Las horas en la sala de entrenamiento eran interminables o eso me parecían siempre. Comencé a lanzar cuchillos hacia una diana sin fallar ninguno. Tuve que frenar ya que me seguía doliendo la herida en el costado.
-Deberías parar. —Clint apareció de brazos cruzados.— No es bueno para ti.
Seguí a la mío intentando aguantarme los quejidos. Iba a coger otro cuchillo pero Clint de paro enfrente mía.
-Por favor Lucia para y así hablamos.
-No me apetece hablar contigo Clint. –Suspire y salí de allí rápidamente. Mi situación sentimental con Barton era muy rara.
El tenía una increíble mujer y unos increíbles hijos pero hacia un año nuestra atracción sexual aumento hasta acabar en la cama desde entonces teníamos una especie de relación sin ser relación la cual era secreta y el único que sabía de ella era Steve aunque hace unos días...
Flashback
-¡Hola chicos! Miren quienes vinieron de visita.
Levante mi cara del móvil y mire hacia la puerta. Mi cara cambio al ver a Laura con sus tres hijos. Todos se acercaron corriendo pero yo no lo hice (1) Apenas podía moverme porque estaba con algunas heridas (2) Tampoco era lo que más me apetecía.
Ella se acercó a mi y me saludó.
-Siento no levantarme pero como me mueva lo más seguro es que muera. –Dije riendo falsamente.
Todos estaban embobados con los niños o escuchado historias románticas sobre Clint y Laura y la verdad que esto último apenas me importaba. Me levante de la silla lentamente.
-Si me disculpan me voy a mi habitación a descansar.
-¿Quieres que te ayude? —Preguntó Steve asentí y me ayudó a ir hacia mi habitación.
Antes de salir mire a Clint y este me miro triste. Tuve que aguantar las lagrimas hasta tumbarme en mi cama donde no aguante mas.
-Lucía... –Steve acarició mi espalda mientras lloraba como una niña pequeña cuando le quitan su caramelo favorito.
-Nunca he querido a nadie, ¿por que me pasa esto a mi?
-Eres muy joven todavía y siento decirte que te romperán el corazón más de una vez.
-Si yo sabía que esto no iba a ningún lado. –Solloce y me acurruqué más a mi. — Déjame sola Steve.
Este hizo caso y se levantó de la cama. Antes de cerrar la puerta me dijo que para cualquier cosa él estaba allí.
La puerta se volvió a abrir y tire un cojín hacia la persona.
-Steve te he dicho que quiero estar sola.
-Lucía...
Esa voz hizo que me enderezara en mi cama. Me seque las lagrimas y me mire.
-¿Que?
-Lo siento.
Reí asintiendo mientras las lagrimas caían.
-Ella es la madre de mis hijos y con la que he compartido casi toda mi vida tu...
-Yo solo he sido unos cuantos polvos.
-No, no has sido solo eso.
-Barton vete por favor.
En el pasillo camino a mi habitación alguien me agarró la mano y me hizo girar chocando con su pecho. Sabía quien era porque ese olor era único. El me abrazo y le respondí el abrazo.
-El otro día no me dejaste terminar te dije que ella es la madre de mis hijos pero tú eres a la persona que quiero en mi vida.
Levante mi cabeza para mirarlo. Mis ojos estaban ya aguados.
-Soy adicto a ti Lucía.
