Cadenas de amor enlazado

Capitulo 8: El Festival parte 2

Atla estaba en la cima de una cabañas del pueblo, observando desde las alturas a Yato y Yuzuriha que estaban paseando por los puestos. Aún recordaba como la amazona de plata lo convenció para hacer esto.

FLASCKBACK

-¿Yato?- Repitió el lemuriano incrédulo, viendo con sorpresa a la rubia.

Estaban en una de las áreas de entrenamiento, donde Yuzuriha le pidió hablar con el joven y le contó sobre su cita con el Santo de Unicornio. La reacción de Atla era para pintar en un cuadro, nunca se esperó que a quien considerara una hermana tuviera un interés amoroso en el coreano.

-Pensé que te gustaba Shion- dijo una vez recuperado de la sorpresa. Había visto como ambos se llevaban bien y pensó que terminarían juntos.

-Así era, pero al ser Patriarca no puede tener ninguna pareja por que debe ser un ejemplo a los demás Caballeros- explicó la mayor. -Además la guerra santa me permitió crecer más como persona y pensar sobre algunas cosas y me di cuenta que lo que sentía por Shion era más admiración y respeto, yo los estaba confundiendo-.

-¿Y con Yato es diferente?- Interrogó el pelilila.

-Es cierto que Yato es muy impulsivo e inmaduro, también aveces orgulloso pero... tiene un buen corazón y aprecia a sus compañeros... además el ser algo inmaduro puede ser un poco tierno. No se explicarlo muy bien, pero es lo que llego a pensar al verlo- dijo en voz baja, mirando al suelo con un sonrojo.

Atla parpadeo varias veces para ver que no estaba alucinando. En todos los años que conoce a Yuzuriha es la primera vez que la veía expresar tantas emociones ¡Y por un hombre! Nunca pensó ver eso alguna vez, menos por alguien como el Santo de Unicornio.

-De acuerdo...¿Qué quieres que haga?- Pregunto aceptando.

-Tan sólo que te asegures que nadie nos valla a interrumpir, sólo unas horas hasta que te avise que puedas retirarse- respondió levantando la mirada.

FIN FLASCKBACK

-Supongo que es mejor Yato que ese sujeto- se dijo a si mismo, refiriéndose al ex-prometido de Yuzuriha.

En otra parte, no lejos de su ubicación estaba Albafica observando cuidadosamente el área, más específicamente a un puesto de comida. Lo particular del puesto es que hay estaban Tenma y su Diosa, comiendo carne de ese puesto.

Cada vez más se le hacía una cita que una salida de amigos, y lo peor, no sabía como tomar eso: por un lado no era correcto que Athena sea tan cercana con un solo Caballero, ella debía amar y tratar a todos por igual o generaría conflicto en el Santuario. Y por el otro lado. Al verla tan feliz como es ahora, y aunque ocultaba su cosmos para un Guerrero experimentado como Albafica, era capaz de sentirlo. El cosmos de su Diosa era más cálido y amable de lo normal, provocando una mezcla de confusiones en la mente del pisciano.

-¿Y tu crees que después de todo este tiempo ese voto siga sirviendo?- La pregunta que le hizo Aspros con relación a la pregunta sobre el voto de castidad de Athena resonó en su mente, y fue aquí donde se cuestiono de lo que ocultaba esa frase. ¿Aspros ya sabia sobre la aparente atracción de Pegaso y Athena.

Pero antes que pudiera seguir pensando, vio como ambos caminaban cerca del puesto del padre de Agasha ¡Genial! Como si no fuera suficiente lio el que acaba de meterse en su cabeza, ahora se involucra aquella chica que crea mas confusión en la mente del Dorado.

Se subió a otro techo para observar mejor, pero sintió un golpe al moverse, chocando con alguien,

-Lo lamento- dijo inconscientemente, sin mirar con quien choco.