Ingel ( LIBRO II TERMINADA ) [Trilogía Blessed] [Sin Editar]

||«C h a p t e r XXIX»||

Miércoles 10 de Enero de 2018.

Así que...
así que te crees que puedes distinguir
el cielo del infierno.
Los cielos azules del dolor,
¿puedes distinguir un campo verde
de un frío raíl de acero?
¿Una sonrisa tras un velo?
¿Crees que puedes diferenciarlos?

¿Hicieron que vendieras
tus héroes por fantasmas?
¿Cenizas calientes por árboles?
¿Aire caliente por una fría brisa?
¿Una fría comodidad por el cambio?
¿E intercambiaste
un papel de extra en la guerra,
por un papel de protagonista dentro de una jaula?

Cómo desearía...
cómo desearía que estuvieses aquí,
somos solo dos almas perdidas,
nadando en una pecera,
año tras año,
corriendo sobre el mismo viejo suelo,
¿qué hemos encontrado?
Los mismos viejos miedos.
Desearía que estuvieses aquí.

11:47 AM

—Hazlo por tu hijo, Rixon. Tienes que estar aquí para él o ella, tienes que vivir para poder conocerlo, tienes que ser un padre para él, por favor, solo quédate, solo resiste, por favor.

—¿Estás...? —preguntó a duras penas, empecé a escuchar más movimiento al rededor de nosotros, pero estaba enfocada en él, en sus ojos jade, que a pesar del dolor que sentía y el sufrimiento, brillaban, había felicidad en ellos, yo asentí repetidamente llorando.

—Por favor, tienes que quedarte con nosotros, te necesitamos, tu hijo te necesita, no puede crecer sin un padre, necesitas conocerlo Rixon, quédate aquí, debes estar aquí, debes resistir, ¡por favor Rixon! Eres lo que más quiero, lo que más anhelo en esta vida, no te puedes ir, no me puedes dejar. ¡Rixon no quiero estar sola! —exclamé llorando, implorándole, rogándole—. ¡Quédate aquí! No me dejes...

—Nina... —susurró y sus ojos comenzaban a cerrarse, el miedo me invadió por completo.

—¡Mírame! ¡No cierres los ojos Rixon! —le exigí tomando su rostro y obligarlo a que me viera—. ¡Por favor, mírame!

—¡Ayúdame con él, James! —escuché como Job gritaba mientras se acercaba a nosotros y tomaba a Rixon ayudándolo a levantarse—. ¡No podemos esperar a que la ambulancia llegue, nosotros mismos tenemos que llevarlo al hospital!

—¡Katherine! —escuché la voz de James acercándose—. ¡Toma las llaves y ve a abrir el auto, no podemos perder tiempo!

Comenzaron a moverse rápidamente, Rixon seguía tratando verme, sabía que estaba dando todo su esfuerzo y me dolía, me sentía impotente al no poder hacer algo más para poder ayudarlo. Esto no podía estar sucediendo, ¿qué hicimos mal? ¿Qué hice mal para que esto esté sucediendo de nuevo? ¿Por qué tuvo que pasar esto? Todo estaba bien, estábamos felices, íbamos a formar una familia, estaba logrando todos mis sueños, pero, ahora se estaban desvaneciendo.