La vida de una estudiante de Midgard se ve afectada por la batalla entre criaturas oscuras y los herederos de Asgard: Thor y Loki. Al demostrar ser digna del Poder del Trueno. Thor y Loki se ven obligados a llevarla ante el padre de todo, Odín, quie...
Loki extiende su mano y lanza un hechizo al elfo, revelando su verdadera forma: es Fandral, quien jadea con su espada desenfundada.
-Thor necesita ayuda- nos dice-. ¡Hey!- me dice acercándose a mí- No me he presentado. Soy Fandral, honorable espadachín de la guardia real de Asgard-. Estrecha mi mano. Yo me limito a sonreírle.
-¿Thor se ha encargado ya de Malekith?- pregunta Loki a Fandral.
-Ah...-dice Fandral, cuando se vio interrumpido por un llamado.
-¡LOKI! ¡ES PARA HOY!- grita Thor.
Abandonamos las escaleras, corremos rumbo al jardín afuera de la biblioteca y veo a Thor, con su gran capa roja al viento, invocando un gran rayo del cielo con su martillo; lo lanza hacia Malekith, quien se cubre con un escudo creado por su magia oscura.
-¡Kurse!- grita Malekith, haciendo que otro gran monstruo elfo salga veloz de la nave y arremeta contra el poderoso dios del trueno. Del otro lado, Hogun y Volstagg enfrentan a varios soldados elfos, golpeándolos con sus armas. Fandral corre a la batalla impulsado por su grito de guerra: "¡Por Asgard!"
Loki me toma por un brazo y me lleva de regreso a la biblioteca, a través del enorme hueco hecho por Thor.
-Quedaos aquí- me ordena.
De reojo veo a Thor. Pelea con su poderoso martillo en una mano y, en la otra, el cubo rojo. El monstruoso elfo, Kurse, derriba de un golpe a Thor con todo y una parte de la pared de la biblioteca. El cubo cae de la mano del dios del trueno y va a dar a los pies de Malekith.
Una docena de elfos oscuros, bien armados, salen de la nave. Hogun, Volstagg y Fandral no dan abasto a sus armas ante la gran cantidad de elfos que los rodean; no han visto que Malekith está a punto de tomar el cubo de nuevo.
Corro al instante hacia el conflicto.
-¡Hey!- grita Loki, corriendo a su vez detrás de mí.
Salgo por el hueco; miro a mi alrededor. El maltrecho dios del trueno intenta levantarse. Muy cerca de mí está el martillo mágico. Loki sale de la biblioteca.
Sin pensarlo dos veces, tomo el martillo con una de mis manos y lo levanto. El dios de la travesura me ve levantar el martillo, lo que le hace alzar sus cejas, lleno de asombro.
Kurse cruza a toda velocidad el jardín de la batalla; viene hacia mí. Le apunto con el martillo y espero que salgan varios rayos. Al ver que no pasa nada, pienso "¿¡Que!? ¿Por qué no salen? ¡Vamos... ¡Aunque sea uno! ¡Por favor!" Agito el martillo, desesperada. El monstruo elfo está a pocos metros de mí. Grito por la gran frustración que siento. No viendo más opción, sostengo con fuerza el martillo y golpeo a Kurse, quien sale disparado hacia la pared de enfrente envuelto en algunas breves centellas.
Los elfos que luchan contra los casi derrotados Tres Guerreros se detienen y voltean a verme. Malekith, quien ya ha tomado el cubo rojo también me mira, perplejo.
Todo a mi alrededor se calma; todos me miran.
-¿Qué pasa?- pregunto en voz alta-. ¿Tengo insectos en la cara o qué?
Los Tres Guerreros ríen, sorprendidos. Thor, que ya se levanta lentamente, también ríe como no creyendo lo que ve.
Una serpiente verde se lanza hacia la mano de Malekith que sostiene el cubo rojo, se lo come y desaparece.
-¡MALDITO BRUJO DE ASGARD!- le grita Malekith a Loki, quien ríe- ¡Entrégame el Eather!- Malekith hace unas señas a sus tropas para reiniciar la batalla.
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-Huy, Elfo Maldito...- dice Loki- No creo que vos queráis enfrentaros a la nueva diosa del trueno-. Loki me mira; yo a su vez lo miro a él, con cara de no entender nada- ¿O lo haríais?- Loki mira a Malekith y le sonríe ampliamente.
Malekith me mira; aun sostengo el martillo mágico en una de mis manos. Me siento tan nerviosa ante su poderosa mirada que trago saliva.
Por un momento nadie dice nada. Se escucha el viento. Los elfos se agrupan cerca de su líder, incluyendo al grandote y maltrecho Kurse.
-Bien, asgardiano- dice Malekith, sin quitarme de encima la mirada-. Tú ganas esta vez- Voltea a ver a Loki-. Pero ten por seguro que volveré por lo que me pertenece.
Malekith da media vuelta y sube a su nave, seguido de sus soldados elfos y Kurse, quien antes de entrar voltea hacia mí y lanza un grito terrible. Me hace pegar un brinco.
La nave élfica despega. Thor extiende su mano derecha hacia su martillo y lo atrae, quitándomelo de la mano. Ya con el martillo en su poder, Thor apunta hacia la nave para arrojarle un rayo, pero ya arriba, en el aire, el extraño vehículo se vuelve invisible. Tras desaparecer, se escucha cómo acelera y se aleja.
Los Tres Guerreros, Thor y Loki se agrupan frente a mí, a poca distancia. Thor y los Tres Guerreros me sonríen; Loki se muestra indiferente.
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-¿Ya ganamos?- les pregunto, pero no me contestan. Solo me miran sonrientes, a excepción de Loki
