-Siempre ahí. -Junto a ti.

Capitulo 18: Vuelvo a ser la rara.

Bueno, ya estoy aquí de nuevo. Este capítuo es uno de los que más me costó escribir, ya entenderéis porqué. 

Como ya os avisé la última vez que subí capítulo: ESTO SE ACABA. Contando este capítulo quedan 9, el epílogo, un final alternativo que da a una segunda temporada (que ya aviso que no escribiré, a no ser que me venga una inspiración divina) y un capítulo extra.

Espero no tardar demasiado en subir el próximo.

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Besimiaus @Milusa98

P.D.: DIOS COMO MOLAN LA NUEVAS CANCIONES AAAHHHH!!!!!! Estoy desenado que sea martes para poder comprarme el disco. Aunque no podré ir a la firma de discos jum.

2P.D.: En este capítulo he incluido un factor nuevo que nunca había usado. Espero que os guste.

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Acababa de tocar el timbre que indicaba que las clases habían finalizado. Hoy venía a recogerme Kike por lo que me di prisa en recoger.

Me despedí de mis amigos y compañeros hasta el día siguiente y salí todo lo rápido que me permitían mis pies sin tropezar.

Llegué a la entrada del instituto y entre todo el barullo de gente encontré a mi choco. Apreté un poco más la carrera y cuando estuve cerca de él, me lancé a sus brazos.

Rodeó con sus brazos mi cintura y comenzó a dar vueltas sobre sí mismo.

-Hola –dije cuando me soltó en el suelo-.

-Hola –me saludó él-.

Acortó la distancia entre nosotros uniendo nuestros labios en un beso.

-Tenemos que hablar –anunció él cogiendo mi mano y arrastrándome fuera del instituto-.

-¿Vamos a comer fuera? –le pregunté-.

-Sí –dijo serio mirando al frente-.

¿Qué le pasaba?, ¿había dicho algo? Estaba muy raro hoy.

-Tengo que llamar a Ángela para decirle que hoy no como en casa –dije sacando el móvil de mi bolsillo-.

Le expliqué a Ángela la causa por la que comería fuera y me deseó que los pasara muy bien.

En el camino íbamos en silencio, lo que hizo que recordara el tema del anónimo que recibí el día anterior. Kike comenzó a hablar pero yo a penas prestaba atención, iba contestándole con monosílabos o simplemente con asentimientos y negaciones de cabeza.

-Cristal, ¿me estás escuchando? –me paró Kike en medio de la calle-.

-¿Ehh?

-¿Me estás escuchando? –repitió Kike-.

-No, lo siento.

-¿Qué te pasa? Últimamente estás my rara.

-No me pasa nada –mentí, en realidad estaba preocupada-.

-Sabe que a mí me puedes contar lo que quieras ¿verdad? –insistió él-.

-De verdad, no me pasa nada.

Seguimos andando hasta que llegamos al Retiro, nos sentamos en un banco y le pregunté:

-¿De qué querías hablar?

-Últimamente pasamos muy poco tiempo juntos, te noto distante –comenzó a hablar un poco nervioso -. Además que pasa mucho tiempo con los chicos de Auryn –dijo en voz baja-.