UN AMOR IMPOSIBLE

capítulo 13

UN AMOR IMPOSIBLE
capítulo 13
DARIEN

Nos separamos y por unos momentos solo nos veíamos a los ojos, mientras las gotas de lluvia caían, el frío calaba hasta los huesos pero nuestro deseo de estar juntos era más fuerte, Serena llevo sus manos a mi pecho y lento comenzó a desabotonar mi camisa.
La mire a los ojos, debía dudar de ella, no era posible que solo con un par de palabritas y unas lágrimas me convenciera, pero ella tenía ese poder, parecía tener en sus manos mi voluntad.
La mire a los ojos, su cuerpo era perfecto el de una mujer, totalmente, mojado sus pezones levantados por el frío y la exitacion...
-vamos a la cabaña...- susurré pero ella tomó la parte superior de su vestido y se lo quito con las dificultades de un vestido mojado, me dejó ver su cuerpo blanco firme y juvenil, tan bello que sentí celos de la lluvia que lo tocaba.
La acerqué a mi cuerpo sentí el calor que emanaba de ella, y la cargué coloque mis manos sobres sus glúteos y la bese... Comenzamos una batalla, nuestros cuerpo parecían estar desesperados por tocarse eramos como dos criaturas salvajes, en medio del bosque mordiendo, rasguñando y besando cada parte de nuestros cuerpos... Sus hermosos senos, hacia babear mi boca, los masajee y bese hasta hacerla gritar, sus gritó se confundían con la lluvia por un momento el frío se convirtió en el más abrazador fuego, éramos solo ella, yo y la luna, la única testigo de una entrega total, acaricie cada, parte de su anatomía, cumplir mis más ocultos caprichos, y todos los sueños y fantasías que tuve con ella, el lodo y el agua no importaba,  lo importante era saciar el deseo salvaje, que los dos teníamos. Lo más excitante y estraño fue darme cuenta que apesar de su forma de vida yo era el primer hombre... No es que fuera de esos que le dan mucha importancia, pero no me lo esperaba, su feminidad parecía estar hecha a media de mi... El rubor en sus mejillas y sus uñas enteradas en mi espalda me confirmó que dolió,  pero poco a poco lo disfrutaba hasta convertirse en una diabla, y seducirme solo con su lengua, no era necesarias las palabras, nuestras manos, labios y cuerpo ya lo habían dicho todo y más.
Terminamos, no nos dimos cuentas de cuando terminó de llover, hasta que nos vimos llenos de lodo, ramas, y hojarasca... La tome entre mis brazos, bese su cabeza, ella se acurrucó en mi pecho.
- Darien... Te amo...- dijo suave acariciando mi abdomen.
- Serena... Tienes mucho que contarme tenemos que salvar a tu hermano... - dije al postear mi mano aun costado sentí el anillo de mi madre y esa fue la señal para decidirme...
- Quiero que seas mi esposa...- dije y le coloque el anillo, lo sé tal vez es una locura proponerle matrimonio a una chica que solo he visto un par de veces y de la cual hasta hacia unas horas desconfiaba, pero me nacía lo sentía en lo más profundo de mi corazón, si la dejaba ir ese tipo jamás la volvería a dejar libre, la perdería para siempre.

