La fina cortina no servía para tapar aquellos rayos de sol que entraban por mi ventana aquel primer lunes de mayo. Perezosamente mire el reloj el cual marcaba más siete de la mañana y me levanté. Comencé a ponerme mi ropa deportiva ya que hoy me tocaba entrenar con Bucky y me recogí una coleta. Al pasar por la cocina salude a Steve y Natasha los cuales eran aún de los pocos que estaban despiertos.
-¿Café antes de entrenar?
Asentí ante la pregunta de Steve y agarre el café que él me sirvió. Me estaba quedado prácticamente dormida apoyada en mi brazo cuando el gracioso de Scott tiro de este haciéndome chocar fuertemente con la encimera.
-¡Me cago en ti!
-Perdón, perdón, perdón. –Dejó muchos besos en mi cabeza mientras yo ponía expresiones raras.
-Mira me voy a entrenar.
Me termine lo que me quedaba de café y salí de allí. Subiendo las escaleras para ir a la sala de entrenamiento choque con Bucky dándome justo en el lado donde tenía un gran moretón.
-¿Bucky? Pensábamos que íbamos a entrenar.
-Si, si, tu espera aquí que tengo que mear.
Le dije un corto ok y comencé a estirar y hacer ejercicios mientras le esperaba. A los pocos minutos vino secándose las manos con papel que tiro en la toalla.
-¿Lista?
-La verdad es que no, ayer entrenando con Clint acabe un poco mal la verdad.
-¿Que te hizo?
Me giré y subí un poco mi camisa dejando ver los moretones que estaban repartidos.
-¿Estas segura de que entraste con Clint i con Hulk?
-Ahora que lo pienso, si fue con Clint.
-Deberías tener más cuidado.
-Dejémonos de preocuparnos por mi y vamos al lío.
Después de casi dos horas de entrenamiento estaba totalmente muerta así que me tumbe en el suelo con la postura de estrella de mar respirando.
-¿Me he pasado mucho?
-Oh no, solo que yo estoy muerta.
James salió de la sala y yo me incorporé. Después de pasar toda la mañana y casi toda la tarde relajándome y disfrutando de mi tiempo libre salí hacia el comedor y no había nadie.
-Friday.
-Dime señorita Stone.
-¿Donde están todos?
-El señor Stark, Rogers, Banner y Lang en una misión. La señorita Maximoff y Visión en una cita, Barton y Romanof han salido a visitar a la familia de este y Barnes está en su habitación.
-Muchas gracias.
Antes de nada marqué el número de mi pizzería favorita y pedí una barbacoa. Parada frente a la habitación de Bucky dude si llamar o no pero al final le llame.
-Adelante.
Abrí la puerta lentamente.
-Quería decirte que he pedido pizza y que ahora mismo estamos solos.
-Vaya pues que bien.
-¿Tan malo es quedarte solo conmigo?
Bucky abrió los ojos y negó
-¿Quieres pizza o que?
Bucky se levantó de la cama de un salto y me siguió hasta la mesita del salón donde había colocado la pizza y dos refrescos de cola.
-Iba a ver una serie.
-¿Cual?
-Stranger Things.
Asintió cruzándose de brazos y yo me senté en el suelo. Después de mil horas más tardes nos habíamos terminado la primera temporada y mitad de la segunda.
-¿Podemos seguir viéndola?
Mire el reloj y vi que era bastante tarde.
-Mañana tenemos que trabajar y todo Barnes.
Puso carita de perro y yo agarre sus mejillas sonriendo.
-No pongas esa cara que es trampa sargento.
-Tu siempre me la pones.
Puse cara de ofendida y este río. Acercó su cara a la mía y me dio un beso.
-¿Vamos a poder seguir viéndola?
Me quede pillada durante unos segundos y luego le volví a dar un beso.
-Pero solo un capítulo.
-Siii mamá.
Ambos nos sentamos pero esta vez Mas juntos y me acurruqué en el peso de Bucky.