Narra Federico.
Estaba sentado en la mesa de mi cocina con el celular de Ema delante de mí
No recuerdo muy bien porque está en mi poder, pero sé que lo tengo en frenteEstá prendido y vibra bastante seguido
¿Hablará con otros? ¿Hablará con otro?¿Le contará sobre mi a alguien?No soy nada en su vida, no sé que es lo que puede contar de mi
No sé porque mierda me hago estas preguntas de mierda, simplemente no tengo que revisarlo¿Eso sería que me importa más que sólo pasar la noche con ella?
No lo iba a averiguar así que apagué el celular y lo dejé encima de la mesaMañana tengo clase con ella, lo va a venir a buscar y fin de la historia
Si, esoAunque pensándolo bien no tengo nada que averiguar porque se perfectamente que lo único que quiero de ella es ese cuerpo, porque tiene un humor de mierda y nunca podría estar con alguien como ella, es muy chica
Me dí una ducha rápida y me acosté en el living con la intención de mirar una película, pero en vez de eso me quedé profundamente dormido
---------------------------------------------
El sonido del timbre me despertó
Estaba en cuero y tenía puesto el jean con el que me había acostado, ojalá no sea mi madre o alguien a quien no quería verMe levanté y fui a la puerta para abrirla
-¿Ema?- dije más que sorprendido
¿Vino en el medio de la noche a buscar su celular?
-Lo único que me falta es que te hayas olvidado de que tenías clase conmigo- me dijo no de muy buen humor
-¿Clase con vos?¿Qué hora es? - le pregunte más que confundido
-Son casi las 3 de la tarde, por lo que veo estabas durmiendo- y recorrió mi torso con la vista
-Em, si creo que si... Pasá, ahora vuelvo- le dije para ir a mi habitación y minimamente cambiarmeLa dejé pasar y fui a mi habitación, me dí una ducha increíblemente rápida y me puse un pantalón negro con una remera azul oscuro de mangas cortas
Me quedé descalzo porque no encontraba las zapatillas y en mi casa siempre hace calor
Acomodé mi pelo con los dedos y volví al living en donde había dejado a EmaElla estaba con su celular en la mano dándome la espalda
Esa espalda, ese trasero
Dios, me encantaSacudí mi cabeza ante todos los pensamientos que se cruzaron por mi mente en ese momento
-¿Lo apagaste vos?- me preguntó dándose vuelta y quedando en frente mío
-Si, no quería que se te termine la batería- le dije despreocupadamente¡Mentira! Yo sabía que era mentira, pero ella no tenía porque saberlo ¿no?
-Bueno, gracias por no revisar nada- me dijo sin dejar de apretar las teclas de ese aparato
-¿Cómo sabés que no revisé nada?- le pregunte mientras me sentaba en el sillón
-Porque no te incumbe- me respondió cruzándose de brazos
-¿Y si yo quería saber con que otros hablas?
-Yo te diría que te estas confundiendo conmigo- me respondió para sentarse en la mesa y sacar sus carpetas de la mochilaEsta chica no está bien psicológicamente, ¿enserio tiene pensado empezar la clase?
- Tendríamos que dejarlo un tiempo- me dijo luego de unos minutos
-¿Segura?- le pregunto algo sorprendido al haberme tomado completamente de sorpresa¿Ella quería que lo dejáramos? No tuve suficiente de ella como para que no me dejara tocarla más
¿De dónde sacó que hay que dejarlo?-No sé si estoy segura, pero creo que nos estamos involucrando demasiado- me dijo a medida que yo me acercaba para quedar a un par de centímetros de su rostro
-No estoy de acuerdo, no quiero dejarlo- le dije tomándola de la mano haciendo que se parara y acercándola aún más para susurrarle al oído -quiero más de vos todavíaElla se tensó y ahogó un gemido para que yo no notara el efecto que seguía teniendo en ella
-Bueno, pero yo sí estoy de acuerdo- me dijo haciéndose la dura y despegándose de mi
-Perfecto, pero dame una última noche con vos y lo dejamos, pero si lo dejamos es para siempre no por un tiempo- le dije guardando un mechón de su pelo detrás de su oreja
-Hecho- me dijo tendiéndome la mano
-Hecho- le respondí tomando esa mano y apegándola de nuevo- hoy a la noche toco con la banda en un bar, te espero- le dije y besé su cuelloElla se separó de mi y guardo sus cosas en la mochila para dirigirse a la puerta
-Nos vemos a la noche entonces- me dijo y se fuéNo se puede resistir a estar una última noche conmigo, no se va a deshacer de mi tan rápido.
Narra Ema.
No sé exactamente que estaba haciendo cuando le dije de dejarlo
¿No quiero tenerlo más encima mío haciéndome sentir la única mujer en el mundo? ¿No quiero sentir su lengua caliente chocando contra la mía?Lo único que sé es que no quiero que ninguno de los dos se involucre más allá de unas cuantas noches juntos
Salí de la casa de Federico y visualicé el auto de mi hermano, le había dicho que me pase a buscar para merendar juntos, pero después de lo que hice solo quiero hablar con Rocío
Sé que me va a putear en todos los idiomas, pero es mi vida ¿no?
Me subí al auto y le dí un sonoro beso en la mejilla a Cristian
-¿Vamos a merendar?- me dijo sonriendo
-¿No te enojás si lo dejamos para otro día? Quiero ir a hablar con Ro- le pregunte mirando por la ventanilla
-No hay problema Em, Julia me había preguntado si la acompañaba a una reunión - me contestó y me guiñó un ojo -¿Sigue viviendo en el mismo lugar de siempre?
-En el mismo- le dije con una media sonrisaEl camino a la casa de Rocío fue silencioso no era un silencio incómodo pero me obligaba a pensar lo que dije hace unos minutos a Federico y no me gustaba entonces prendí la radio y me concentré en la chica que cantaba como una cabra pariendo
Estacionó el auto en la vereda y me saludó diciendo que si quería luego pasaba por mi, le dije que le mandaba un mensaje y me dejo allí para ir a encontrarse con su aburrida novia
Toqué el timbre y una adormilada Rocío abrió
-Quiero hablar con vos, creo que me mande una cagada- le dije para pasar y entrar a su habitación dejándola petrificada en el marco de la puerta principal
-¡Hola Ro! ¡Hola Ema! ¿Cómo estas tanto tiempo amiga? Super bien ¿vos? Bien - me dijo irónicamente Rocío para sentarse en su cama al lado mío
-Perdón, es que... - termine la oración con un suspiro y me recosté en la cama
-Algo me dice que esto esta relacionado a Federico
-¡¡Sorpresa!!- le dije tapándome la cara con uno de sus almohadones
-¿Que hiciste Ema Sóñez?- me dijo cruzándose de brazosDespués de unos segundos me saque el almohadón de la cara y lo dejé tirado en el piso
-Le dije que lo dejáramos.
ESTÁS LEYENDO
Mi profesor particular
Teen FictionEma Sóñez siempre sintió una atracción hacia su profesor particular. Federico estaba siempre en su cabeza, lo que ella no se imagino nunca era donde y cuando de lo iba a encontrar ...