Capitulo 3

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-Bien -Camino hacia ella y salieron la aquella habitación.

Fue cuestión de segundos para que llegaran al comedor, ahí ya se encontraban presentes Ayato, Subaru y Yui.
Reiko se acercó a Reiji, quien iba entrando al comedor con unos platos.

-Dejame ayudarte, Reiji-san -Dijo tomando los platos.

-Gracias, Reiko.

-No es nada -Respondió dejando los platos en la mesa.

Después de unos segundo, todos se encontraban ya presentes; así que comenzaron a comer. Reiko se había sentando al lado de Yui, la de orbes rosas ya se había hecho la idea de que ella comenzaría a vivir ahí de ahora en adelante, y aunque al principio estaba algo asustada. Las palabras de la menor la habían tranquilizado de alguna manera, estaba feliz de no ser la única chica en aquella mansión.

Cada desayuno, almuerzo o cena era silencioso estando con los Sakamaki; sin embargo, todo sería diferente a partir de ese día. Y todo por la presencia de la menor de la familia.

Reiko observaba disimuladamente a todos, nadie hablaba, ni siquiera Yui. Todo era tan aburrido, ella no era alguien a quien le gustaba el silencio. Necesitaba escuchar ruido, por lo menos, las voces de sus hermanos y de Yui.

-Que aburrido -Susurro, tomando un trozo de carne, para después llevarlo a su boca.

Tenía que admitirlo, estaba delicioso.

-¡Esta muy bueno! -Exclamó, mientras tomaba otro pedazo.

-Evita hablar durante la comida, Reiko -Le dijo Reiji.

-¿Por qué? -Pregunto para llevar aquel bocado a su boca, y después tragarlo -. ¿No te gusta que elogien tu comida? Por que tengo que admitir que es lo más delicioso que he probado.

-No es eso -Respondió el de lentes -. Pero me alegra saber que mi hermanita disfruta lo que cocino.

Reiko asintio con emoción.

-No me gusta estar en silencio, ¿por qué nadie dice nada? -Pregunto mirando a cada uno de los presentes.

-Reiji dice que es de mala educación -Respondió Ayato.

-Reiji-san -Reiko lo miro con un puchero. Laito solto una leve risa -. Odio el silencio, esto debe ser más animado.

-¿Animado? ¿Cómo? -Pregunto el chico del sombrero.

-Una charla -Respondio ella -. Vamos, hablemos un poco. Cuentenme cualquier cosa, no importa si tiene sentido o no, quiero saber más sobre ustedes.

-~Nfu, ¿y por qué Reiko-san no nos cuenta algo sobre ella? -Pregunto Laito, con ese tono pervertido que tanto lo caracteriza.

-Serás idiota -Susurro.

-Yo también quisiera saber más sobre Reiko-san -Dijo Yui.

-¿Con que es así? -Pregunto -. Bien. Diganme, ¿qué es lo que quieren saber?

-¿Tocas algún instrumento? -El primero en preguntar fue Laito.

-Si, piano y violín.

-Ya tenemos algo en común, hermanita -Volvió a decir, ella solo lo miro extrañanda -. También tocó el piano. Deberíamos tocarlo juntos algún día.

-Me encantaría -Respondió, cuando se trataba del piano, no se podía negar a nada.

-¿Cuál es tu postre favorito? -Pregunto ahora Kanato.

-El choco flan.

-¿Tu comida favorita? -El siguiente en preguntar fue Ayato.

-Curry -Hizo una pequeña pausa -. Aunque, también me encantan los takoyakis.

Nuestra Hermana | Diabolik Lovers Donde viven las historias. Descúbrelo ahora