Luego de mi cumpleaños vinieron meses difíciles, al fin pude comprender que lo que sucedía era que una gran guerra se desataba y había ciertas naciones que contraatacaban a la armada alemana para devolvernos la paz, el mapa que usaba Loy era un instrumento naval avanzado que se usaba en la guerra, sin embargo no lo disponía el ejército Alemán debido a que su padre era parte de un, llamémosle sindicato, que procuraba salvar a aquellos que serían atacados durante la guerra, y la zona de paz era una nación la cual tenía un nombre tan complicado para mí que me es difícil de recordar, la espada, nunca supe su total secreto.
En fin, la guerra nos complicó todo, el pueblo que creímos iba a ser abandonado se convirtió en una base militar entonces Loy estuvo día tras día, noche tras noche intentando descubrir una nueva ruta, un nuevo pueblo que se liberara, cualquier cosa que nos aventajara, falló tantas veces, lloraba tanto que mi corazón se derrumbaba con cada sollozo y cada lágrima, yo lo apoyé cuanto pude, en verdad lo intenté pero nada...
Pasaron mis 15 años, era el único día de total gozo, era el único cumpleaños que celebrábamos, pero siempre era una fiesta grande, éramos felices al menos un día, Dave creció también y cada vez usaba ropa más holgada que él mismo tejía, sus facciones seguían siendo delicadas cual muñeco de porcelana, su gorra siempre sobre su cabeza y cada vez pasábamos más tiempo juntos, seguíamos con la misma tarea, recolectar, sin embargo también nos encargábamos de la limpieza y la vestimenta, Dave me mostró como tejer ropa con las cosas que encontrábamos, éramos mejores amigos, pero mi corazón latía con fuerza al estar cerca de él simplemente derrochaba felicidad en mi vida, yo siempre estuve segura de que era debido a que se convirtió en alguien de suma importancia para mí que no podía más que estarle agradecida, pero mi nódulo sinusal no controlaba mis latidos de la misma manera con él que cuando me encontraba con Loy, jamás fue igual.
Aun así pasaron meses y más meses, seguíamos varados en el mismo bosque, todo era una rutina, me levantaba, Richard tenía el desayuno, yo le llevaba su desayuno a Loy porque pasaba todo el día planeando algo para salir de este bosque y ni se dignaba a comer, Dave desayunaba junto con Richard y yo y luego se desaparecía un rato y así solo quedamos Richard y yo compartiendo un desayuno.
Como todas las mañanas Richard y yo solo nos quejábamos de la poca compañía que había en el bosque, que a pesar de la fauna silvestre ni Loy ni Dave recordaban que los humanos necesitan de otros para poder sobrevivir pero no solo de su apoyo como si fueran máquinas, si no como alguien con quien charlar, compartir, como veníamos haciendo cuando llegamos al bosque, lo cual dejó de ser algo real en cuanto la guerra estalló en sus momentos más pesados, Richard me preguntó que si yo sabía a donde iba Dave todas las mañanas, le dije que en realidad jamás me lo había preguntado, pero que este chico era bastante misterioso con sus salidas durante de las mañanas y su gorra, así que comenzamos a divagar imaginando ¿Qué cosa se encontraría debajo de su gorra? ¿Un dragón? ¿Una cicatriz? ¿Estaría calvo? ¿Sería un espía de guerra?, no lo sabíamos pero teníamos una curiosidad tremenda por conocerlo, y así todas nuestras mañanas, Richard llegó a sugerir seguir a Dave luego del desayuno, pero yo me negué rotundamente debido a la privacidad de cada quien.
Llegó mi cumpleaños número 16, ya habíamos pasado más de 2 años varados en el mismo bosque, las ilusiones comenzaban a achicarse, no veíamos salida por ningún lado, pero aun así la tradición de festejar mi cumpleaños seguía en pie, Loy estaba acabado pero a pesar de ello vino a festejarme, me quería como a una hermana y yo adoraba su presencia por ello nunca faltó a mis festejos, sin embargo esa tarde del 17 de Noviembre tenía algo que comentar.
Después de un festín de venado y la convivencia que tanta falta nos hacía Loy se levantó y vociferó -" Primeramente me gustaría felicitar a Sami por su décimo sexto cumpleaños, y pues también agradecer a cada uno de ustedes por confiar en mí, se han vuelto mi segunda familia y no tengo manera de pagar la amabilidad de cada uno de ustedes"- suspiró- "Me temo decirles que las tropas se han percatado de la existencia de este bosque no tardaran más de unas pocas semanas en hallarnos, pero que no cunda el pánico, creo que estoy cerca de la iluminación y pronto saldremos de aquí, se los juro", ciertamente todos confiábamos en Loy pero ya había pasado mucho tiempo desde que se había encerrado en su lugar de calma para descubrir un plan y estábamos totalmente cansados de esta situación, ese día el festejo se opacó y todos nos retiramos a nuestros aposentos luego de un triste brindis, tan triste que podíamos ver como la luz de la esperanza se iba junto con el Sol de sangre que se ponía sobre el horizonte.
Pasaron las horas y no podía conciliar el sueño, Loy estaba cansado y ahora trabajaría con presión sobre sus hombros, presión de tener tres vidas en sus manos, presión de decepcionar a su padre, presión de no tener más de unas cuantas semanas para declarar un plan que nos salvase, me sentía terrible, había aprendido a ser fuerte pero esto me llevaba a mis limites, cuando de repente escuché la voz de Dave llamándome desde fuera, salí y me llevo cerca del río, nos recostamos en el pasto y miramos las estrellas, platicamos un rato de la situación, él tampoco podía volar hacia el cielo esta noche, tenía muchas dudas y complicaciones, me contó que cada noche recordaba el terrible incendio de su cabaña, el dolor que sintió cuando esos monstruos de ojos con sed de sangre dispararon sus estruendosas armas hacia él y siguió adelante -"Sam, desde el día que te conocí en mi pueblo quedé maravillado, me diste fuerzas para seguir corriendo luego del incendio, luego de que una bala de plata se llevara un poco de mí, pudimos compartir tanto durante estos largos años que he caído rendido ante tus bellos ojos de diamante, con esa mirada que cura cualquier mal, Sam, estoy totalmente enamorado de ti", en ese momento mi corazón latió con fuerza y creí todo posible, quería decirle que yo sentía lo mismo, y que quería estar con él lo poco que quedara de tiempo en nuestras vidas, hasta que suspiró y dijo- "Tengo un secreto Samara, debido a ese secreto no puedo estar contigo, en verdad lo siento pero no podía guardarlo más, me encantaría poder sentir tus labios de fresa en este momento, pero es un sueño irreal, imposible, no es algo que pueda suceder, Sam lo lamento, no podía guardarlo más", se levantó, sus ojos estaban llenos, lagrimas desbordaban de los lagos que la luz de luna reflejaba en su mirada y se fue corriendo, mi corazón cayó en pedazos y lo único que quedó fue mirar hacia la luna que destellaba con gran fuerza como si todo fuera posible, pero Dave lo acababa de señalar, el amor no era algo posible, no entre nosotros, nunca comprendí el porqué, pero estaba decidida a descubrirlo, esto no terminaría aquí, no ahora que sabía que Dave correspondía mis sentimientos, no lo iba a perder, no mientras esa luna destellara con poderío sobre las sombras absolutas del bosque, si ella no iba a perder la ilusión de iluminar la noche siguiente yo tampoco iba a rendirme, el vacío entre nosotros no era más que una sola ilusión irreal e intangible.
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A mi chica de la Luna: Omne initium habet finem
Novela JuvenilSam es una niña judía de 13 años que tiene una vida común y corriente hasta que una noche monstruos de ojos rojos llegan a invadir la paz que hay en su vida, su familia es destruida a causa de estos y queda sola contra el mundo hasta que Loy, un chi...