~La Nueva Manada~

~Capítulo 11~

-Entonces, ¿Como estuviste estos días?- habló Liam terminando de encerrar a Brett en un búnker que les prestó el señor Argent.

Theo miró para atrás y después para los costados como si buscara a alguien.

-Disculpa, ¿Me hablas a mí?- dijo señalándose.

-Si idiota te estoy hablando a vos-

-Pensé que tu plan era ignorarme hasta que me muera, como lo llevas haciendo estos días-

Los ojos del beta se elevaron hacia su rostro.

La chimera miraba para abajo, esquivandolo.

El cuerpo del mayor se tensó cuando Liam tomó su rostro entre sus manos con delicadeza obligado a observarlo.

Los ojos de Theo derrochaban tristeza, le dolía que lo ignorara de esa forma, aunque obviamente no se lo demostraba.

No le gustaba que vean que lo hirieron, lo hacía sentir débil. Pero con él no podía evitar sentirse así, el solo hecho de pensar que en cualquier momento podrían lastimarlo, o incluso matarlo. Le dolía. Lo mataba por dentro.

-Perdón-

-Pensé que iba a ser mejor que cada uno siga por su lado, pero mientras más te evitaba, más pensaba en vos, en todo lo que pasamos juntos, en tu tonta sonrisa que me vuelve loco, en todas esas veces que me salvaste la vida...- dijo con culpa.

Soltó el rostro de Theo y se pasó las manos por el pelo con frustración.

-¿Y que pasó?- preguntó en un susurro.

-El beso-

-Te arrepentis de haberme besado- afirmó enojado.

-No, claro que no es eso-

-Entonces ¿Qué es?-

Liam abrió la boca para contestar pero este continuó.

-Por que si mal no recuerdo VOS me besaste a MÍ- gritó ahora sí mucho más furioso.

-Theo, calmate. Yo en ningún momento dije que me arrepiento de haberte besado- dijo y seguido a eso lo agarró de los hombros tratando de calmarlo.

Pero el lo sacó bruscamente.

-No me toques-

-Theo...-

-NO, no quiero que me hables,
me mires o me toques sabiendo que soy un estúpido juego para vos. Nunca debiste besarme por que es demasiado obvio que no significó nada para....-

-BESARTE FUE LA MEJOR DECISIÓN QUE TOMÉ EN TODA MI VIDA ¿SI? NO HAY UN SOLO MINUTO EN QUE NO PIENSE EN VOS, EN TUS LABIOS CON LOS MÍOS, EN...-

Y el menor también fue interrumpido, pero esta vez por unos dulces y agresivos labios, unos labios que ya extrañaba y que amaba con todo su ser.

Ambos se dejaron llevar por sus sentimientos.

La chimera pegó sus cuerpos apretando sus manos en la cintura del beta, y este posó las suyas en su cuello.

El beso se profundizó, dejando entrar sus lenguas.

Era posesivo, lleno de lujuria y pasión.

No les importaba nada, en ese momento eran ellos dos en todo el mundo, después de todo se lo merecían.

Theo dejó sus labios y empezó a morder su cuello. Liam movió ligeramente su cabeza para el mayor tuviera más acceso a él.

Se separaron a duras penas, con respiraciones agitadas y un cuello lleno de chupones.

-Tenemos que ir a tu casa, a menos que quieras que te coja en un búnker de cazadores-.

*NARRA SCOTT*

No lo pensé dos veces y junté nuestros labios.

Estaba tan excitado, hacía tanto tiempo que no me sentía así.

Como se mordía el labio, sus ojos rojos, la forma de su rostro, sus piernas, dios absolutamente todo su cuerpo me parecía realmente perfecto.

El beso se sintió tan bien, lleno de emociones.

Podía sentir un cosquilleo en todo mi estómago.

Pero fue arruinado de la peor forma.

Una imagen de Allison invadió mi mente, su sonrisa, la forma en la que me mirara y como me hacía sentir.

Me sentí tan culpable.

Logré separarme bruscamente de ella.

Su rostro mostraba confusión.

-Esto estuvo mal, muy mal- dije con negación y la voz agitada.

-Esto es un chiste ¿No?- preguntó ella llena de bronca.

-No- hablé para luego salir corriendo de ese lugar.