C.14

10.5K 1.6K 986
                                    

—¡Ya deja de moverte que necesito arreglar ese mechón!—gritó la señora omega Kim, furiosa con su hijo que no dejaba de hacer algún movimiento por los nervios ocasionados.

Kim SeokJin soltó un quejido cuando su madre le ofreció una manotazo en la espalda, ocasionando que soltara un chillido, tras él, su madre alfa, se mantenía alegre de la vida, leyendo una revista, ubicada en la sesión de chistes, soltando una carcajada. La omega Kim al escuchar semejante risa escandalosa, que solo hizo más que estresarla, Tomó el peine de plástico y se lo tiró a base de puntería a su esposa.

—¡Auch!—se quejó la alfa tocando su frente y se giró con toda silla, notando una marca roja por el golpe ocasionado—¡Mi rostro bello!

—Deberías estar ayudando a tu pobre esposa, en vez de leer chistes sin gracia, tu hijo se va casa y lo único que has hecho todo el día ha sido, leer esa estúpida revista.

—¡Estoy memorizando chistes para la boda, cuando me toque hablar!

—No dirás esos chistes—dijo la otra poniendo ya pálida.

—¡Oh, sí, de seguro hay nuevos!—comentó un emocionado Kim SeokJin.

—Hijo, no—negó de un solo aquella omega con mirada dominante.

Ambos alfas se miraron entre ellos por breves momentos e hicieron un puchero cargado de frustración.




Jung Hoseok se contempló en el espejo, notando su bien arreglado cabello naranja de un lado mientras su saco blanco, poseía en la orillas de la mangas y cuello, brillo plateado. Se ruborizó al verse en el espejo, pasó su mano por su vientre, sintiendo un pequeño movimiento. La puerta del cuarto se abrió, ingresando su madre, que enarcó ambas cejas al ver lo hermoso que se veía su hijo, sobre todo con los pequeños aritos, que eran de imán; pero hechos de diamante y oro blanco.

La señora Jung sintió que podía romper en llanto allí, se acercó a su hijo, tomando las suaves manos, con mucho cuidado.

—Como me hubiera gustado, que tu padre te viera así—sollozó, aguantando el deseo de llorar—subió sus manos al rostro de su hijo—.Me siento orgullosa de ti, amor, críe un buen hijo y sé,que harás lo mismo con mis nietos. También que le brindaras lo que fuera de amor a tu futuro esposo y alfa. Ya eres realmente todo un adulto...

—Madre, no llores—susurró tomando las manos de su progenitora, ofreciendo un beso sobre ellas—no puedo estar triste en el día de mi boda–comentó, contempló a la mujer con ojos de ternura, cargados de mucho amor.

—Es solo que ahora me quedaré sola...ya no tendré a nadie en la casa—comentó apretando los labios.

—Siempre estaré para tí, madre—comentó el omega acariciando las mejillas de la mujer.

La puerta se abrió, ingresando la anciana Kim que enarcó una ceja derecha, la señora Jung contempló a la vieja, para suspirar, dejando un rato a su hijo con aquella mujer que deseaba tener una conversación con el futuro esposo de su nieto.

Jung Hoseok sintió un dolor en su vientre, ocasionando que diera un brinco, bajando su mirada a su abultado vientre, respiró con profundidad ¿Qué fue todo eso?

La puerta se cerró, dejando a la anciana Kim que se sentó sobre una silla cercana, con mucha elegancia y sosteniéndose de su bastón de madera; pero bañado en oro.

—¿Cómo te sientes, nervioso?

—N-no—dijo buscando el espejo para contemplarse y así no ver la intensa mirada de esa señora.

2SEOK || Yolo Yolo Yo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora