Le toma un par de segundos reaccionar y estira sus brazos para sostenerme cerca de él. Cuando me corresponde el beso, me aparto y le sonrío.
— Era todo, gracias.
Me bajo de la caja mientras él sonríe y me alejo hacia donde Kate y José me observan sorprendidos.
— Listo – le digo a Kate – ¿Ya estás contenta?
— Hmm – hace un gesto que le arruga la nariz – podrías haberlo hecho mejor.
— Traeré el marcador para escribirle mi nombre en la frente – le doy una sonrisa sarcástica.
Pero cuando volteo de nuevo hacia ellos, Leila me mira con furia. Christian le hace una seña para que espere y se aleja de ella. Mierda, viene para acá.
Doy pasos rápidos hasta mi oficina y cierro la puerta. Me dejo caer en la silla y abro el primer cajón para sacar el chocolate que dejé ahí esta mañana.
— ¿Qué haces?
Volteo a ver a verlo parado en mi puerta entreabierta. Como no respondo, él entra y cierra la puerta.
— ¿Ahora qué?
— ¿Por qué me besaste?
— Kate me retó – miento – ¿te molesta? ¿Hice enojar a tu amiguita?
— No, solo que creo que lo hiciste para molestarla.
— ¿Como en un concurso de meadas? ¿No es lo que hacen los chicos?
— ¿Qué?
Lanzo el resto del chocolate en mi boca para ganar tiempo. ¿Qué le digo? ¿Que me molesta verlo con Leila?
Me levanto de la silla fingiendo que aún mastico el chocolate y le señalo la puerta de la oficina, por donde mi sombra y yo salimos.
Regreso a la barra mientras Christian regresa con sus amigos. No hay ni señas de Leila... ¡gané!
— ¿Cuál es el plan para mañana? – pregunta Kate parándose junto a mi.
— Dormir.
— Me refiero a más tarde, ¿qué vamos a hacer?
— Es el día libre de todos, ¿de verdad quieres verlos? – arrugo mi ceño – vayan ustedes a algún lado y déjenme dormir hasta tarde.
Ella bufa algo que no entiendo y va directo a hablar a Elliot. De pronto es la hora de cerrar, así que pongo los candados.
— Vamos – le digo a mi sombra.
Él se despide de sus amigos para caminar junto a mí. Estoy muerta de cansancio y Christian aún sonríe como si acabara de ganar la jodida lotería.
Me siento en el sofá de la sala para ver el programa ese de abogados que le gusta mientras él se ducha. Apoyo mis pies en la mesita y me cobijo con su chaqueta. Me estoy quedando dormida cuando siento que Christian me levanta.
— ¿Estás despierta?
— No – sonrío y me recargo en su pecho.
Me lleva en sus brazos hasta la habitación, me deja en la cama y me pone la cobija. Luego lo siento acercarse a mi por la espalda y pasa su brazo por mi cintura.
Despierto sobresaltada por el maldito ruido que viene de la sala... ¡Juro que voy a deshacerme de esa estúpida guitarra pronto! Me levanto furiosa y busco mi ropa para entrar a la ducha.
(...) Wait for me, wait for me
Oh, it's all better now,
it's all better now
Wait for me, wait for meGonna soften the blow,
soften the blow and give it up
I saw the surprise,
the look in your eyes, I gave it up
Gonna be who I am, be who I am,
and give it up
I traveled the way... (...)Gruño todo el camino hasta el baño, pero el sonido de la guitarra, su voz y la letra de la canción me gustan... mucho.
Después de un relajante baño con agua caliente, me planto en la cocina frente al jodido arcoiris andante que me entrega una taza de café.
— ¿Qué cantabas? – arqueo la ceja.
— Nada, ¿por qué?
— Hmm, solo me pareció conocida la canción – me siento en la barra.
— Ven a desayunar, hay mucho qué hacer antes de que lleguen – me mira mientras sorbe de su taza de café.
— ¿Lleguen, quién? – pregunta estúpida – ¡Ay no! ¿Los invitaste de nuevo?
— Si, les dije que cocinaría para todos un rico pastel de carne y verduras – frunzo el ceño.
— Odio el pastel de carne.
— ¿En dónde lo probaste? – me mira con los ojos entrecerrados.
— En ningún lado, pero no me gusta.
— ¿Como sabes que no te gusta si no lo has probado? – se ríe.
— Por qué sí, yo sé que no quiero pastel de carne.
— Bueno, pero no has comido del que yo preparo, te va a gustar.
Ruedo los ojos con frustración por su necedad.
— ¡Lo vas a probar y te va a gustar! – me ordena.
Lo ignoro para seguir comiendo mis waffles con mermelada. Christian quiere ir al centro comercial pero no tengo ni la más mínima intención de salir, así que él se va y yo vuelvo a dormir.
El sonido de la puerta me despierta, me incorporo rápido y me tallo los ojos antes de caminar a la sala.
— ¡Fiera!
— Idiota.
— Eres una anfitriona terrible – se queja José – te falta educarla Chris.
El intruso se ríe mientras camina a abrir la puerta de nuevo. José está sentado en la barra comiendo una bolsa de frituras y me acerco a él para quitársela.
— Hola chicos – saluda Ethan.
Luke, Elliot y mi hermana entran detrás de él. Kate se queda parada en la sala y gira su cabeza para todos lados con confusión.
— ¿Qué? – le gruño.
— Se ve diferente – su mirada recorre la sala.
— ¿Verdad que si? Yo dije lo mismo – se ríe José – ahora sí parece una casa decente.
— ¡Hey! – golpeo su hombro – siempre ha sido una casa decente, poco amueblada pero decente.
Christian coloca una charola humeante sobre la barra y todos miramos embobados. Empieza a cortar y servir un pedazo de carne y vegetales en platos.
— Amor, ven a ayudarme. Los demás tomen un plato y siéntense en la mesa.
Todos toman su plato y se acomodan en el pequeño comedor. Ojos grises saca una botella de limonada del refrigerador mientras busco los vasos para servirlos.
Camina hacia la mesa con su plato y el mío mientras yo lo sigo con los vasos de limonada. Me señala el asiento libre, en la cabecera de la mesa y me siento. Él trae una silla de la barra y se sienta junto a mí, tan cerca que su brazo choca con el mío.
— Gracias papá, gracias Mamá – se burla José.
Todos se giran a verlo y se ríen. Yo lo veo con el ceño fruncido, pero los observo a todos: ríen, juegan, platican y conviven. Lo hacemos como buenos amigos y me agrada esa sensación, tenerlos aquí en mi departamento no es tan malo como parece.
José mira a Christian, luego a mi y guiña un ojo. Seguro el idiota piensa que el jodido arcoiris es buena influencia para mí... ¿O eso lo pienso yo?
Canción en Multimedia:
Kings Of Leon – Wait For Me
ESTÁS LEYENDO
Someone Like You (Versión Fanfic)
FanfictionAna es una chica resentida con la vida, con falta de esperanza y suerte. Aprendió que todo se logra a base de esfuerzo y que aquello que "fácil llega, fácil se va". Hasta que conoce a un chico demasiado irritante, según ella... ~ • ~ Me encantan las...