Beloved Ghost

Extra 4

Error solo observo a Ink pacientemente, sentado en una silla cercana. Esto era casi todos los días, pasaba tanto que Error no entendía cómo Ink no aprendía que seguir haciendo esto no lo ayudaría en nada. Ink estaba nuevamente embelesado en sus obras artísticas, en esta ocasión estaba pintando lo que parecía ser otro universo... pero esta vez las cosas habían tomado un giro muy raro... los monstruos no estaban en el subsuelo, sino en alguna especie de nube o sueño o algo así. ¿Qué?, él no era adivino, ni lector de mentes, era solo un fantasma tratando de interpretar qué demonios Ink estaba pintando... otra vez.

-... Bueno, vamos a ponerle un fin a esto... - Murmuró para sí, Ink no lo oiría, estaba muy centrado en lo suyo como para hacerlo.

- ¿Pero qué demonios...? – Lentamente, Ink se llevó una mano a la frente. – Se fue la luz, genial...

Error solo rodo los ojos. Era casi medianoche, y en lugar de ir a dormir, Ink estaba molesto por no poder con-Oh no, no lo lograras infeliz, pensó sonriendo muy maliciosamente, levantándose para seguir a Ink. Pobre, oh pobre diablo, si tan solo Ink supiera que sin importar lo que hiciera esa noche, no podría seguir trabajando...

- Listo, con esto debería de-¿no?, eso sí es raro... - Esto nunca había pasado, nunca desde que creó este lugar. – Entonces tal vez...

Nuevamente, sonriendo enormemente de una forma muy malintencionada, Error rodó los ojos, por dentro pensando: "Intenta todo lo que desees, pero yo gano hoy, enano". Si Error no quitaba sus manos de los cables principales dentro de la pared, la corriente no circularía sin importar lo que Ink hiciera. No siempre tenía que haber una explicación para que ciertas cosas pasaran, ¿no es así?

-... Esto no tiene sentido... - Llevaba media hora moviendo cables y presionando botones, pero nada.

- Vete a dormir de una buena vez, tarado. – Susurro Error para sí, pero Ink logro escuchar las primeras palabras.

-... Debo estar imaginando cosas. – Era muy tarde después de todo. – Ya mañana arreglaré esto...

No lo quedaba de otra, era tarde, todo estaba en completa oscuridad, y a este ritmo se le iban a acabar todas las velas... Rindiéndose finalmente, Ink fue a su cama a dormir finalmente, siendo seguido por un muy alegre y sintiéndose muy superior Error. Al estar seguro de que el creador estuviera dormido, Error dejo de ejercer sus poderes en los cables de corriente, permitiendo a la electricidad circular normalmente de nuevo. Apago la luz y encendió el aire acondicionado en silencio antes de irse a la sala a ver su preciada Undernovela.

¿Qué?, era un fantasma y no tenía la necesidad de dormir, y es Undernovela. Más bien estaba siendo lo suficientemente misericordioso de hacer esto cuando Ink estuviera dormido para no darle malos sustos o empezara a creer que estaba loco... lo cual era debatible en su humilde opinión. La cocina de Ink no funcionaba correctamente, debería de crear o comprar una nueva, pero no. Se salvaba que le tenía compasión o sino no cocinaría nada de nada. El horno sí que funcionaba, pero el enano era tan olvidadizo que lo que sea que metiera allí tenía 90% de probabilidades de convertirse en una tiesa masa negra...