Nuestro Destino

Capítulo 7: ¿Un móvil?

Sofía:

Ya era lunes, ahora si entraría a trabajar como se debe en la empresa.
Me terminé de alistar y bajé a desayunar, allí se encontraban todos desayunando. Los niños tenían su uniforme para el colegio, sus padres hablaban animadamente y también estaba él, Kenneth, estaba muy guapo.

Ayer él estuvo todo el día en su habitación, me pareció raro ya que en el tiempo que llevaba sólo unas pocas veces se había quedado en casa, contando la noche que llegó borracho y durmió en mi cama.

Uff, maldición, últimamente estoy pensando mucho en él.

Saludé a todos y ellos me respondieron, menos Kenneth, no le tomé mucha importancia y me dispuse a comer. Cuando hube terminado, subí a lavarme los dientes, luego me despedí de todos y salí junto a Kenneth quien sería mi nuevo jefe.

Si, ya es el jefe, mañana sólo firma un papel y ya adquiere su puesto. Está muy ansioso. Por lo visto este hombre es muy ambicioso y sólo piensa en lo que su padre le va a dar.

Cuando llegamos a la empresa, Kenneth se fue por su lado y yo por el mío, ni siquiera me dirigió la palabra. Además había muchos periodistas atacando con preguntas.

¿Quién es ella?

¿Por qué la semana pasada ella vino todo el tiempo?

¿Qué hace ella aquí?

¿Ella es su nueva pareja?

¿Dónde estaba usted?

¿Qué se siente ser el joven más millonario ahora?

¿A tan corta edad si se podrá hacer responsable de la empresa?

Definitivamente yo no quiero ser famosa, eran muchas preguntas las que hacían. La que más me quedó sonando fue...¿Ella es su nueva pareja? No sé por qué.

Llegué a mi oficina me senté y me dispuse a trabajar, habían unos cuantos papeles en el escritorio.
Ya estaba terminando cuando tocan la puerta, dejo pasar y entra una joven como de unos 20 años, muy bonita por cierto, que traía una torre de papeles en la mano.

- ¿Señorita Miller?- asentí- Buenos días. Aquí le traigo unos papeles, el jefe me dijo que se los trajera- dijo ella dejando los papeles sobre la mesa.

- Buenos días...- saludé haciendo una pausa para que me dijera su nombre.

- Hanna Morgan- se presentó.

- Buenos días Hanna. Gracias por traerme los papeles.

- ¿Necesita algo más Señorita Miller?- pregunta amablemente.

- Si, sería un placer que me llamara por mi nombre; no estoy acostumbrada y tampoco es algo que me gustaría.

- Ok Sofía- dijo con una pequeña sonrisa- Adiós.

- Adiós.

Esta chica es muy agradable, creo que podremos ser buenas amigas con Sarah. Me gusta la personalidad de ellas puesto que son muy amables y sonrientes.

Me dispuse a trabajar, esto es muy difícil pero me gusta así que supongo haré muy bien mi trabajo.
Mientras hacía algunos cálculos, escuché el sonido, así que me di la vuelta y vi un teléfono de oficina; lo agarré y contesté.

- ¿Hola?

- Hola, ¿Señorita Miller?

- Si, con ella. ¿Quién habla?

- Discúlpeme, Soy el detective Eduardo Collins. Me tomó mucho tiempo contactarme con usted.

- Lo siento, no tengo móvil.