⟨ « Su nombre era Byeol, que significaba estrella.
Ella era la estrella que iluminaba su oscura noche. » ⟩.
Cuando ambos se juntan, crean una mezcla rara pero muy buena. Cómo si se tratara de algo exótico.
Amor, dudas, temores, celos, malentendidos...
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—¿Qué tienes, By~? —preguntó su mejor amiga, Mitsuha.
—Nada. . . —se acomodó al lado de la japonesa y tomó el control para prender la televisión y ver Netflix.
Era viernes, habían salido de la escuela y había invitado a Minnie y JiNa para ver película toda la noche, comiendo palomitas y papas fritas junto con helado. Ambas habían accedido, pero por parte de JiNa iba a llegar más tarde debido a que su familia ya tenía planes para esa tarde.
—Estas muy extraña. . . —insistió—. No brillas como siempre —tocó la nariz de la pelinegra.
—Qué estoy bien, Minnie.
—Claro que no lo estás —volteó verla directamente a los ojos—, somos mejores amigas y siempre nos contamos todo. . . ¿Acaso ya no confías en tu mejor amiga? —se llevó al pecho su mano, dramatizado la situación.
—¡No! No es eso, solo que. . . Es muy complicado ¿Sabes? —la pelinegra miró los ojos de Mitsuha—. Nunca pensé que me pasaría algo así. Y de que duele, sí duele mucho.
—Okay, me estás espantando, dime ¿Que está pasando? —dijo Mitsuha con mucho cuidado.
—Me gusta alguien —Mitsuha ahogó un gritó de sorpresa—. Pero a ese alguien le gusta otra persona. . .
La japonesa seguía impactada, no se esperaba el que ella estuviera enamorada de un chico. Eso no encajaba con EunByeol, su EunByeol. La pelinegra, aunque era tierna, linda y de vez en cuando romántica, siempre anteponía su estudio y decía que no iba a tener pareja hasta que terminara de estudiar y tuviera un trabajo estable que le permitiera ser independiente. La meta en la vida de Byeol no era tener pareja y casarse, pero decía que si llegaba, lo aceptaría.
Aun que, en este momento solo dijo que le gustaba. . . Pero así era como iniciaban las historias de amor.
—Unnie . . . —la japonesa puso su mano sobre los hombros de su amiga, confortándola.
Después cayó en cuenta de que a ese alguien que se encontraba en la mente le Byeol, sentía cosas por otra persona. Y eso si que tendría que doler.
—Siento una presión horrible, aplastando mi corazón. . . Minnie . . . ¿Qué debo de hacer? —ese dolor se incremento en el lugar mencionado por la pelinegra.
—Primero que nada: ¿Estás segura que le gusta alguien? Quizá solo fue un malentendido y-
—Le escribió una canción, yo la leí.
—Oh. . . ¿Pero estas segura al 100%?
—Le pregunte, pero no respondió nada. Aún que se mostraba muy incomodo o sorprendido por la pregunta y eso lo evidencio —con cada palabra que decía ella, sentía como la esperanza de tener algo con BeomGyu moría lentamente, como cuando vas apagando un fuego—. Diría yo que es como un 99%.
