Capítulo III "Batalla por el Eather"

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Thor y los Tres Guerreros buscan algo en la biblioteca. Revisan cada libro, cada estante, cada mesa y mostrador del lugar.

-Aun no entiendo porqué los humanos, en vez de leer, no protegen su reino con espadas. Así no tendríamos que venir tan seguido- dice Fandral.

-Tienen muy buena comida- dice Volstagg, leyendo un libro de gastronomía-. ¡Por la barba de Odín! ¡Mirad este jugoso cordero!- expresa felíz.

-¿Decís que Loki confrontó a Malekith aquí, poderoso Thor?- pregunta Hogun.

-No lo sé, mi amigo- dice Thor, tocando una pared-. Heimdall vio magia aquí, en este edificio; por eso quise que Loki viniese.

-Solo espero que Loki no esté aliado con Malekith- dice Fandral, tocando otra pared.

De la pared del fondo de la biblioteca salimos Loki y yo, con un gran salto. Caemos al piso. Ambos tosemos, envueltos en polvo.

Thor y los Tres Guerreros se acercan a nosotros.

-¿Hermano? ¿Lo habéis conseguido?- pregunta Thor.

Loki se reincorpora y ve a Thor con orgullo. Levanta su mano derecha, donde lleva el cubo rojizo.

-Mirad y llorad- le dice Loki a Thor con una sonrisa triunfal, la cual no le dura mucho porque Malekith, emergiendo con violencia de la misma pared del fondo, lo taclea.

El cubo se desliza por el piso de la biblioteca; se pierde entre los pasillos que forman los estantes con los libros.

Thor sujeta a Malekith, pero recibe un disparo del arma del monstruoso elfo oscuro, que hace acto de presencia junto con más soldados elfos, armados hasta los dientes.

-¡Yo me encargo del grandote!- le dice Thor a Loki- ¡Vos encargaos de Malekith!

Loki se suelta de Malekith. Ambos se levantan. Loki se sacude la vestimenta.

-Será un placer- dice Loki cruzando los brazos en su pecho; al estirarlos de nuevo, con rapidez, saca una daga en cada mano.

Entre la pelea busco el cubo rojizo, andando a gatas para evitar los disparos o un golpe no deseado. Encuentro lo que busco debajo de un estante lleno de libros. Recojo el cubo e intento dirigirme a la salida de la biblioteca, pero varios elfos oscuros me cortan el paso, apuntándome con sus armas. De la nada, un martillo volador golpea a los elfos y regresa a la mano de su dueño, detrás de mí: un hombre de cabello rubio, con armadura plateada y azul rey, cubierto con una gran capa roja.

-¡Huid, milady!- me dice el dios del trueno, antes de ser golpeado por el monstruoso elfo. Yo dudo un momento. Después corro hacia la salida de la biblioteca.

-¡TRAS ELLA!- ordena Malekith, en medio de su lucha contra el dios de la travesura.

Varios elfos oscuros se dirigen a la salida de la biblioteca, pero los Tres Guerreros les hacen frente.

-¡Oh sí, criaturas del fango! ¡Este día probaréis lo mejor de Asgard!- dice Fandral, desenvainando su espada.

Hogun hace girar su maza con picos; Volstagg muestra su enorme hacha doble.

-¡¡POR ASGARD!!- gritan los Tres Guerreros, atacando como uno solo.

Heredera de AsgardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora