Mi profesor particular

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-Está mal querer ahogar las penas en el alcohol- dijo asintiendo con la cabeza en señal de autosatisfacción

-Vos no me vas a decir lo que está mal y lo que está bien- le dije seria sin dedicarle ningún tipo de mirada

Noté que mi amiga se miraba con su chico sin entender muy bien que era lo que pasaba entre nosotros

-Bueno chicos nosotros nos vamos a bailar, no se maten- nos dijo mi amiga y se lo llevó a Lucas

-Eso, no me mates- me dijo Federico
-¿Siempre sos así de infumable no?- le pregunté sin una gota de simpatía

Se acercó, se sentó al lado mío y pasó su brazo por encima de mis hombros

-Siempre, pero a vos no parece importarte- me dijo y se terminó una de las botellitas
-Uff, no sabes- le dije sarcásticamente
-¿Te parece mentira?- me preguntó levantando una ceja- si te encanta
- No nene, yo te encanto a vos, es hora de que lo admitas- le dije

Se acercó a mi y a centímetros de mi cara me dijo -Si, me encantas- y me besó
Sus. Besos.

Me enoja no reaccionar de ninguna manera cada vez que me besa, y eso me esta empezando a incomodar. Me separé de sus labios; no porque no quiera. Simplemente no estaba de humor
Cuando lo miré tomo mi cara con una de sus manos y me dijo
-Ahora admití vos que te pongo nerviosa

Si. Si me pones nerviosa pero claramente no te lo voy a decir

-No, no podrías poner nerviosa ni a una mosca- le dije indiferentemente

Si, eso.

-No te creo ni una palabra- dijo guardando un mechón de mi pelo detrás de mi oreja
Me toca una vez más y me abalanzo encima de el
-Yo siempre tengo razón, así que yo que vos no estaría tan seguro, buenas noches Federico- le contesté, me paré y me encaminé para irme

A los pocos pasos una mano tomo la mía y me obligó a darme vuelta

De nuevo él
-¿Que querés ahora?- le dije cruzándome de brazos
-¿Ni siquiera podemos bailar nosotros también?- me preguntó apegándome a él y tomando mi mano nuevamente

Tenía razón, era estúpido mi ataque de mal humor
¿No podemos bailar como dos personas normales?

Empezamos a bailar y cada vez el espacio entre nosotros era menor, puse mi cadera junto a la suya y empecé a menearme para abajo y para arriba al ritmo de la canción mientras él posicionaba sus manos en mi cintura baja y su cara en el hueco de mi cuello para que yo lo guiara
El lugar estaba demasiado caluroso y yo estaba cada vez más excitada
Su cuerpo estaba completamente pegado al mío y hasta me era difícil respirar, su perfume estaba incorporado en mi y me volvía loca

Me despegué un poco para poder mirarlo y pasé mis manos por su cuello para seguir bailando como lo estaba haciendo
-Un día de estos me vas a matar, sos una diosa- me dijo el con la voz ronca que tanto me encantaba provocar en él
Gruñí levemente y besé su cuello haciendo que cierre los ojos y tire la cabeza para atrás

Bajé mis manos de su cuello y me di la vuelta para pegar mi espalda con su pecho y tome sus manos para rodear mi cintura con ellas y seguir bailando
Pegó mi trasero contra su palpitante erección y sentí mi piel erizarse por completo
Besó mi cuello y me susurró al oído
-¿Se te fue el mal humor?

¿¿¿¡¡¡Cómo no se me iba a ir el mal humor con semejante adonis bailando solo y exclusivamente para mi!!!???

Me giré para mirarlo y tomé su mano para dirigirlo a algún lugar
El me dijo que quería hacerme suya en cualquier lugar, y en este momento estaba a punto de tomarme muy literal sus palabras
Me acerqué al baño de mujeres y lo adentré junto a mi
Un par de parejas estaban tan ocupadas que no se enteraron de nuestra presencia en absoluto

Visualicé un cuarto de baño vacío y camine junto a el con él
Abrí la puerta y lo obligué a sentarse en el inodoro luego de bajar la tapa de éste
Cerré la puerta con el seguro detrás de mi y lo miré , tenía las pupilas sumamente dilatadas y me volvía loca saber que yo se lo estaba provocando

En este momento maldije no haber traído ni pollera ni vestido, pero algo se me tenía que ocurrir.

Me senté encima suyo y lo besé, él me apego a su entrepierna y supe que la idea lo había puesto más duro de lo que estaba
Lo tomé del pelo y lo apegué para sentir su lengua aún más dentro de la mía, no me podría aburrir nunca de sus besos
Empecé a desabrochar su camisa y dejarla en el piso y él hizo lo mismo con mi musculosa
El problema eran las calzas
Me paré y lo miré, su cara de confusión era épica

Me alejé un poco y tomé los bordes de mis calzas, comencé a bajarlas lentamente sin despegar mi mirada de él al mismo tiempo que movía mis caderas de un lado para otro
-Me estás matando, termina con eso rápido la puta madre- me gruñó y lo obedecí
Me arrodillé delante de él y desabroché su pantalón
Lo miré como pidiéndole permiso a hacer lo que tenía en mente

-Soy todo tuyo nena, haceme lo que quieras- eso era todo lo que necesitaba oír

Baje sus bóxers y su miembro se hizo presente
Lo tomé entre mis manos y comencé a bajarlas y subirlas sin despegar mi mirada un segundo de Federico que tenía sus ojos cerrados y la cabeza tirada para atrás
Luego pasé mi lengua en toda su longitud y lo ingresé en mi boca casi en toda su totalidad de una sola vez, gimió y abrió los ojos para mirar lo que estaba haciendo
En un momento comenzó a tensarse y supe que no faltaba mucho para que se corriera entonces deje de hacer lo que estaba haciendo y a cambio recibí un gruñido frustrado de su parte

Me volví a sentar encima del él y tomé su miembro para ubicarlo en mi entrada, me senté encima de éste y lo ingrese en su totalidad en mi interior haciendo que los dos liberemos un gemido y nos miremos
Agarró mi cara entre sus manos y me beso con fiereza, mordiendo mi labio inferior
Tomó mis caderas sin dejar de besarme en ningún momento y comenzó a moverme de arriba a abajo cada vez con un poco más de velocidad

Bajó su boca y con una mano desabrochó mi corpiño y con la otra tomó uno de mis pechos para estimularme un poco más, me corrí sonoramente y escondí mi cara en el hueco de su cuello

Él se movió dentro de mi un par de veces más y sentí como se esparcía su semen en mi interior

En ese momento agradecí tener pastillas "del día después" en mi casa. Siempre hay que estar preparados para un imprevisto como éste

Nos quedamos un tiempo así y luego me miró sonriendo
-Me gusta que quieras cumplirme mis fantasías- me dijo depositando un corto beso en mis labios
-Si me dejas me gustaría cumplirte todas- le dije y me incline para que salga de mi interior pero volví a sentarme sobre su regazo
-¿Dónde tengo que firmar?- me dijo y se empezó a reír
-Acá- le dije y señalé mis labios

Después de unos cuantos (muchos) besos de su parte me incliné para buscar mi corpiño y me lo coloqué junto con mi musculosa y me paré para terminar de vestirme

-Dejame llevarte a tu casa- me dijo en tono de súplica
-No hace falta Fede, enserio no hace falta- le dije y le di un beso en las comisura de los labios para abandonar el lugar

Y como siempre, no me pude resistir, no a ÉL