Felix

Problemas pasan - Parte 1

PRINCIPIO BÁSICO PARA MANDARLO TODO A LA MIERDA 9:

Y algunos problemas seguirán pasando...

No puedo evitar imaginarme a Felix en algún acto que cualquiera trataría de pervertido. Tampoco puedo evitar el calor abrasador que arde con más furia que antes.

El que Felix no sea virgen es lo que menos esperé de él, pues siempre lo vi como alguien demasiado serio y bonachón para llegar a tener una vida sexual activa. ¿Pasó más de una vez? ¿Con más de una chica? ¡Dioses!

—¿Vas a decir algo o me mirarás así toda la hora?

—¿Así cómo?

—Como si estuvieras escribiendo alguna clase de escena erótica.

—Si escribiera una escena erótica no tendría problemas, ni me pondría como quinceañero viendo porno por primera vez. —El problema es que esa escena te tiene a ti. Sí, eso es lo que pasa precisamente—. La verdad me has pillado por sorpresa, eso es todo.

—Va.

—Lo digo fuera de bromas e ironías, eh, no pensé que dejarías de lado tu faceta reservada para decírmelo. Eres un pervertido, Felix.

Le guiño un ojo y él se echa hacia atrás en su asiento, blanqueando sus ojos con la paciencia al límite. Parece un anciano refunfuñando sobre cómo está la juventud en estos días.

Por fin le doy una mascada a la rebanada de pizza con calma, sintiéndola ya más fría y con poco sabor. Aun así, mis pensamientos son perturbados por el constante deseo de seguir preguntándole a Felix más cosas sobre él y el libro. Como sé que he llenado una cuota suficiente de confianza, prefiero no hacerlo. Quizás es mejor que todo fluya, como antes.

Ah... los momentos de antes. Me hace gracia pensar en ellos.

—Hola, amigos. ¿Ustedes son pareja?

Una mujer de cabello largo, liso y oscuro se ha situado junto a nuestra mesa con una expresión expectante. A su lado, un sujeto lleva una cámara profesional con la estampa del logo de  televisión nacional.

Descolocada por su repentina (e inoportuna) aparición, miro a Felix como preguntándole si la mujer realmente está junto a nosotros o si es invención mía. Pero Felix parece querer hacerse un ovillo y ocultar su rostro del mundo.

Tengo que ser yo la que responde.

—Eh, no. No somos parejas y...

—¿En serio? —pregunta con una voz molesta y de falsa incredulidad— Porque los acabamos ver muy juntitos hace un momento. —Señala hacia la ventana—. Somos del Canal TV6 y estamos entrevistando parejas para... Un momento... ¿Eres Felix Frederick?

El camarógrafo ahora apunta hacia Felix, a quien no le queda de otra que enfrentar la cámara con su expresión seria.

—Oh por Dios, es él —dice la mujer a su compañero—. Con lo difícil que es pillarlo y venimos a encontrarlo aquí.

Desde mi lado de la mesa, la situación se torna mucho más incómoda, sobre todo porque a todas luces Felix no quiere ser el foco de atención de nadie, mucho menos de un canal con tan mala reputación como Canal TV6, el cual en su momento alimentó todo lo malo que de él decían.

Felix mira a la cámara y luego a la entrevistadora. Va a hablar. Dirá algo y todo lo editarán para dejarlo mal, eso es seguro.

Me inclino sobre la mesa y cubro sus labios.