- ¡Me alegra mucho eso! – exclamó Moon Bin.
- ¿Eso significa que tendremos mucho cacao? – preguntó el Ahau.
- Y otros dulces – añadió MinHyuk. – Gomitas, malvaviscos, caramelos, hay muchísimas opciones -.
- Y nosotros trabajaremos ahí - comentó el Ahau.
- Ahora que lo pienso, ¿cómo llegarán a Corea? – preguntó Moon Bin.
- ¿Eso que tienes en la espalda es una mochila de viaje?
- Sí. No es que sea malo, ni quiero ofenderlos, pero aunque ustedes son pequeños, no cabrían aquí.
- Podemos hacernos aún más pequeños.
- ¿¡En serio!? – clamaron sorprendidos MinHyuk y Moon Bin al mismo tiempo.
- Claro. Saldré a avisar a todos que vengan.
Y así lo hizo, el Ahau de los chocolátricos llamó a toda su gente y éstos se hicieron aún más diminutos. Lograron introducirse en la mochila de viaje de Moon Bin, aunque el Ahau se quedó en el hombro de éste para indicarle el camino hacia la salida de la selva.
Salieron en la noche y se dirigieron al hotel, no sin antes reportarse con lo guías de turistas para decirles que estaban bien y que una búsqueda no sería necesaria. Prepararon sus maletas para el regreso a Corea. MinHyuk comenzó a preocuparse por los chocolátricos, ya que si los detectaban en el aeropuerto les iría mal, pero el Ahau le explicó que ellos no podrían ser detectados por la seguridad del aeropuerto, por lo que no había nada de qué preocuparse.
Y en efecto, los chocolátricos no fueron detectados para el alivio del par de coreanos. Después de un largo y cansado viaje, llegaron a la península y se dirigieron a su casa para desempacar. MinHyuk entró a su habitación junto con Moon Bin y movió el armario para mostrar un compartimiento secreto, para sorpresa de mayor. MinHyuk abrió el compartimiento y sacó un llavero, le explicó a Moon Bin que eran las llaves del Edén de Park las cuales habían permanecido ocultas ahí todo el tiempo.
Abrió la puerta que conectaba a la casa con la dulcería y luego sacaron a los chocolátricos de la mochila de Moon Bin (los pobres habían permanecido ahí todo el tiempo). Las criaturas salieron de la mochila y retomaron su tamaño.
- Les presentaré la dulcería. Está bastante descuidada y llena de polvo porque no he abierto el lugar en nueve años.
- Eso se puede arreglar – dijo el Ahau con una sonrisa.
- MinHyuk les dará un recorrido por el lugar, yo iré con los Kang para avisarles que ya llegamos; pondré la excusa de que estás dormido, MinHyuk – indicó Moon Bin.
- Rocky – afirmó MinHyuk.
- ¿Tu apodo?
- Sí. Ahora que reabriré el Edén de Park quisiera volver a ser llamado así, Rocky.
- De acuerdo. Vuelvo después.
MinHyuk le dio un recorrido a los chocolátricos por lo que era la fábrica y la dulcería. Cuando terminó, el Ahau mencionó que tenía una gran idea para remodelar todo aquel lugar. MinHyuk accedió a que él se encargara de los cambios y ofreció su ayuda, pero el Ahau le dijo que no sería necesaria, pero que no debía de entrar al lugar hasta que él le dijera. MinHyuk asintió y salió de la dulcería confiando plenamente en los chocolátricos.
Los meses pasaron. Moon Bin y MinHyuk siguieron trabajando en la perfumería, aunque naturalmente mantenían su distancia con GyeonKong y es que MinHyuk sabía muy bien que no valía la pena mezclar sentimientos con los negocios, lo había aprendido muy bien.
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Pedrería a colores (Rocky Y MJ)
Fiksi PenggemarInspirada en "Charlie y la fábrica de chocolate" de Roald Dahl. Kim MyungJoon es un estudiante de último año de secundaria. Cerca de donde él vivía, se abrió una dulcería: "El Edén Park". MyungJoon decide trabajar ahí para aprovechar su tiempo l...