Seunglix: Nuestra Historia

CAP 12

Salimos de casa todos juntos, riéndonos de los chistes de Jisung, a pesar de algunos no causaran ni la más mínima gracia, pero tenía que admitir que gracias a Jisung podía darme el gusto de ver esa hermosa sonrisa pintada en el rostro de Felix, la cual hacía que todo lo demás careciera de importancia; esa era la única vista que deseaba congelar y mantener por el resto de mi vida, haciendo desaparecer todo lo que nos rodeaba para quedar solo nosotros dos. Y bueno, en sí, mi cerebro logró ese efecto borroso de todo lo demás alrededor hasta que un condenado poste de luz se me atravesó en el camino arruinando por completo mi preciosa escena romántica. Escuché a los chicos reír de fondo mientras mi nariz comenzaba a sangrar.

– ¡Oh, Dios! -exclame llevando mis manos a la nariz al ver gotear el líquido carmesí en el suelo, mis manos se llenaron de sangre y mis ojos se habían comenzado a llenar de lágrimas debido al dolor. - ¡Joder! -exclamé por segunda vez llamando la atención de los chicos quienes pararon de reír al ver mi estado-

Los primeros en alarmarse fueron Woojin y Chan quienes se acercaron rápidamente a brindarme apoyo; y entre gritos, quejidos y reproches, al final termine por calmar el sangrado y sentarme en una banca del parque en lo que los demás paseaban por ahí; me dolía la cabeza y además de eso también estaba mareado, me quería morir ahí mismo de la vergüenza y el dolor, pero, al ver la mano de Felix extendida en mi dirección con una compresa fría hizo que al menos el accidente tuviese un punto positivo. Alcé la mirada y me encontré con aquellos ojos avellana que tanto me gustaban y me hacían suspirar; sonreí como un imbécil, con un algodón en cada fosa nasal y tomé la compresa para acomodarla en mi nariz. Felix procedió a acomodarse a mi lado y con suma tranquilidad habló.

- ¿Te sientes bien? -preguntó-

- Sí, estoy bien, solo fue un golpe -sonreí ligeramente- Ya pasará -dije esta vez mirándolo-

- ¿En qué nube andabas esta vez? -soltó agachando la cabeza para intentar ocultar una pequeña sonrisa-

- ¿Qué quieres decir con eso? -pregunté nervioso-

- Seungmin podré ser distraído y podré no prestarle minuciosa atención a algunas cosas, pero, me he dado cuenta de que últimamente todo accidente que te involucra es porque no estas consciente de lo que pasa a tu alrededor

Dicho esto, se detuvo, lo que provocó que voltease en su dirección, encontrándome con una mirada tímida.

- Seungmin, tú... -Agachó su cabeza escondiendo un sonrojo-

- ¿Yo...? -solté animándolo para que terminara la frase-

- Olvídalo -dijo para levantar la cabeza con una sonrisa dejándome totalmente desconcertado- Mejor busquemos a los chicos, de seguro Jisung se quedó en la farmacia comprando curitas de colores -dijo levantándose de la banca-

Felix se adelantó un par de pasos.; la inquietud llegaba a cada rincón de mi cuerpo, por inercia tomé su muñeca y en un movimiento rápido pero efectivo lo volteé quedando a milímetros de su rostro; vi como lentamente sus mejillas llenas de diminutas pecas se tornaban de un intenso color carmín, mi mirada viajó a sus labios, rosados casi rojos por el frío y tuve el pequeño pero potente impulso de besarlo al verlo remojarse los labios con nerviosismo. Perdí el control de la situación, así que con una voz temblorosa y tratando de alejar de mi mente y cuerpo cualquier impulso a robarle un beso, pregunté...

- ¿No piensas terminar la frase?

Escuche como tragó en seco, mi corazón palpitaba cada vez más rápido tanto así que podía jurar que se escuchaba muy fuerte y para completar el plan, mi ganas de besarlo en vez de desaparecer se hicieron todavía más fuertes.; sin dudas todo el dolor que había tenido minutos atrás había desaparecido por completo.