Del Amor Adolescente a Grandes Héroes.

Capítulo 13 - Ira contenida

Cómo están? Bueno quería comentar un par de cositas antes de iniciar. Para los que prestaron atención, se darán cuenta que todos estos capítulos transcurrieron en un período menor a una semana. Bastante loco por cierto... pero ya es hora de ir saltando un poco más en el tiempo y ver qué pasará entre esta parejita poco convencional. También quiero en algún momento enfocarme en lo que siente Bakugou... no soy de hacer POV, pero sí quiero dedicar algún capítulo desde su percepción de los hechos y sus sentimientos (supongo que a más de uno le interesaría esto).

En fin, no quiero adelantar muchas cosas tampoco, así que les dejo el capítulo!

Bye!

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Pasaron 5 semanas desde que Uraraka empezó a entrenar con Bakugou a solas. Las primeras dos se reunían sólo martes y jueves, dejando los días miércoles y domingo para el entrenamiento en equipo. Anteriormente Bakugou solía practicar tres veces a la semana con su grupo, sin embargo él decidió reducirlas a dos por la llegada de la castaña.

Por su puesto recibió un par de quejas, ya que ninguno sabía que el rubio se dedicaba a entrenar con Uraraka a solas... no era sencillo pero de una forma u otra, se las arreglaron para mantenerlo en secreto.

A la tercer semana, ambos jóvenes comenzaron a verse tres veces, todo por insistencia del rubio explosivo. Generalmente los martes se dedicaban a fortalecer el físico a base a trote, diversos ejercicios, estiramiento y pesas. Los jueves se usaban para perfeccionar sus kosei y eventualmente combatían... esto realmente le costaba a la castaña porque el muchacho tenía una fuerza descomunal en sus explosiones, pero claro está que nunca la atacaba directamente o saldría herida. Finalmente los viernes luchaban cuerpo a cuerpo, en esto Uraraka se destacaba mejor dado a que iban bastante parejos en velocidad. Aún así, para ella seguía siendo tarea difícil ya que Bakugou rara vez le daba una mínima apertura, además sus reflejos eran de otro mundo, y eso sin mencionar que él seguía superándola en resistencia.

Así pasaron aquellos días en los cuales la muchacha se esforzaba al máximo... Y dolía, todo su cuerpo dolía horrores!! Por las noches dormía como un bebé por todo el cansancio acumulado, y gracias a eso ya no tuvo más sueños intranquilos. Así mismo le costaba muchísimo levantarse para ir a clases ya que cada fibra de su dolorido ser, clamaban por mayor tiempo de descanso, pero claro está que no podía darse tal lujo.

Por suerte pasadas las primeras tres semanas, sus músculos comenzaron a acostumbrarse y el dolor en el cuerpo disminuyó considerablemente. Era duro, demasiado para lo que estaba acostumbrada, pero gracias a los ejercicios y recomendaciones de Bakugou, logró adaptarse medianamente rápido.

Otra cosa que notó es como su cuerpo se veía más esbelto y tonificado, no sólo por la enorme cantidad de entrenamiento, sino también porque Bakugou le reiteraba una y mil veces que no abuse de las mierdas. Según el rubio, la mierda era todo aquello contenga grandes excesos de azúcar... Eso era bien difícil con lo mucho que le gustaban los dulces, y aún así, se controló lo mejor que pudo.

Lo que también ocurrió, y esto muy a su pesar, es que se produjo cierto alejamiento de sus amigos y amigas. No es que fuera intencional, pero su entrenamiento le consumía mucho tiempo. Intentaba estar lo suficiente con sus compañeras para no despertar sospechas, pero para Deku, Iida y Todoroki ya casi no le quedaba tiempo, y eso la ponía un poco triste.

"Deku-kun..." pensó la castaña. "Qué rayos pasó que dejé de pensar en ti? Claro que aún te quiero y te extraño de a momentos, pero cómo es que se enfrió todo entre nosotros...?"  Pensó. Quizá "enfriar" no era el término correcto ya que aún lo quería mucho, pero siempre viéndolo desde el punto de vista de su amistad. Lo apreciaba y valoraba muchísimo, pero era evidente que ya no tenía esas sensaciones que la confundían en cuanto a lo sentimental.