Sin Límites (JaeJun)

CAPÍTULO 10

En la mañana RenJun se encontró solo, el lugar que había ocupado JaeMin al lado de su cama estaba vacío; sabía que esto iba a ser de este modo, él sólo vino a desahogarse con él, JaeMin jamás aceptaría que le gustaban los hombres; JaeMin es justo como su ex, siempre están en negación, para no ser juzgados buscan una novia y a escondidas dan rienda suelta a sus verdaderos deseos sexuales, con cualquier estúpido que les crea. RenJun ni siquiera sabe porque está pensando en esto, cuando él más que nadie lo tiene claro; no está buscando una relación, vamos tiene 19, porque atarse a alguien si tiene mucho tiempo para disfrutar; sin embargo anoche después de la conversación que mantuvieron, aquella que fue tan íntima que sintió que conocía más a JaeMin y lo hacia quererlo y anhelarlo, ahora estaba martillando su cabeza. Luego de la charla, compartieron una cesión de besos que inició el propio JaeMin, hasta quedarse dormidos; ahora más que nunca entendió el porqué su poca tolerancia con las personas homosexuales, su novia se la hizo, engañarlo con una chica; eso para un hombre que se dice heterosexual es justo como dar directo en su orgullo y hombría; al parecer JaeMin no tiene suerte en el amor. Tal vez él tampoco.

Se encontraba en la cocina desayunando junto a una de las señoras del servicio; vio a su padre pasar; pero apenas si se percató de su presencia y a diferencia de otras veces en que se lo cruzó e intentó conversar con él; ahora en cambio parecía preocupado y apurado; RenJun lo ignoró como siempre y luego de terminar de desayunar se fue a su habitación.

No había visto a JaeMin durante todo el día; no le dio mucha importancia porque seguro el mayor estaba tratando de convencerse así mismo que no es gay; para RenJun era claro que la negación de JaeMin hacia su orientación sexual no se iba a ir de la noche a la mañana solo por haberse acostado con él.
Se dispuso a dormir cuando oyó como alguien abrió la puerta; tontamente creyó que era JaeMin, por lo que fingió estar dormido.

— Hoy voy a vengarme contigo por lo que hizo tu madre — dijo una voz profunda y áspera.

RenJun se asustó, esta persona no era JaeMin; porque vengarse de su madre si murió hace más de seis años; entró en pánico y cuando quiso gritar el tipo tapó su boca con su mano.

— Estás asustado — el sujeto se rió fuerte como si se estuviera burlando de él — te pareces mucho a ella, tus ojos son iguales a los de MieLing.

Mientras hablaba, RenJun se dio cuenta que este tipo era un psicópata total, eso no hizo más que aumentar su miedo.
Sintió que él tipo lo apuntaba con una pistola en su cabeza; que no pudo evitar que de sus ojos salieran las lágrimas sin control. Necesitaba que JaeMin apareciera por esa puerta y lo salvara como siempre.

— Ahora vas a ser un chico bueno — dijo el desconocido mientras lo levantaba de su cama — vamos a ir a dar un paseo, no queremos que los que me buscan nos encuentren ¿cierto?— el tipo lo miro de pies a cabeza, aún apuntándole en la cabeza y dijo — tal vez te conserve, la última vez que te vi eras un niño, ahora eres un chico atractivo incluso a los ojos de un hombre.

Lo que decía este hombre no tenía ningún tipo de sentido, sus lágrimas seguían saliendo, no podía pensar; cuando pensó que lo sacaría de su recámara el tipo cogió la caja que hace días había encontrado en el laboratorio de su madre; la abrió, él ni siquiera recuerda haber logrado abrirla no entendía como lo hizo el tipo.

— Así que tu la tuviste todo el tiempo; después de todo estaba secuestrando a la persona correcta.

RenJun no entendía, la caja fue abierta y no había nada, su mente no fue más que a JaeMin, diablos él la abrió.

— Dime desde cuando la tienes, pareces sorprendido.

Para ese momento su boca estaba libre de la asquerosa mano de ese hombre — hace unos días, pero no la pude abrir.

El tipo rió otra vez de manera escalofriante — pero está claramente abierta y tu guardaespaldas se llevó lo que tenía.

Escuchar eso no hizo más que apretar su corazón, pero porque — que es lo que tenía — dijo con su voz temblorosa RenJun.

La pregunta quedó olvidada porque en ese momento otro hombre irrumpió su cuarto, este era como de 30 años tal vez mientras que el otro probablemente que lo tenía amenazado con una pistola calculaba que estaba a finales de sus 40 años o tal vez más.

— Jefe vinieron por nosotros — su voz era la de alguien asustado.

— Bien llevaremos al niño, necesito tomar algo de esta casa y será él.

El otro hombre más joven negó — Jefe supieron que veníamos a la casa de la familia Huang, creen que la información lo tenemos nosotros y no el Servicio de Inteligencia, creen que los traicionamos y estamos vendiendo la información a un mejor postor.

— Tranquilo no te asustes, yo me voy a llevar a este niño ....

Se escucho disparos allá afuera; RenJun vio a su padre entrar con uno de sus hombres con pistolas en manos.

— Jack — Dijo con asombro su padre.

— Diría gusto en volver a verte pero no es así, tu esposa nos llevó a donde estamos ahora.

RenJun no entendía nada, estaba totalmente perdido como si fuera una total pesadilla.

— Tu me traicionaste — dijo con odio su padre.

En ese momento llegó otro hombre — Jefe es mejor salir la policía está acá.

Cuando RenJun pensaba que se lo llevarían, el segundo hombre que entró a su cuarto lo soltó; cuando llegó su padre el hombre que llevaba por nombre de Jack lo pasó a este tipo.

Estaba llorando como un niño en los brazos de su padre cuando los tres hombres se habían marchado; no recuerda estar de ese modo con su papá desde que era un niño.

Cuando llegó la policía, fue aún peor, él creyó que lo iban a interrogar respecto a lo sucedido y no que llevarían a su padre acusándolo de corrupción de funcionarios y lavado de dinero.

Él estaba sólo nuevamente, no había un hombro en donde llorar y tampoco nadie que respondiera sus preguntas. Se sentía traicionado no solo por JaeMin sino también por su familia; había tantas dudas e interrogantes que sentía que se ahogaba y que en cualquier momento colapsaría.