"Bodas de Pasión"

CAPÍTULO IV

-IV-

Sasuke siguió su instinto, algo le decía que siguiera esa silueta. Conforme se acercaba a ese ser extraño, su corazón se aceleraba, de pronto de un golpe cayó al suelo, no se percató en qué momento fue visto, estaba aturdido y no pudo levantarse, eso fue aprovechado por el sujeto y le aplicó energía en su pecho, después se soltar una carcajada se alejó considerablemente.

-¡Rayos! Fui descuidado, no puedo moverme. Este lugar es...-

Sakura trataba de escaparse y gritar con todas sus fuerzas, pero no lo conseguía. De pronto se percató que el aire era tranquilo y todo apuntaba a que habían entrado a alguna habitación, después cayó junto al sujeto en la cama, ella de espalda a él. Se estremeció al darse cuenta que estando en esa habitación nadie la escucharía. El agarre de su boca se soltó y sintió como la giraban y cambiaban de posiciones, ella debajo de él. En ese momento se armó de valor y se dispuso a gritar.

-¡Auxilio, ayuda por favor! ¡Saauke!-

-Sakura soy yo, ¡tranquila!-

Sakura se sorprendió y sintió como todo el peso de la persona que tenia encima caía sobre ella.

Esa voz solo podría pertenecer a alguien especial para ella, Sasuke. Aunque su cuerpo aun temblaba su respiración empezó a normalizarse, el saber que Sasuke estaba con ella la llenaba de esperanza. Lo vio a un lado de su rostro. Extendió sus brazos alrededor del chico, dándole un fuerte abrazo y comenzó a llorar.

-Tranquila ya estas a salvo, no permitiré que nada malo te pase. Lamento que me veas en este estado pero el sujeto que te perseguía me aplicó energía para dejarme inmóvil.- Sasuke poco a poco levantó su mano y acarició la mejilla de Sakura.

-¡Sasuke! estaba tan asustada, ese hombre me dijo que me haria daño, corri lo mas que pude y no sabia hacia donde iba, gracias a Dios eres tú, gracias, gracias.-

-Sakura, si te hubiese tocado un solo cabello yo lo habrían matado- Sasuke tensó sus músculos -ya estas a salvo, esta es tu habitación.- Sasuke abrazó a Sakura con toda la energía que lograba recuperar y no mentía, en ese momento cuando reconoció a Sakura gracias a la luz de luna, sintió que la sangre le hervía, pues ella, su Sakura, estaba siendo perseguida por un hombre que le estaba sentenciando a robarle su pureza. Solo de recordarlo le daban unas inmensas ganas de tenerlo frente a él y asesinarlo, pero recordó que no lo conocía. Era joven, un poco mayor que él, pero parecía estudiante, tenia el uniforme, pero una mascarilla, eso significaba que era algún compañero que deseaba hacerle daño a su prometida y temia que fuera por su culpa.

Sakura empezó a tranquilizarse, después de haber llorado todo lo que pudo y Sasuke a recupar su energía por completo, se recostó a un lado de Sakura, la atrajo hacia él y le abrazó de la cintura, en señal de protección, ella se dejaba guiar, estaba asustada y eso la reconfortaba y sin darse cuenta ambos se quedaron dormidos plácidamente en esa cama.

Los rayos del sol hicieron que ambos empezaran a despertar. Sakura se sentía tan cómoda que se aferró más a a quien le brindaba tanta seguridad. Sasuke también estaba a gusto, tenia un calor apropiado en su cuerpo, prefería el frío, pero esa tibieza le encantaba. Además, percibía un aroma que lo embriagaba y lo hacía sentirse en paz. Suspiro profundo y lleno sus sentidos de ese delicioso olor. Pero como quien no quiere la cosa, ambos se sorprendieron de sentirse tan bien, más al recordar lo que sucedió la noche anterior.

De un solo, ambos abrieron sus ojos y se vieron fijamente, estaban en posisiciones comprometedoras.

-¡Sakura/Sasuke!- dijeron al unísono y se soltaron de inmediato, mientras se sonrojaban y se sentaban.