La batalla había terminado, había caído gente, habíamos perdido a alguien más. Mi mundo cada vez estaba más abajo.
Me crucé de brazos junto a Bucky observando como el cura decía buenas cosas sobre Tony. Ahora yo no me puedo creer que ya no esté aquí... El había aportado tantas cosas buenas en mi vida, me hizo saber lo que era vivirla y ahora el no estará aquí.
Estaba aguantándome las lágrimas, las chicas grandes no lloran. La mano de Bucky me masajeaba el hombro lentamente reconfortando me bastante. Le susurré un pequeño Gracias y cuando todo el funeral acabo me aleje un poco de todos.
Me senté a las orillas de ese magnífico lago y suspiré mirando al horizonte.-¿Sabes qué harás ahora?
Giré un poco mi cabeza para mirar a Thor mientras este se sentaba junto a mi.
Me encogí de hombros puesto que aún no tenía demasiado claro que haría con mi vida en este momento.-Puedes venirte conmigo, me voy a salvar la galaxia.
Me dedico una sonrisa entrañable y yo le sonreí también. Agarre su mano y la acaricié lentamente. Me levante y él se levanto rápidamente a mi vez. Le mire y los ojos y sonreí tristemente.
-Aquí se separan nuestros caminos para siempre Thor.
-¿Esto es un adiós definitivo?
-Eso es lo que parece.
Bucky me silbó desde la lejanía para avisarme de que nos íbamos.
-¿Te vas con el?
-Por favor, recuerda que te voy a querer siempre Thor.
Le di un corto y rápido beso en los labios con un amargo sabor a despedida y fui donde estaba el soldado. Este entendió que no quería hablar así que me monte en el coche negro con Falcón y el Soldado de invierno para dar comienzo a una nueva etapa de mi vida.