Capítulo 1

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MyungJoon regresaba a su casa después de haber estado seis horas en la escuela. Caminaba junto a su amigo, JinWoo, a través de las tranquilas calles de las afueras de Seúl.

No hacía mucho que inició una construcción en el lote baldío cerca de donde vivía MyungJoon; a éste siempre la causó curiosidad qué era lo que se construía. Aquella vez vio cómo la construcción era pintada de blanco y otros colores en tono pastel. Movido por la curiosidad, convenció a JinWoo de ir a preguntar a los trabajadores para qué sería aquella construcción.

- La parte frontal será una dulcería – explicó uno de los trabajadores.

- ¿Y qué hay de la parte trasera? – preguntó JinWoo.

- Una pequeña fábrica de dulces.

- Increíble. Gracias – respondió MyungJoon con una sonrisa.

Él y JinWoo siguieron caminando. El mayor, quien más que un estudiante de último año de secundaria parecía un niño pequeño, se mostraba muy entusiasmado por tener una dulcería con todo y fábrica tan cerca de casa; el menor simplemente lo escuchaba con una sonrisa.

Llegaron al punto donde ambos tenían que separarse y así lo hicieron. Cuando MyungJoon llegó a su casa saludó a sus padres y se dispuso a hacer sus tareas.

Pasados unos días, llegó al fin el día de la inauguración de la dulcería. MyungJoon estaba muy emocionado y fue a la inauguración junto con JinWoo. "El Edén Park" abrió las puertas y la gente comenzó a entrar. MyungJoon no tenía ni idea de qué comprar ni tampoco si en verdad iba a comprar algo, él sólo quería estar ahí. JinWoo estaba decidido a comprar chocolates, así que ambos amigos fueron a escoger unos cuantos.

MyungJoon terminó por no comprar nada y acompañó a JinWoo a su casa.

- ¿Por qué no compraste nada? – preguntó el menor en el camino.

- No lo sé, supongo que estaba tan emocionado que no pude escoger algo en específico y tampoco puedo comprar toda la dulcería, no tengo tanto dinero.

- ¿Qué haré contigo, Joonnie?

- Darme mucho amor y dulces, sobre todo dulces – contestó MyungJoon sonriendo. JinWoo no pudo evitar sonreír también y le compartió de sus chocolates.

Los dos amigos siguieron hablando de cosas sin sentido hasta que MyungJoon pudo dejar a JinWoo en su casa y luego se fue a la suya. Él siempre llegaba alegre, pero notó cierta tensión en su casa que hizo que su sonrisa desapareciera.

- ¿Todo bien? – preguntó al ver a sus padres en la sala.

- Joonnie, toma asiento – indicó la señora Kim. El chico obedeció.

- Hijo, ¿qué has estado haciendo con tu vida? – preguntó su padre.

- Joonnie, no lo malinterpretes, sabemos que eres como un virus feliz para tus amigos, pero no puedes vivir de sonrisas – añadió su madre.

- No entiendo qué quieren decir – comentó MyungJoon.

- Joonie, tienes que hacer algo además de estudiar. Lo que quieras, ir a practicar algún deporte o lo que sea – explicó el señor Kim.

- Te entenderemos sino lo sabes aún, te daremos un tiempo para pensar, Joonnie.

- Está bien – contestó MyungJoon casi en susurro y se fue a su habitación.

¿Hacer algo? Comprendió que sus padres tenían razón, solo querían que comenzara a hacer cosas más productivas, pero él no sabía qué. Su padre había mencionado los deportes, podría intentarlo, pero seguía sin estar completamente seguro.

Pedrería a colores (Rocky Y MJ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora