Capitulo 13

1.3K 81 7
                                    

Me desperté por el sonido de un celular. Era el mío. Estire mi mano para tomarlo y atendí. Eran las 4 de la mañana.

- Hola?- pregunte, aunque no sabía quién se encontraba al otro lado del teléfono.

- Melody- respondió una voz. Era Nathaniel.

- Que quieres?- pregunte

- Hoy vienes a mi casa por el trabajo de historia?- respondió

- Que? Piensas que voy a ir a tu casa después de lo que hiciste?- conteste molesta- Como quieres que vuelva a confiar en ti?

- Sé que hice mal y desperdicie una nota que seguro iba a ser buena pero solo dame una oportunidad más.

- Eres un idiota- comente- Nos vemos hoy a la tarde, como llegues a sabotear de nuevo el trabajo, te juro que te mato.

Y aquí me encontraba. Cuando hace una semana pensaba que Nathaniel no iba a estar más en mi vida, me equivocaba. Me encontraba tocando la puerta. Su puerta.

- Estas muy enojada?- pregunto Nathaniel, luego de dejarme entrar en su casa.

- No querrás conocerme enojada- conteste, asesinándolo con la mirada.

Subimos las escaleras, y nos dirigimos hacia su habitación. Estaba igual que hace una semana. Solo que el día lluvioso no hacia entrar pequeños rayos de sol, como la vez pasada.

Terminamos el trabajo rápido, la verdad que no hubo mucha comunicación, solo hablábamos para ver si estábamos de acuerdo con lo que íbamos a poner.

Bajamos las eternas escaleras y fuimos a la entrada. Antes de poder decir nada e irme así sin más, una voz que provenía de la cocina me interrumpió.

- Hijo, necesito que algún día llames a Melody y la invites a comer- grito el padre de Nathaniel.

- De hecho, esta aquí ahora mismo- dijo Nathaniel, lo suficiente alto para que su padre lo pueda escuchar.

El padre de Nathaniel apareció por el umbral de la puerta de la cocina. Mostrando una de sus mejores sonrisas, me saludo.

- Melody, como estas?- pregunto el.

- Muy bien, señor.....?- pregunte, todavía no savia su nombre.

- Patrick, pero no hace falta que me llames señor.

- Okey- dije- Yo creo que ya me debo ir, es tarde- comente, tratando que se olvide el plan de quedarme a comer en su casa.

- No puedes abandonarme así- Patrick hizo una mueca- Me prometiste que te quedarías a comer algún día.

- Lo siento, pero tengo otros planes y...- Nathaniel me interrumpió.

- Por favor- hizo puchero.

Oh!, gracias por ayudar Nathaniel.

- Supongo que tendré que cancelar mis planes- sonreí, aunque mi sonrisa era tan falsa que dudo que se la hayan creído.

- Bienvenida a la casa de los Caccini- Nathaniel me rodeó con los brazos.

Luego de mandarle un mensaje a mi madre y decirle que llegaría tarde, me senté en la mesa. Algo de que me había dado cuenta, es que Nathaniel y su padre no tienen buena relación, apenas se hablan.

- La sopa esta lista!- anuncio Patrick.

Poso tres tazones con sopa, y en un plato aparte, pollo. Había que admitir que tenía muy buena pinta. Estaba sentada al frente de Nathaniel, y Patrick estaba a la izquierda.

Perfecto problemaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora