Podía escuchar aullidos, pero no eran aullidos de un animal, sino de una persona y no eran simple aullidos, quien quiera que los estuviera haciendo estaba sufriendo y bastante
<< ¿Quién es?>>
Mis ojos se abrieron cual ventanas, lo primero que vi fue una estructura de tela marrón en la que mi cuerpo reposaba.
<<El sofá, debo estar en casa>>
Traté de levantarme y noté una punzada en la parte de mis tobillos y una picazón en una de mis mejillas, me toqué ambas partes del cuerpo, sola para notar que ambas estaban vendadas.
<< ¿Todo fue un sueño?>>
En medio de mi duda, un gran aullido de dolor me interrumpió.
Ahhhhhhhhhhhh
<<Oh, por dios es Jack>>
Me levanté a pesar del dolor que sentía en mi cuerpo y comencé a mirar alrededor tratando de buscar el origen del sonido, hasta dar por fin con el baño.
Ahhhhhhhhhhhhhh
<<Si mal no recuerdo, casi le atraviesan el pecho>>
-¡JACK!-grité tocando la puerta-¡ABREMÉ, DEJAME AYUDARTE!
Pero no escuche respuesta alguna, solo un silencio que aumentaba mi ansiedad.
-¿Jack?
No hubo respuesta
-¡JJJACCCKKK!-grité y grité varias veces, sin recibir respuesta alguna-¡ABREMÉ DE UNA MALDITA VEZ!
<<Responde>>
<<Sería posible que Jack, halla…>>
<<Imposible, el chico ha sobrevivido a otras cosas, le atravesaron el pecho y no murió, no tendría que morirse por un simple desangramiento ¿verdad?>>
-¡JACK!-gritaba mientras golpeaba la puerta frenéticamente
De pronto oí un crujido en la puerta, seguido por un “Clank”. La puerta se abrió de improvisto suavemente. De aquella puerta salió Jack, llevaba puesta un polo gris, que marcaba su pecho y unos jeans azules.
-¡Jack!-grité alegremente mientras me lancé a abrazarlo de manera instantánea
-¿Qué pasa? Si es por el baño, ya lo limpie, hubiera tardado menos pero me llamabas como loca.
-Pero qué diablos dices, pensé que te habías…
-… ¿Muerto?-dijo completando mi frase- Ya lo habías dicho antes; te he dicho que a mí nadie me puede matar y menos un par de cachorros callejeros.
-Pero yo vi como…
-Mira, no importa- ten esto dijo entregándome una enorme aguja de metal gruesa, la cual saco de su bolsillo
-¿Qué es eso?
-Necesito ir al hospital, no sé si te abras dado, pero casi me arrancan el pecho de mi cuerpo, quiero ver si me he roto algo
-Y tu…
-Llamé a un persona que ya ha trabajado conmigo antes, me debe un favor así que le he encargado que te cuide por esta noche
-Y esta cosa-dije levantando la enorme aguja de metal-¿Para qué es?
-Para protegerte, buena suerte-me apartó y se dirigió fuera de la casa pero antes de que abriera la puerta exclamó-Por poco me olvido, hay un ligero inconveniente con este plan, veras…como te lo digo sin que entres en pánico… es un vampiro, hagas lo que hagas no deje que se acerque a tu cuello.
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La Maldición escarlata
Science FictionAlgunas personas buscan el poder y otras simplemente desearían alejarse de él lo más posible, este es el caso de Katherine quien estará apunto de adentrarse en la zona mas oscuro del mundo en donde los peores miedos de la humanidad moran, arrastránd...