Capítulo 23: "♫Te necesito♫"

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Perseguidos por un mal autentico, y bajo el ala de la señorita Léa, Alik Reverse, uno de los catalizadores que más es juzgado por su pasado, hoy se encuentra atrapado entre la espada y la pared. Víctima de una situación que está fuera de su completo control, nuestro amigo, se ve forzado a buscar respuestas para poder liberar a su colega.

—¿Qué es lo que puedo hacer? —se preguntó en lo que veía con desesperación la situación, y la terrible tensión del momento hacía que su cuerpo empezara a sudar.

—¡Alik, debe de haber algo que puedas hacer! ¡Piensa! —le gritó Léa, quien fue apretada más por el látigo de ese sujeto para que se callara, y eso la obligó a soltar un grito de sufrimiento.

—¡Léa! —preocupado, volteó un momento hacia ella y luego volvió con Iris, quien empezaba a ponerse algo pálida por su falta de reacción—. Es más fácil decirlo que hacerlo —mencionó entre dientes, pero luego cerró los ojos, lo cual fue interpretado por los enemigos como una señal de resignación.

—Ese chico ya se ha dado cuenta de que no puede hacer nada. Al final, tanta palabrería de su parte fue en vano —mencionó el reptiliano que reía sin pudor.

—Tendré que hacerlo —mencionó Alik, quien ahora volvía a estar en sí, y decidido tomó algo de aire.

—¿Qué va a hacer? —preguntó el sujeto con extrañeza al ver que Alik no se entregaba a la desesperación.

—¿Quizás...? —murmuró True para sí mismo en lo que observaba con detenimiento. Sí, las sospechas de este falso catalizador, eran correctas. Ante el caos Alik había perdido las esperanzas por un segundo, pero fue aquí que, cuando él cerró los ojos, recordó lo que había leído con su amiga en la biblioteca, así que decidido, creyó que lo ideal era empezar con el ritual para hacer de Zaid, su propio subordinado.

—¡Escucha bien mi canción, zorro estúpido! —le gritó el chico de mechones dorados, y enseguida se llevó una mano al pecho preparándose para cantar, es aquí que a pesar de la mirada que Zaid soltaba era fría y sin emoción, acató la petición de su viejo compañero, más adelante ambas lunas apagaron un poco su luz para luego concentrarse en enfocar a un único individuo, el cual era el catalizador, quien poco a poco su cabello empezó a tornarse de un hermoso albino con reflejos carmesí, y seguido de eso, sus ojos empezaron a soltar ese genérico polvo estelar para así más tarde llegar a escucharse una hermosa melodía de piano junto a unos claros pero llamativos latidos.

—Uno... dos... tres —el muchacho aclaró su garganta y empezó a cantar con una hermosa suavidad que atraparía hasta el más frío de los seres.

♫ "Mi corazón está caído,

Pero mi vida está alzándose,

No obstante, aquí estaré,

Esperándote suavemente como podrás ver."

♫ "Quiero relatarte un futuro,

En donde no haya penas para ninguno,

Así que ven, sígueme,

Mi mundo es para ti así que no llores..."

Alik estiró su mano poco a poco hacia Zaid, quien pareció empezar a reaccionar frente a su canto mientras unos pequeños brillos dorados flotaban a su alrededor, y aquel gesto, le permitió aflojar un poco el agarre del cuello de Iris, así que eso hizo que la chica pudiera volver a respirar. Para este punto la melodía subió un poco más su ritmo.

Note Max ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora