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El señor y la señora Kim estaban teniendo por fin un rato a solas después de las vacaciones. La verdad es que no eran ajenos a los problemas que tenían sus hijos, eran perspicaces y se habían dado cuenta de ellos; pero preferían esperar a que fueran ellos mismos quienes se los contaran. Atiny lo había hecho, Jongho a medias; pero su hijo mayor no soltaba prenda. La verdad era que estaban realmente preocupados y por ello se sentaron en el sofá a discutir sobre el asunto. Pero el timbre de la casa sonó tomándoles desprevenidos. Era Wooyoung.

Le explicaron que ninguno de los chicos estaba en casa y dónde estaba cada uno. Este solo asintió y les agradeció diciendo que iría con Atiny y Hongjoong a ver si podía ayudar con Mingi. Pero en cuanto los adultos cerraron la puerta miró al suelo con la cabeza llena de idea contradictorias. Jongho estaba en una cita. ¿En una cita? Con otra persona, besando a otra persona, regalando su sonrisa a otra persona, diciéndole cosas dulces a otra persona, mirando con amor a otra persona... no a él. No, ya lo había decidido. Primero, aquello era solo por su gran parecido con Atiny. Segundo, él era completamente heterosexual; no tenía pruebas pero tampoco dudas. Y por último, debía dejarlo ir como él le había dejado ir dos semanas antes. Suspiró y caminó por las calles sin rumbo fijo.

Quería ir a ayudar a su novia; pero supuso que ya tendría suficiente ayuda con Hongjoong y él solo estorbaría. Lo único que hacía era estar allí sufriendo por ver a la chica de esa manera ya que no podía hacer nada más. Necesitaba descansar. Descansar de todo. 

Sin darse cuenta sus pasos terminaron en la parada de autobuses. Seonghwa estaba también allí. Ambos se miraron sorprendidos, se saludaron con la cabeza y miraron al suelo tristemente; situándose uno al lado del otro como si esperaran al autobus. En verdad Woooyung no quería ir a la ciudad realmente, solo había acabado allí y ahora no tenía escusa para no quedar mal delante del mayor. Tal vez podría aprovechar aquello para ver como le iba a Jongho con su cita y que su corazón dejara de marearlo de una vez.

Por el otro lado, Seonghwa se dirigía a hacer algunas compras por recado de sus madres y todo eran cosas que solo se podían conseguir en la ciudad. Era una molestia y también era obvio que querían que no estuviera en casa por un tiempo porque tenían planeado algo que le ocultaban, no era tonto.

Ahora se sentía extraño al estar a solas con Wooyoung. Recordó la última vez que estuvieron a solas. Se avergonzaba tanto de sí mismo. Además, aquel chico se parecía demasiado a su hermano mayor. Jamás olvidaría al hermano de Wooyoung, era como una herida que no se había cerrado aún después de tanto tiempo. Ojalá poder simplemente hacer como si nada hubiera pasado. Ni lo de Yeosang, ni lo de Kiyoung. 

Por fin, el transporte llegó y ambos chicos subieron a él sentándose en asientos algo alejados el uno del otro. Prefirieron pasar el rato observando por la ventana sin pensar en nada, solo para darle un descanso a sus mentes y a sus corazones. Un descanso que realmente necesitaban ambos. Y así hasta que el bus paró en una de las paradas de la ciudad. Ambos bajaron en la misma sin darse cuenta y se miraron sorprendidos. Aquello eran tan incómodo.

- Eh... esto... Hyung - habló Wooyoung para romper el silencio - ¿A dónde se dirige usted?

- A la farmacia y al supermercado. ¿Y usted?

- Yo... a ningún sitio en especial realmente. Puedo ayudarlo con las compras si quiere.

- Es muy amable, Wooyoung. Pero creo que ambos estamos incómodos, no quiero ser una molestia.

- No, no. Le ayudaré. Necesito despejar mi mente ahora mismo. 

- Sí, yo también. Vamos.

Caminaron uno al lado del otro, sin hablar. A pesar de que seguía siendo incómodo por no saber que decir, era menos incómodo que antes. Al menos era algo, un pequeño avance. 

Promise me to Stay my Twilight [MINJOONG] {Ateez}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora