Después de dejar a Pía en su casa y yo buscar mi bolso con mi ropa, fuimos a la casa de Valentín.
Quería ver que sorpresa tenía.
Entramos al departamento sin hacer mucho ruido y no entendía por qué.
Me hizo seña con la mano para que lo siguiera y caminó hasta su cuarto, lo seguí y abrió la puerta lentamente y asomó la cabeza para ver algo y abrió el resto de la puerta. Entró y yo entré un poco asustada ahora, no sabía que era lo que hacía tanto suspenso.
Entré al cuarto y Bananas dormía en la cama y al lado había otro cachorrito de la misma contextura que Bananas pero era negro con manchas blancas bastante grandes.
Me tapé la boca, muriendo de amor y miré a Valentin que me miraba sonriendo al ver mi reacción.
Me acerqué despacio a la cama para acariciar los a los dos. Bananas se despertó en el segundo que la toqué y empezó a mover la colita desesperada y me saltaba para darme besos en la cara, pisando al otro perrito, haciendo que se despierte también sin entender nada. Valentín lo agarra y lo aleja de Bananas que seguía pisándolo y yo no podía hacer mucho porque la tenía a ella tirándose encima mío.
Cuando al fin se calmó y miré a Valen que tenia en perrito mirándome con recelo y estando encima de él.
—¿Otro más? —Me rei.
—Nunca es suficiente. —Se ríe también.
—¿Cómo se llama?
—Cocos.— Sonrei.
—Seguimos el legado de las frutas.
—Obvio. —Dijo sonriendo. —Es tímido y tiene un poco de miedo a la gente. Es hermanito de Bananas, y me lo devolvieron porque no lo podían tener, pensaron que si y bueno, al final no.— Hice una mueca.
—Al menos no lo tiraron a la calle. —Me acerqué despacio.
—Prefiero que me lo devuelvan a que hagan eso.
—¿Y por qué no lo pusiste de nuevo en adopción?— Le acaricie la cabecita y fue entrando en confianza.
—Mira esa carita... no podía decirle que se tenía que ir de nuevo. —Negué divertida.
—Es hermoso, me encantan. —Los miraba embobada a los dos mientras les hacia mimos y ellos, se quedaban quietos y estaban a punto de dormirse.— Que linda sorpresa.— Murmure.
—Sabía que te iba a gustar. Kela... —Me llamó y lo miré,dejando de hacerle caricias a los perritos. —Quería explicarte por qué no te hablé antes.
—Valen, no pasa nada. No tenes que explicarme nada.— Suspiró.
—Hablé con Samira, pero al principio no quería, de nuevo. Hasta que un día fui a su casa y ahí hablamos. Quería que volvamos y mil cosas más, delirios de ella. Le hablé de vos,— Lo miré un poco asustada.— creo que piensa que ya no nos vemos más, porque le dije que la última vez que te vi fue esa vez que casi nos mata a los dos, no creo que te moleste más.
—Pero, ¿y si nos ve juntos en algún lugar? Va a saber que nos seguimos hablando.
—Lo sospecha, no creo que sea tan tonta de no saber por qué no quiero que volvamos.— Explicó.
—Si, bueno, esté yo o no en el medio no creo que sea sano para vos volver con ella. —Miré hacia un costado.
—Tenes razón. —Me sonrió e hizo una pausa.— ¿Estás celosa?— Se le escapó una risa y yo sonreí.
—No, te digo que es mejor no estar con ella por tu salud mental. —Me quería reír también.
—Aaaah, si, es eso. —Negué sonriendo.
Después de charlar un rato más, nos cambiamos de ropa para ponernos el pijama y acostarnos.
Busqué mi ropa y me cambié, de nuevo, delante de Valentín.
—Mi remera te quedaba mejor. —Dice viendo mi pijama, me reí.
—Claro, porque se me veía todo. Qué vivo.— Me senté en la cama.
—Bueno, al menos yo no miento. —Abrí la boca indignada.
—Yo tampoco miento. —Me miró entrecerrando los ojos.
—Si vos decís...celosa. —Murmuró lo último.
Rode los ojos. ¿En serio fue un comentario de celosa? Me quería morir.
—Que no estoy celosa. ¿Por qué lo estaría si estás acá conmigo? —Levanté una ceja.
—No te digo ahora, sino antes. Cuando no te hablé.
Bajó a los cachorros y los puso en una cama grande en el piso.
—No estaba celosa tampoco. —Expliqué.
—Ah, bueno.— Dijo bastante sarcástico y lo miré mal.
Se sentó en la cama y se acomodó de su lado y yo me acomodé del otro.
—No estaba celosa. —Murmure.
Se rió bastante fuerte.
—¿Si no estás celosa para que le seguis dando vuelta al asunto?— Me mira con las dos cejas levantadas.
—Sh, cállate, es tarde vamos a dormir. —Digo y él se acomoda mejor y yo lo abrazo por la cintura y apoyo mi cabeza en su pecho.
Podría dormir así toda la vida.
🌫
No iba a actualizar pero estoy emocionada con esta fic.
El nombre bananas es hermoso para la cachorrita, ni loca le pongo un nombre de persona a un perro, primero queda feo, segundo es maltrato humanizar a los animales.
No me gusta que los perros tengan nombres de personas onda Lola, Victoria, Ciro ???man, tene otro hije y listo. Lo aclaro porque a casi nadie le gustó el nombre y yo lo amé. Yo voy a defender a Bananas aunque sea imaginaria porque no se puede defender ahre ysi.
Gracias camilapodrida por el nombre de este cachorrito nuevo y por la idea de agregar otro. Me diste más ideas con eso, te quiero reina <3
Ahora Cocos es tu nuevo perrito ahre <3<3<3
