Sofía:
Cuando me encontraba afuera del edificio, caminé hasta el auto y allí se encontraba el chofer.
- Señorita, la esperan- dijo señalando el auto.
Yo fruncí el ceño sin entender y entré en el auto, así entendí todo. Kenneth estaba sentado.- Tardaste- afirmó sin dirigirme la mirada.
- Si, estaba hablando con las chicas, son muy buenas personas- dije sonriendo.
- Claro.
Nadie dijo nada más hasta que llegamos a la mansión. Yo entré, saludé a todos y subí a mi habitación. Me bañé y me vestí y encendí el televisor un momento; estaban dando las noticias:
<< Se sabe que Luis Walker es el más grande empresario y millonario del país, ahora él dejó a su hijo Kenneth Walker a mando de su empresa y se convirtió en el primer joven empresario y millonario de todo el mundo. Ahora asiste una mujer con él. ¿Será una de sus nuevas conquistas? Por el momento él no ha querido responder pero...>>
Apagué el televisor, no tenía ganas de escuchar más eso, cuando estaba a punto de salir de la habitación, algo me detuvo. Un sonido que provenía de mi bolso; me acerqué y miré el teléfono que Kenneth me había querido regalar. Contesté.
- ¿Hola?
- Hola Señorita Miller, el Señor Kenneth me dio su número. Llamaba para decirle que ya encontramos a su familia la tenemos aquí en un centro, ya le paso la dirección; mañana puede pasar a verlos.
- No, pasaré ahora. Tengo que verlos. Gracias.
Corté la llamada y salí de la habitación contenta pero a la vez confundida ¿Cómo llegó ese teléfono a mi bolso? ¿Cómo así que es mi número?
Bajé las escaleras rápidamente y me senté con todos a la mesa. Tenía que darles la nueva noticia.
- Tengo que decirles algo- dije sin ocultar mi emoción.
- ¿Qué pasa querida? ¿Porqué tan feliz?- dijo Kath.
- Es que me llamó el detective y ya tienen a mis padres. ¿Será que puedo ir a verlos ahora?
- Claro Sofía. Pero ve con Kenneth.
- Bien- dije desanimada porque él iría conmigo- ¿Te puedo pedir un favor?- le pregunté a Luis.
- A mi no me pidas nada- señaló a Kenneth- pídele a él.
- Está bien, ¿podemos hablar?- miré a Kenneth.
- Está bien, vamos al centro donde están tus padres y en el carro hablamos- habló por primera vez en toda la cena.
Terminamos de comer, nos despedimos, salimos y nos montamos en el auto el cual arrancó de una vez. Le di la dirección al chofer.
- ¿Cuál es el favor niñata?- preguntó desinteresadamente.
- ¡No me digas así imbécil!- grité.
- ¡Y tú no me digas imbécil!- se defendió.
- ¿Será que podemos dejar esto un momento?- pregunté acordándome de lo que tenía que hablar con él.
- ¿Qué es lo que necesitas?- trató de calmarse.
- Que me des un adelanto para pagar el detective.
- Mañana te lo daré.
- Gracias... oye, ¿Tú metiste ese teléfono en mi bolso?- asintió- no puedes entrar a mi oficina sin permiso.
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Nuestro Destino
Teen FictionSofía es una chica humilde y dulce que cayó en los lazos de la pobreza y que lucha por sobrevivir, no tiene casa; duerme en las calles, no sabe nada de su familia y quiere conseguir trabajo pero no lo obtiene por su presentación. Ella tiene 17 años...