Far away - KatsuDeku

XII

Este capítulo está dedicado a:
KarimeLopez

Porque sin ella esta historia no tendría mañana.
Por el desmadre de ideas gracias Karime, mi todo. Xd

~*~
Katsuki, quedo atónito, y tan sólo atinó a sentarse sobre un peldaño de las escaleras de emergencia, con los ojos abiertos en medio de la sorpresa, del peso recaído que de forma repentina aplastó cualquier fiel pensamiento con algún hilo coherente en su mente. Tembló de ira, sintiéndose como una miseria ante la ausencia que ha provocado, sintiendo cada vez más que siempre había sido insuficiente y un desagraciado.

-¿Desde cuando saben esto? -pregunta Katsuki, después de un prolongado silencio a Kirishima y Kaminari, y ellos ante la pregunta, dudosos alcanzan a responder...

-Desde hace cinco años, cuando vimos a Yukio muy pequeño en el regazo de Izuku... -murmura Kaminari, bajando su mirada, Kirishima voltea a verlo con un mirar acusativo, manteniéndose quieto a su lado

Bakugo, siente como todo vuelve a acumularse con una ira que domina su sangre y la hace hervir de manera intensa y pavorosa, siendo la mirada que les dedica a ambos provocadora de incluso tamborileo en las paredes y helor inmerso recorrer sus espaldas.

-¡¿Y por qué carajo no me dijeron absolutamente nada?! -estalla colérico y ellos no retroceden, pues, comprenden la ira de su amigo, a pesar de no saber precisamente lo que puede llegarse a sentir algo similar, empatizan, y como amigos saben que en cierto punto le han fallado al no notificarle nada, sin embargo, pensaban era lo correcto, pensaban...

Ahora no estaban seguros.

-Midoriya nos dijo que te lo explicaría a ti, en parte era algo que no nos pertenecía, nada de tu vida privada, era algo que... -explicaba Kirishima, siendo interrumpido por su amigo.

-Pero se trata de mi hijo, maldita sea -Katsuki brama, frustrado, golpeando estrepitosamente la pared, suspira mientras trata de serenarse aunque fuera un poco-, se trataba de mi hijo, ¿que nunca pensaron que sería mejor si me decían esto mientras yo perdía mi maldito tiempo en Estados Unidos, y así podría haber sostenido a mi maldita familia? ¿Eh? ¿Por qué mierda pensaron que era mejor ayudar al estúpido nerd con su estúpido secreto cuando bien claramente pude haberlo ayudado? ¿Cuando bien pude no dejarlos solos y estar con ellos?

Kirishima y Kaminari se mantienen en silencio, sintiendo la culpa carcomerlos por dentro, no fueron sensatos, bien lo sabían, pero sinceramente, así pensaban ellos que sería lo mejor, ¿podrían culparlos? Eran decisiones que se les habían presentado a edades muy tempranas, eran situaciones que nos sabrían cómo ayudar y manejar.

-Tienes razón, lo sentimos -se disculpó por ambos, Kaminari.

Denki baja su mirada, pero Kirishima no, ve a su amigo tan firme como siempre intentando descifrar lo siguiente que hará, pero solo percibe silencio, frustración, duda y temor.

-Maldición... -sisea, aturdido entre el reciente deje de la declaración caótica.

Se arrepentía profundamente por no haberlo buscado después de aquella noche, por dejarlo solo, por desatender de aquella manera sus sentimientos e intentar ignorarlos cuando bien sabía era inútil; se arrepentía de no haberse quedado esa noche a su lado, de abrazarlo por la espalda mientras oía su respiración acompasada, de haber apreciado como se debía cada maldito segundo, haber estado ahí siempre.