El Proyecto Anticristo: Allí Donde Viven Los Monstruos

Capítulo 6: Entregándose Al Pecado (+18)

Carlos

Carlos: No sé que coño ha pasado ahí abajo, quien escribió eso en la pared o que significa ese mensaje pero no vamos a volver ahí abajo nunca más, a partir de ahora es zona prohibida

Joan: Exacto, nadie pondrá un pie nunca más en ese pasadizo

Miki: Pero hay que seguir investigando, y más ahora que he dejado a Nicolás suelto por aquí

Carlos: ¿Que?

Miki: No creo que Nicolás se vaya a quedar ahí dentro, lo he liberado y ha sido la peor decisión de mi vida

Joan: Ey tranquilo, no sabemos si ha sido Nicolás o no

Miki: Le estaba llamando a el Joan, está claro que es Nicolás, estos tres meses van a ser muy moviditos con una especie de espíritu errante suelto por aquí

Carlos: Vale, vamos a dejar el tema por hoy y vámonos a la habitación, merecemos un buen descanso después de tantas experiencias

Joan, Miki y yo entramos a la habitación que compartimos como almas en pena y es que los últimos días habían sido nefastos y muy cansados para nosotros, solo pido un descanso fuerzas sobrenaturales que al parecer reinan por aquí ¿tan complicado es darme lo que pido?

Miki: Creo que iré a comprarme algo a las máquinas de la cafetería ¿viene alguien?

Joan: Paso, me voy a quedar aquí tumbado lo que resta de día

Miki: ¿Carlos?

Carlos: A ver yo no tengo ganas pero tendré que ir para protegerte

Miki: No me va a pasar nada tranquilo, quédate aquí con Joan, regreso enseguida

Carlos: Ten cuidado

Miki: Que si, lo tendré, venga hasta ahora

Creo que es hora de hablar con Joan sobre lo que encontré en esos informes, tengo que aprovechar que Miki ha salido unos minutos. Me levanto de la cama, me dirijo a la de Joan y me siento en ella para empezar a hablar pero algo raro me pasa, no me salen las palabras, es como si mi boca no quisiera hablar, entonces oigo de repente una voz en mi cabeza
"Besalo, yo sé que quieres"

Joan: ¿Carlos? ¿Estás bien?

"Venga besalo, no te arrepentirás, se que te gusta pecar, hazlo"
Sentía como mi cuerpo se movía solo, no podía hacer nada, entonces sentí como mis labios chocaban contra los de Joan, oh dios, besar a este chico es como estar en el paraíso, esto no ha sido una decisión mía pero definitivamente no quiero que pare, en medio de mis plenas facultades intento profundizar más el beso y lo consigo ya que Joan me da permiso.
Estábamos en medio de una guerra morbosa de besos cuando entra Miki.

Miki: ¿Que hacéis?

Miki

¿Carlos y Joan se estaban besando? Eso es raro pero más raro es que yo quiera unirme a eso, no sé qué me está pasando pero estoy disfrutando lo que estoy viendo, estaba a punto de decir algo cuando todo se volvió negro.

Miki2

Bien, ahora que el mojigato se ha ido ya puedo divertirme, puede que mi personalidad sea la ira pero también me encanta algo de lujuria y placer y hoy mismo entre estas cuatro paredes solo voy a notar eso, solo placer, evitando que Miki regrese por supuesto, vamos a divertirnos pequeños imbéciles.
De un salto me pongo en medio de ellos y empiezo a besar apasionadamente a Joan.

Carlos: ¿Miki?

Miki: ¿Miki? Ese mojigato ahora mismo no está entre nosotros

Carlos: ¿Eres el otro?

Joan: ¿El otro?

Carlos: Miki tiene doble personalidad, este es el otro Miki

Joan: Pero se supone que tú pegas, no besas

Miki: Oh cariño, lo mío es pegar y follar

Carlos: Nunca pensé que oiría decir eso a nuestro inocente Miki

Joan: ¿Pero como sabes que eres una doble personalidad?

Miki: Digamos que soy un caso raro, ahora callaos y al lío

Con toda la velocidad que pude desvesti a Carlos y a Joan y oh por dios, están buenísimos, no se que me pone más, si el pene gigante de Carlos o los músculos de Joan, tengo que probarlo todo antes de que regrese el otro. Vamos a empezar por los músculos de Joan, empiezo besando sus pectorales, esos tan fibrados y tan apetitosos que no sabía que tenía hasta ahora, por su cara puedo ver que lo está disfrutando, estaba a punto de bajar a su miembro cuando siento como de repente Carlos me baja el pantalón y empieza a comerme el culo, dios, esto es un puto paraíso.

Le bajo el pantalón a Joan y bingo, una gran polla erecta y lista para mi disfrute, empiezo pasando la lengua por todo su miembro para después empezar a chuparlo y hacerle una buena garganta profunda, sus gemidos empiezan a llegar a mis oídos y me encantan, mientras, Carlos sigue disfrutando de mi culo.

Las tornas cambian cuando Carlos me empuja a la cama con una fuerza que no sabía que tenía y empieza a besarme mientras que ahora es Joan quien me come el culo, no parecen ellos, nunca los he visto en acción en lo sexual pero aún así se que seguro no son así, no sé qué pasa pero tampoco me importa, lo único que cuenta es que lo estoy disfrutando y oh sí, que estoy a punto de comerme la gran polla de Carlos Right.

Carlos

Sin tener control sobre mí mismo empiezo a meterle mi pene a Miki, o bueno, al otro Miki por la boca mientras empiezo a follarsela, no puedo parar pero tampoco quiero, estoy disfrutando más que nunca y más ahora que Joan me la está metiendo, he sido pocas veces pasivo pero tengo que admitir que Joan es el mejor activo que he tenido el placer de probar nunca.

Duramos así como unos diez minutos hasta que algo dentro de mí se cansa y dice que se quiere follar a Miki por detrás así que obligo a Joan a salirse fuera de mi, pongo a Miki a cuatro patas en un movimiento y empiezo a penetrarle fuertemente, empiezo a oír como suelta gemidos de dolor pero eso solo hace que siga más fuerte y más rápido, no sé porqué pero esos gemidos son cantos angelicales para mi, quiero más y más, quiero seguir disfrutando de su dolor.

Las embestidas empiezan a ser más erráticas y más rápidas hasta que me corro dentro de él pero esto no acaba aquí, mi polla pide más así que le digo a Joan que se acerque y que me la vuelva a meter mientras yo sigo haciendo que mi pequeño otro Miki siga gritando de dolor.

Parecía que los gemidos de Miki se estaban volviendo de placer cuando se desmayó de repente pero a mí no me importó, yo seguí y seguí como alguien me estaba pidiendo, ahora mismo solo vivía, respiraba y penetraba para complacerle a "el" quien quiera que sea.

Miki

¿Que está pasando? ¿Por que Carlos se está moviendo tan rápido encima de mi? ¿Por que siento algo grande y duro dentro de mi? Y ¿por que me estoy muriendo de dolor pero no puedo gritar? Estaba a punto de conseguir decir algo cuando de nuevo oí extrañas voces pero esta vez con una escena completa.

Parezco un pequeño niño de siete años cuando veo como un hombre se pone delante de mí y empieza a besarme y a toquetearme ¿por que me hace esto? ¿Quien es este hombre? Intento empujarle pero me es imposible ya que otros dos hombres me sujetan para que el primer hombre meta algo grande dentro de mi, grito de dolor pero nadie me oye, le pido clemencia pero no para, así es mi sufrimiento hasta que caigo desmayado y despierto en la cama de Joan con los dos chicos dormidos a mi lado y con una hoja con un mensaje escrito en la pared.

Con las fuerzas que aún me quedan de milagro agarro la nota y empiezo a leerla
"Espero que lo hayas disfrutado Miki, también espero que no te importe que haya utilizado a tus amigos para divertirme contigo.
Nos vemos muy pronto, se despide tu nuevo amigo Nicolás"