La Maldición escarlata

Las sombras del mal

Gracias a Dios que Jack limpio el lugar, si no cuando las chicas hubieran entrado se hubieran llevado una desagradable sorpresa. Lo único que se limitaron a hacer fue preguntarme porque no había ido y que no tenía idea de lo que me había perdido, después de eso cada una se tiró en sus camas, al igual que yo unos minutos más tarde.

A la mañana siguiente recibí un mensaje de Jack pidiéndome encontrarnos en el paradero de mi casa a las 10:30 am, salí de mi casa vistiendo unos shorts jeans azules y una camiseta gris con una corona estampada en ella. Salí de mi casa para que Allison me preguntará a donde iba, le respondí que iba a salir con el mismo chico de ayer. Después de hablar unos cinco minutos entre sonrisas y chismes, salí y me dirigí hasta el paradero y lo encontré allí llevando unos jeans azules claros sostenidos por un cinturón marrón con un polo negro y el collar de plata decorando su cuello. Me miró y se acercó hacia mí.

-¿Qué tal el doctor?

-Lo mismo de siempre ¿Qué tal Nathan?-dijo con total desinterés

-Encantador y es muy guapo-exclamé resaltando el guapo

-Jajajajajajaja, claro si te gustan las bolsas de carne con la piel pegada a los huesos, seguro es hermoso-dijo con un acento irónico en la última parte

-¿Podrías estar celoso?

En la cara de Jack se reflejó una mueca de asombro pero no por mi comentario-Ohh, ya veo así que tú también no lo notaste

-¿Notar que?

-Los vampiros son unos maestros engañando tanto a hombres como mujeres, veras te explicaré-dijo mientras me miraba con una sonrisa el rostro- Cuando un vampiro nace, se levanta de su lugar de entierro luego de unos 3 a 7 días digamos que no en las mejores condiciones, ni apariencias, algunos tienen la piel destrozada, otros están semi-podridos y otros hasta con gusanos; el punto es que los vampiros tienen un poder característico que es la auto-ilusión

-¿Auto-ilusión?

-Ellos pueden esconder su horrible físico real con una ilusión que los hace ver más llamativos al ojo humano, por eso Nathan parecía sacado de una revista de modelos.

-¿Ósea por fuera son hermoso pero por dentro son siempre horribles?

-Básicamente si pero veras los vampiros necesitan comer cerca de medio litro de sangre al día para no morir  pero si quieren mejorar su condición física y mejorar su aspecto necesitan entre 4 litros a  8 litros de sangre diariamente, es un montón de sangre y la mayoría de vampiros no la puede conseguir, así que por eso es que son una raza de población muy pequeña.

-¿Entonces Nathan?

-A comparación de otros vampiros que he visto, él se ve esplendido pero si lo vez en su forma real bueno gracias a toda la sangre que toma su aspecto es el  de un joven que sufre un severo caso de anemia y que está a punto de morir pero es mejor que un cadáver, no?

-Pero eso es…

-Difícil de tragar pero es cierto, dejemos el tema, vámonos en mi auto que tengo algo que averiguar contigo.

<< ¿Auto?>>

Jack tenía un Audi de color negro con lunas trasparentes, parecía un modelo caro. Me subí al asiento del co-piloto y me puse el cinturón.

-Bien…-dijo mientras arrancaba el auto y salía-… esos lobos que te siguieron la vez pasada no son simples cachorros para empezar, eran cazar recompensas de los colmillos carmesí, una organización de licántropos que hacen toda clase de misiones siempre que el precio sea aceptable, esos tres era un grupo de élite y el último que matamos fue un novato que ellos entrenaban.