20-Paseo.

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Ya con mis zapatillas fuera de mis pies me acerco al tubo y lo examino. Quizás no saldría tan mal. Ya anteriormente había tomado clases de Yoga y en estás en una de las fases   envolvía   varios movimientos en un tubo.

Postura , seriedad y sensualidad. Tres cosas que necesitas en  un tubo y estarás a salvo.

-Con el cabello sin esa coleta te verás menos tierna.

Me volteo enojada y ahí veo a Harry con una sonrisa burlona en sus labios mientras mueve en sus manos suavemente una copa con vino.

Me vuelvo hacia el tubo nuevamente y ya con mi cabello cayendo en mi espalda   , me subo al tubo y comienzo con mis movimientos.

En todo momento siento la mirada de Harry y me pongo un poco nerviosa  pero libero un poco de aire fuera de mis pulmones   , y me concentro en lo mío.

Todo esta en la postura  así que la mantengo con varios toques de sensualidad.   Solo dejo correr mi imaginación con el tubo.

Envuelvo mis piernas hacia arriba y dejo colgar mi cabeza mientras giro lentamente mis piernas hasta cruzarlas.

Veo a Harry levantarse , su mirada es penetrante y provoca que mi piel se ponga de gallina. 

Sin romper conexión de nuestros ojos , veo que se me acerca.

Me pongo derecha en el tubo  y el me toma con suavidad de la cintura para entonces luego tomarme por completo en sus brazos.

Lo veo confundida y el une nuestros labios.

-Te veías jodidamente caliente haciendo eso. - susurra con su respiración agitada a la vez que desliza sus manos hasta mis muslos y comienza a caminar.

Siento un bulto chocar contra mi sexo y un gemido se me escapa.

¿Yo lo eh calentado?

De la nada comienza a hacer calor. Siento algo suave contra la espalda y es ahí cuando me percato de que me a dejado en el medio de la cama.

-Eso fue perfecto...- sonríe a solo centímetros de mi rostro y doy un brinco.

El se apoya de la palma de sus manos contra la cama mientras  el resto de su cuerpo lo trae sobre mi.

-Tienes un bonito c*lo. - captura mis labios y creo infartar al escuchar sus sucias palabras. Mis mejillas se vuelven rojas y me doy la vuelta en la cama  así dándole la espalda. No puedo creerlo. -Bebita ¿Aceptarías dar un paseo conmigo?- me susurra al oído y una tonta sonrisa se dibuja en mis labios pero la confusión me ataca.

-Pero dijiste que el que entra a la casa no puede salir.

El sonríe y acaricia mi mentón.

-Yo pongo las reglas y yo ordeno quien sale y quien no.  - susurra y toma mi rostro en sus manos. -¿Aceptas?- me guiña un ojo y sonrío.

-Deacuerdo.

***

Ya afuera   emprendemos camino en una camioneta negra que nos esperaba justo delante de el inmenso lugar.

Respirar aire fresco , ver las personas y sentirte libre otra vez se siente genial.

-¿A donde vamos?- rompo el silencio después de un rato.

Harry se voltea y besa mi frente. Esto era tan raro ¿Que era este hombre? Nosotros íbamos a la parte de atrás de la camioneta y delante de nosotros manejaba un tipo parecido al grandullón.

-¿Que te gusta hacer?- me ve fijamente a los ojos y siento derretirme.

-Muchas cosas.- rápido respondo y el sonríe.

-¿Te gusta el helado?- acaricia mi mejilla y yo asiento con la cabeza.

-Preston , vamos para mario's. - le dice al conductor y el tipo asiente.

Se vuelve hacia mi y me arropa entre sus brazos mientras busca mi boca  ,y me besa con pasión. Era un beso tan intenso , un beso completamente diferente.

-¿Que es mario's? - cuestiono curiosa minutos después y Harry se voltea a verme.

-Es una de las heladerías más famosas por aquí. Tiene los mejores helados   , vas a ver y si después te gusta    , y te quedas conmigo para siempre. - explica y al final me atraganto con mi propia saliva.

-Oh...ommm...

Trato de formular algo coherente contra la gran bomba que el acaba de mandarme  pero absolutamente nada se me ocurre. ¿El quiere que me quede con el? ¿Para siempre?

-Primero querías...

-Quería. Eso es asunto de el pasado. Yo hablo de ahora , quisiera que ahora...- acaricia mi rostro y mis mejillas al instante arden. -quisiera que fueras mia , quisiera que estuvieras siempre a mi lado para protegerte. - la camioneta se detiene y entrelaza nuestras manos. -Preston te va a acompañar  mientras yo espero aquí , el es de confianza. - dice y frunso el ceño.

-¿Porque no vienes conmigo?- pregunto media molesta. Esta es nuestra salida ¿Porque espera en el auto?

El hombre llamado Preston abre la puerta.

-No es que no quiera es que no...puedo , ahora ve con Preston. - me da un leve empujón así obligándome a salir de la camioneta.

Gruño y salgo de la camioneta. El hombre no habla y yo me adelanto al pequeño local de helado. 

-¿De que quiere su sabor señorita?- habla Preston y quedo sorprendida.

-Fresa por favor. -sonrío. -¿Sabes cual le gusta a Harry?- cuestiono.

Preston ríe y se aleja. ¿Que es tan gracioso?

Me levanto y voy camino afuera para hablar con Harry pero al salir quedo helada. ¿Para eso no quería salir de la camioneta?

Un fuego inunda mi interior pero este es diferente.

-¡Ted! ¡Ted espera!

Vuelvo a vida real al escuchar sus gritos y verlo que se me acerca.

Le hago señas para que se detenga y lo hace.

-Solo quería saber cual es tu sabor favorito.-sonrío con nostalgia y cambia la mirada.-Pero ya comprendo.- continúo.

-No , no entiendes , tienes que...

-¿Sabes que? Ya no quiero helado. - voy a pasar por su lado pero me lo impide tomándome de un brazo.

-No acabamos. - acerca nuestros rostros y me ve fijamente a los ojos. -No quiero...

-Yo no quiero muchas cosas.- le corto y hablo rápidamente.

El se me queda viéndome y en segundos siento sus labios contra los míos.

-No quiero perderte. - susurra sobre mis labios.

-Me mentiste. - susurro devuelta nerviosa.

-Es una larga historia pero por favor no me dejes. - me ve con los ojos cristalinos. -No quiero perderte. - dice y acuna mi rostro en sus manos para entonces presionar sus labios contra los míos. -Eres especial para mi. - besa todo mi rostro. -Quiero...- me toma en sus brazos y me carga hasta la camioneta para entonces ahí ya adentros ambos , el llama al otro grandullón y le da unas ordenes con números.

-¿Que es orden 69?- pregunto curiosa y el sonríe amplio.

-Orden. Voy a comer el lindo trasero y coñito de mi bebita Ted.

Quedo atónita. ¿¡Que!?

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