Me estaba arrepintiendo de haberle dicho que si y la verdad que cada vez me sentía más y más nerviosa, pero era demasiado tarde porque el mensaje de Valentín que estaba afuera esperandome llegó. Me quedé sentada en la cama, meditando unos segundos que se convirtieron en minutos y me levanté de la cama. Me miré la espejo por última vez y me dije que yo podía repetidas veces. Largué aire por la boca y salí de casa, viendo el auto de Valentin estacionado en la puerta de casa.
Antes de mandarle mi dirección me quede pensando varios minutos si alguna vez alguien de la escuela había ido a mi casa, pero era imposible porque si venía alguien a casa era para hacer un trabajo y nada más, pero siempre vinieron mujeres así que al menos por eso no me preocupé pero también pensé en la posibilidad de que sepa donde vivo porque si y aunque por chat no me iba a preguntar si soy Sirena, apenas nos veamos lo iba a hacer.
La puerta del copiloto se abrió desde adentro y entré, él me miraba sonriendo.
-Hola.- Dice cuando yo cierro la puerta.
-Hola.- Repito.
-¿Todo bien? -Pregunta prendiendo el auto.
-Si, todo bien. ¿A dónde vamos? -Pregunté viendo que arrancaba.
-No se, damos una vuelta y vemos,¿dale? - Asenti.
Desbloquee rápido mi celular y le mandé mi ubicación en tiempo real a Pía que me contestó al toque con un emoji del pulgar hacia arriba. Bloqueé el celular y lo mantuve en mi mano todo el tiempo, sentía ya la funda del celular mojada, de toda la transpiración que mis manos emanaban.
Estaba bastante asustada para ser sincera, estar en un lugar cerrado y solos con la persona que me arruino el bocho me incomodaba bastante, y todavía tenía la paranoia de pensar que tal vez se haya acordado de mi en todo este tiempo en el que hablamos.
Queria parecer tranquila y creo que lo estaba logrando, pero por dentro estaba atenta a cada movimiento y mirando hacia todos lados para ver a donde íbamos.Hablamos de varias cosas mientras seguía manejandos hasta que paró en una plaza la cual estaba bastante iluminada y se podía decir que había movimiento a pesar de la hora que era. Estaba orientada en la zona la cual estabamos aunque habiamos dado varias vueltas.
Me quedé en el auto un rato para que Valentín vaya al kiosko a comprar semillitas.
Cuando estaba viniendo, baje y trabó las puertas y nos dirigimos a un banco que estaba bien enfrente del auto.-Claro.- Dijo agarrando un puñado de semillas del paquete. -Vos ibas a la otra escuela, con razón te me haces conocida. Seguro nos cruzamos banda de veces en boliches o a la salida del colegio. -Asintió.
Si, tuve que mentirle diciendo que fui a otro colegio. Me preguntó mi edad y como, claramente los dos tenemos veintiuno sacó que capaz que nos conociamos del colegio, pero esa excusa me sacó del apuro y parece que se la creyó y la verdad, que su planteo tiene sentido. Si nuestra promo era la misma, podiamos habernos visto en miles de lugares pero solo de vista.
-Es que yo estoy segura de que nunca te vi.- Mentí, agarre un puñado de semillas también.- Nunca le di bola a la gente de otra escuela.- Eso era cierto, aunque no me iba a estar fijando en gente de otra escuela cuando nisiquiera sabía bien quienes iban a mi escuela.
-Seguro estabas en la tuya todo el tiempo.- Supongo que "estar en la mía" se refiere a que yo solamente me fijaba en los chicos de mi escuela, quería rodar los ojos.
-Si, igual nunca me cabieron los pibes de mi edad cuando iba a la escuela. Eran re tontos, pibe que conocía, pibe que la cagaba. -Quería saber hasta donde me quería contar y hasta donde podía llegar.
Se rió.
-Todos somos medios boludos en la secundaria, y mas en el último año.- Se encogio de hombros. -Yo tenía novia ese año, así que mucho no me preocupaba y se ve que así de estupido me quería igual. -Se rió.
-Era una paja ponerse de novio el último año. Digo porque lo único en que pensabamos era en la joda. Aunque siempre pensé que si te pones de novio es porque claramente no pensas cagar a tu pareja y menos en un viaje de egresados choto.
Quedarme callada y nunca hablar servía de algo, había aprendido a escuchar todo lo que pasaba en el salón y me había enterado que Valentín había estado con dos minas en el viaje de egresados, el cual, claramente no fui. Aunque por un tiempo me sentí mal por Samira, después me enteré que ella también había estado con uno en el viaje.
Lo miré para ver su reacción y que era lo que decía. Y tardó un pequeño segundo en responder.-Si, es una mierda. Pero bueno...digo, desde mi experiencia,¿no?
Quise levantar la ceja.
-¿Te pasó?
-Si, mi novia me cuernio fuerte en el viaje.
-Uy, que garron. Me imagino que cortaste con ella después de eso.
-No. -Se rió y me hice la sorprendida.- Seguimos juntos por mucho tiempo.
-Posta que no entiendo. -Me reí. - Habrás tenido tus motivos creo yo. -Lo miré.
-Si, pero no importa, pasó hace banda de tiempo atrás. Ya ni me importa.
Mi pregunta era, ¿La habrá querido de verdad?¿O solamente era un juego y se tenían para garchar?
-Esta bien, esa es la actitud.- Nos reímos.
Cuando nos dimos cuenta, eran las cuatro y media de la mañana. Habíamos hablado por muchísimo tiempo y no quería admitirlo, porque sentía que me estaba traicionando a mi misma, pero la había pasado bien.
Pero, también sabía que me mintió en muchas cosas y que estaba segura de que lo demás que no sabía de él, podía ser mentira.💫
malardo maaaal pero por algo se empieza.