Lessons ||One-Shots|| [México]

6▪Perdón

España

-¿Que es esto?...-

España alzó la vista de su escritorio hacia arriba para observar a quien estaba frente a él. Segundos antes había estado muy concentrado en su trabajo hasta que un sobre tricolor cayó frente a los documentos.
Del lado opuesto del mueble de madera, se encontraba su antigua colonia; había un suave enrojecimiento es sus mejillas por lo que fácilmente se podía deducir que el simple hecho de estar ahí lo atormentaba se sierra manera... Tal vez culpa o nerviosismo, nunca se sabía que esperar del mexicano. Se habían conocido desde hace años y aún lograba sorprender al europeo.

-E-es una invitación pen- hombre...- Se corrigió a si mismo con dureza.

-Si, eso puedo notarlo...-

La mirada del español giró hasta el calendario en la esquina del escritorio, el cual marcaba claramente un "14 de septiembre" con una gran equis roja tachándolo los dos días consecutivos a este.

Malos recuerdos venían a su mente durante esas fechas... Malos recuerdos que hacían arder las cicatrices sobre su pecho.

-Mierda...-

-Si, bueno, se que no fue el mejor día entre nosotros, pero voy a hacer una fiesta... Y me gustaría que estuvieses ahí... Como mi invitado especial-

Los ojos de España se abrieron con sorpresa ante las palabras de la otra nación ¿Como si quiera se atrevía a pensar que tal invitación sería aceptada después de todo lo ocurrido entre ambos?
Porque México no fue el único afectado en todo el conflicto.
El había acogido al pequeño como su propio hijo durante más de 300 años!... El pequeño no tenía ni idea del vacío profundo y el dolor que le dejó su partida.

-Es coña, ¿Verdad?-

-No!- El americano se vio horrorizado ante la simple idea de bromear con algo tan serio como su independencia o de burlarse de su "padre adoptivo" de esa manera tan cruel -Si no quieres ir no hay problema alguno! No es obligatorio! Enserio!-

Los gritos y excusas exasperados del americano fueron silenciados cuando, repentinamente y sin explicación España se puso de pie frente a él, tan imponente y serio como la primera vez que se vieron hacia tantos años atrás.

-Tenochtitlan...-

El cuerpo entero del mexicano se sacudió con temor cuando su nombre original salió de la boca del otro; incluso con la pronunciación adecuada, como la de un padre regañando a su pequeño hijo después de hacer una travesura.

Nunca, en todo su tiempo de vida, España lo había llamado así, ni siquiera cuando el Imperio Azteca aún vivía.

-Escucha, no es lo que crees, me siento halagado, en verdad, pero no entiendo tu razonamiento ¿Por que invitarme a mi a la celebración de tu independencia? Después de todo lo que le hice a ti y a tu gente ¿Por que sigues viniendo a mi como si fuésemos amigos desde siempre?-

-Porque eres la familia que me queda... Y, sin ti no sería quien soy ahora... Probablemente hubiese muerto como sacrificio para mi gente y nuestras creencias... En cierta forma, me salvaste-

La voz de México salía como un pequeño susurró arrepentido y temeroso. Al inicio del día, invitar al europeo parecía como una magnífica idea, al contrario de lo que sus amigos pensaban, sería la excusa perfecta para mejorar su rota relación con el europeo.

En cierta forma, claro que tenía razones de sobra para odiar al europeo, pero sin él no era como si las cosas fuesen perfectas durante la época prehispánica.
Aun antes de la llegada de los conquistadores, había matanza, guerras, esclavitud y no hablar de los sacrificios humanos en honor a los dioses que su padre hacía.

Si cerraba los ojos, aún podía oír el sonido de las cabezas de los sacrificados rodar cuesta abajo por los escalones del templo y el olor inconfundible de la sangre fresca esparciéndose por el aire... Le tomó tiempo darse cuenta de que lo que hacían era inhumano y cruel.

-Se que ninguno de los dos olvidará eso durante muchos años más... Pero aún así, me gustaría comenzar de nuevo, se que a ambos nos hará bien olvidar los rencores del pasado, después de todo, un eres como un padre para todos nosotros... Aunque Argentina diga lo contrario-

Y como si toda la tensión hubiese saltado por la ventana, ambos soltaron una risa alegre mientras se tomaban de los hombros amistosamente.

-¿Entonses irás?...-

-Claro que si pequeño-

~•~•~•~
Este capítulo aún no me termina de convencer XD pero si les gustó haganmelo saber, me hace muy feliz leer sus comentarios!
I love you guys!