - Que vergüenza.

- Muy bien, Katsuki. Vete acostumbrando a que te llamé por tu nombre. - Ahí mismo, justo ahí, sintió que su corazón explotó por lo, increíblemente bien, que sonaba su nombre salir por parte del chico de hebras que variaban entre sí. Una belleza exótica, única, no, esos adjetivos no cubrían la maravillosa audición que le causaba ese chico.

- †‡† -

- Eso estuvo mal, Midoriya, y lo sabes. - Apesar de que odiaba esa versión inventada por Bakugou, debía admitir que era un buen pretexto, bastante creíble. Le ahorro bastante trabajo.

- ... Lo siento. - Ser regañado por alguien como él, específicamente Shouto, era bastante intimidante y raro. Un regaño era normal, pero ¿Así de autoritario como tal?, nunca.

- Ya después lo arreglas, encontré la forma de solucionar esto. Llamaré a ambos por sus nombre, ¿De acuerdo, Izuku?. - Una energía recorrió su espalda dorsal por el simple hecho de escuchar su nombre en labios ajenos a todos los que conocía, un sentimiento maravilloso, pero ya común, lo embriagó de forma inmediata y envolvente.

- Okey, Shouto. - Su corazón latía muy rápido al sólo decir eso.

"Me niego" (Bakutodo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora