Bangtupios

Capitulo 3

Big Hit era un culo. O eso era lo que V pensaba seguido, ya que los horarios de ella eran los más tempranos y peor, no podía dormir siesta. Mientras se levantaba a las 5 de la mañana para llevan a las 6:30 (si, tardaba en todo) miraba como todos los Tupios estaban desparramados en sus camas ya que se tomó el tiempo de ir de habitación en habitación para saber cómo estaban. Definitivamente le había robado el papel de mamá osa a la caperucita.

Se estaba preparando un té mientras prendía la tele, ponía Netflix y miraba en el sillón Marie Kondo. En eso una de sus alarmas comenzó a sonar anunciando que tenía que empezar a dirigirse hacia el trabajo, ya que este no quedaba tan cerca que digamos. Comenzó a putear por todo lo que veía ya que no había terminado su tecito y mucho menos mirar su programa. Pero aún así se hizo otro té que puso en su termo térmico y lo llevo a su trabajo. Nadie jodía con el té de V.

En el camino puso música en sus auriculares y se preparó mentalmente para estar sola, por dos horas eternas, ya que sus amigos coincidían en horarios y a las 8 tenían que presentarse en la empresa, donde se encontrarían con ella. Al llegar saludó a todos los del personal que la conocían a ella y al resto de los tupios. Subió al ascensor y llegó al piso del salón de baile. Entró y aplaudió sola cuando vio que era la única en la habitación. Si, no se quería encontrar con los del otro grupo ya que por las mañana no se le ocurrían las mejores conversaciones ni tenía el mejor humor del mundo. Era preferible solamente estar sola.

Narra V:

Después de una hora entera de volver a practicar la coreo que me enseñó la Ramo, me dí cuenta que ya me salía a la perfección, solamente falta practicarla entre todos imaginando que estábamos abriendo los premios. Me senté en el medio del salón para volver a tomar de mi té y me dí cuenta de que ya no tenía más. Me quejé y salí del salón para ir a la cocina y hacerme un poco más. Cuando estaba en uno de los pasillos del gran edificio de Big Hit, vi la cocina y me dirigí corriendo hacia ella. Terminé de poner todo el té del mundo en el termo y lo empecé a tomar mientras caminaba de regreso al salón. Lo hice re caliente pero mejor, así no me lo termino tan rápido como el anterior.

Cuando volví al pasillo vi una cámara, no, dos cámaras. Que estaban pasando por el pasillo y por otros pasillos. También escuché risas y carcajadas, como las de la Ramo. Mierda. Caminé más y más rápido teniendo el té con cuidado mientras doblaba en la esquina del pasillo y me acercaba cada vez más al salón de baile. Pero de repente me gritan en el oído "Te encontré!" mientras me agarran por el hombro. Yo me encogí del susto y me volqué la mitad del té en la remera. Pegué un grito y tiré el té caliente al suelo, arrepintiéndome al instante. Mi muñeca y cuello ardían de lo putamente hirviendo que estaba el té. Y en ese instante juré que iba a matar a alguien.

-No sabes como esconderte, no Jung...? Jungkook?- me dijo riendo una voz bastante reconocida mientras una cámara venía y capturaba el momento. 

-TENGO CARA DE JUNGKOOK?!- pregunté aunque no lo parezca lo más tranquila que podía estar en un momento como este. Él se quedó callado mientra más personas se acercaban a la escena, sus amigos.

-Y ahora que hiciste Jimin?- dijo Yoongi mirándolo serio mientras bufaba y se ponía una mano en el bolsillo de su pantalón. Los demás contemplaban el té en todos lados, hasta en mi. No era broma cuando dije que quería todo el té del mundo.

-Pensé que era Jungkook, ok? Y terminé asustándola. Ese corte no sale desapercibido...- dijo susurrando lo último. No estaba tan apenado como me hubiese gustado escucharlo mientras hacía una seña al de la cámara para que deje de grabar. Yo me agaché para juntar mi termo y él hizo lo mismo. Deje la escena lamentable como toda una diva dramática para ir a buscar un trapo y limpiar la mugre que hizo Jimin. Tuku me había enseñado a hacerlo.