SERENA
Darien calmo la fiera en su interior, me escucho y paso lo que más había deseado desde que lo conocí, nos unimos en una sola piel, está claro que no imaginé que fuera al aire libre, y después de una pelea, pero suena tonto y a la vez falso, pero algo que tengo que agradecerle a Diamante es que jamás se atrevió a tocarme, me mantuvo pura según el, para ser la mejor venta de su vida, jamás se imaginó que estaba guardadome para Darien.
Después de esto, no quiero volver con Diamante nunca... No quiero separarme de Darien, terminamos de satisfacer nuestros deseos carnales... Sin importar el lugar me acurrucó en su pecho, y escucho su corazón que parece susurrar en cada latido, te amo...
Me hace una proporción que deseaba pero no esperaba... Ser su esposa... Y como a el anillo de su madre en mi dedo.
- Darien... Yo...- digo muero de ganas por decir, gritar que si!!
Pero Sami el está antes que mi felicidad
-que pasa? Acaso no quieres?- dice incorporándose para sentarse,
-no es eso es solo que... Tengo que volver...- digo y al centrarme me tapo, con el húmedo vestido.
-lo sé... Pero creo saber quién puede ayudarnos... anda vamos a la cabaña, para bañarnos...-
Me pongo el vestido, solo para cubrirme por que está arruinado. El solo se pone su pantalón, y caminamos hasta la cabaña que está algo retirada, al entrar enciende las luces y es muy hermosa y lujosa.
- anda voy a prender la ducha...- dice y me señala el baño.
Comienzo a sentir el frío, y empiezo a tiritar, saca una manta, me la coloca sobre los hombros, se pone una camisa y sale de la cabaña a los pocos minutos vuelve...
- listo... Vamos a bañarnos tenemos que ver al señor Tomoe...-
- Tomoe... Es tu padre?-
- es más que eso... Es mi amigo... Vamos bonita... Es una historia que tengo que contarte... Pero ahora es más importante salvar a Sami, y a ti...- dijo tocando la punta de mi nariz.
Terminamos de bañarnos, solo faltaban doce horas para que me regresará con Diamante, en el camino me preguntó cómo es que había terminado en el puente el día que nos conocimos...
Decidí comenzar a contar desde el inicio de las desgracias, comense con la muerte de mamá, hasta que llegue al día de mi escape...
-  Diamante me dijo que Sami estaba muerto, y me mostró unas fotos donde se veía inconsciente lo creí, sin Sami en mi vida, ya no tenía motivo para estar en ese infierno, por la noche cuando el bar estaba más lleno, me escabullirse entre los clientes hasta llegar, a la puerta de servicio donde los proveedores del licor, hacían las entregas por la noche era el lugar menos vigilado, tome la perilla y sedio, pero no contaba que había un guardia a fuera que intento detenerme pero le he dado un golpe tan fuerte que hice se tambaleó, y mientras reaccionaba corrí hacia la malla de alambre que cerca el terreno, mire un hueco muy pequeño... Con fuerza, trate de hacerlo grande por lo menos lo suficiente para caber, el hombre estaba cerca a si que a la fuerza, me metí, las puntas del alambrado, rasgaron mi ropa y piel, perdí un zapato, pero al verme libre corrí, corrí Darien como si la vida se me fuera en ello... No sé a las cuántas cuadras me detuve... Me mires estaba hecha un asco... Termine por votar el otro zapato, y camine por las calles, trata de encontrar un motivo para vivir, uno solo, pero por más que pensaba y le daba vueltas, no encontré nada... Fue así como tome la mejor decisión...-
-  como que la mejor decisión... Que estás loca?!!- dijo Darien sorprendido
-  si!! Por que si no hubiera subido a ese puente... No me hubieras salvado...- contesté y apreté su mano, que se encontraba en la palanca de velocidades.
-  sabes... Ese día fue algo loco... Por algunos contratiempos cambie mi ruta habitual para ir a la escuela...-
-  lo vez... Es una señal... Tenemos que estar juntos...- dije emocionada.
-  por que te llevaste el anillo...?- pregunto serio pero sereno, suspiré
-  cuando saliste del departamento, entre a la alcoba para recostarme un rato, por curiosa abrí el cajón de ti buró y lo ví, se me hizo muy bonito y solo me lo probé para ver cómo se me veía, fue en eso que sonó el timbre y pensé que eras tú, y habías olvidado algo... Pero para mí desgracia era Diamante, en fue quien revolvió tu cuarto, y te robo el dinero de una caja...-
-  sabes... Debo aceptar que dude de ti, pero algo muy en el fondoe decía que tenía que confiar... Perdón por lo de anoche...-
-  nada que perdonar... Entiendo tu reacción... Pero no quiero ver mas esa fiera, más que en mi cama...-
-  Serena... No es algo que me obsecione pero... Me sorprendió darme cuánta que... Vaya no se cómo decirlo y no sonar estúpido...-
-  vírgen?- complete la France él asintió detuvo un poco el auto y me miró a los ojos
-  bueno... Diamante jamás ha tenido el valor de tocarme, no se tiene un extraño fetiche conmigo, le exita más verme sufrir, diciendo malas noticias, maltratandome, insultandome, jamás ha pasado más aya...-
-  ese tipo en verdad es peligroso... No sé cómo pero no volverás a su lado...- ver lo decidió que estaba me lleno de felicidad y a la ves de temor... Por mi hermanito.