Capitulo VIII

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Penny, Anu, Bernadette y Amy estaban reunidas en el apartamento de esta última para una "noche de chicas". Katie y Halley no solían meterse en esto, tenían sus propias pijamadas donde hablaban diversos temas, pero esta vez necesitaban ayuda de terceros.
- ¿Podrían decirle a Halley que está siendo absurda?- entró en el apartamento la joven y se cruzó de brazos.
- ¿Que ocurre?- preguntó Bernadette confundida.
- Chris quiere que vayamos al parque de diversiones para la primera cita.
- Eso se escucha genial- afirmó Amy.
- Si, y puede ser romántico- continuó Anu sonriendo.
- Si, lo sería, si no le tuviera miedo a las montañas rusas, me dan terror, siempre que intenté subirme a una no pude- Confesó con vergüenza Halley.
- Bueno, entonces dí la verdad y vayan a otro lado- Aconsejó Penny.
- Es lo que le dije pero no me quiere escuchar- se quejó Katie.
- ¿Por qué no?- indagó Anu tomando un sorbo de su café.
- Porque no quiero quedar como una boba delante de él, no quiero que piense que soy una miedosa.
- Halley, hija, como yo lo veo solo hay dos opciones, o vas y lo enfrentas, o le decís la verdad y arreglan otra cosa- Afirmó Bernadette.
- Bueno entonces no queda otra opción, voy a decirle.
   Halley tomó su celular y marcó el número mientras las demás la miraban expectantes.
- Hola Chris, quería decirte que... Voy a ir al parque con vos el sábado... Genial, nos vemos.
    Cuando cortó, vió a su madre, sus tías e incluso su prima con una mirada confundida.
- ¿Entonces te vas a subir a las montañas rusas?- preguntó Kathleen sorprendida.
- Hace mucho no voy al parque de diversiones, quizás ahora que estoy más grande pueda darles otra oportunidad.

Halley estaba tan nerviosa el día de la cita, que se probó más de tres conjuntos antes de elegir el que le quedaba mejor.
- ¿Y?¿Como me veo?- preguntó la rubia bajando las escaleras.
- ¿No crees que esa falda es muy corta?- preguntó Howard mirándola impactado.
- Si definitivamente es muy corta- Concordó Neil cruzándose de brazos.
- ¡Chicos no exageren!- exclamó su madre y luego la volteó a verla- Te ves increíble cielo.
- Concuerdo con tu madre- Sonrió Raj- Te ves genial.
   Halley sonrió y se dirigió junto con su padre al auto para que este la llevara al parque de diversiones.

     Cuando llegó, se encontró rápidamente con Chris y comenzaron a pasear y reír, el día era perfecto, hasta que el momento más temido por Halley llegó.
- Mira, ahí está- afirmó el castaño apuntando a una gran montaña rusa- Vamos antes de que allá más fila.
     Halley le tomó la mano y comenzaron a caminar hacia ella, pero cuando estaban cerca, la rubia se detuvo, soltando la mano del joven. Chris pudo ver que algo andaba mal al mirar sus grandes ojos verdes.
- ¿Que pasa?- le preguntó con suavidad.
- Es que yo... Le... Le tengo miedo a las montañas rusas, traté de venir y subirme a una porque no quería que me vieras como una tonta, pero no puedo- respondió agachando la cabeza.
Chris le tomó las manos y apartó un cabello de su rostro para que lo mirara, al levantar la cabeza sus ojos se encontraron con los ojos celestes del joven.
- Nunca voy a pensar que sos tonta por tenerle miedo a algo, todos tenemos miedos y es totalmente normal, debiste habérmelo dicho.
- Lo se... Pero... Me daba vergüenza.
- Lo entiendo, pero tranquila, no necesitamos subirnos a las montañas rusas para pasarla bien, veni seguirme.
    La llevó hasta un juego con temática de tazas de té. Estas giraban rápidamente sobre una plataforma alrededor de una tetera, además en el medio de estas había un volante que hacía que giraran aún más.
     Halley rió como nunca y subieron como tres veces a ese juego ya que no había cola. Luego se dirigieron a los autos chocadores, donde cada uno tuvo el objetivo de chocar al otro.
    Después de pasar una tarde increíble, se sentaron a comer algo de lo que ofrecían en el parque y charlar un poco.
- ¿La pasaste bien?
- Si, fue genial, nunca me había divertido tanto en un parque de diversiones.
- Te lo dije, fue una gran cita- pensó el joven- Deberíamos volver a salir.
    A Halley se le dibujó una sonrisa enorme en el rostro y sus ojos brillaron.
- S-Seguro- contestó.

   Al llegar a casa, Halley vió a Neil, Luke y Elliot jugando a la play.
- ¿Como te fue?- Le preguntó el joven a su hermana.
- Estuvo increíble, Chris aceptó mi miedo y la pasamos increíble.
- ¿Ósea que van a seguirse viendo?
- Seguro que si, bueno, voy a mi cuarto, ¡Tengo que contarle todo a Luan!¡Y a Katie!- exclamó para irse casi volando arriba.
- Esto está mal.
- ¿Que está mal?- preguntó Howard entrando al salón.
- Creí que Halley solo tendría una cita con este chico, pero parece que me equivoque...- dijo con la cabeza baja.
Howard suspiró y se sentó al lado de su hijo, poniéndole una mano en el hombro.
- Michael, a mi también me preocupa que la lastimen, es mi hija y quiero protegerla, pero no podemos decidir por ella ni evitarlo, lo que si podemos hacer es estar para ella si pasa.
Neil reflexionó por unos instantes bajo la mirada de su padre, finalmente este lo miró y sonrió.
- Supongo que tienes razón- dijo no muy convencido intentando esbozar una sonrisa.
Howard despeinó el cabello del joven, lo que provocó que ambos rían.

Al día siguiente, Katie, Elliot y Luke estaban en el casillero de la rubia cuando Neil apareció sonriendo.
- Hey, ¿Sabes quien volvió a la cuidad?- comenzó a hablar Neil.
- Lo mismo que ayer- Comenzó a hablar Elliot- Se muchas cosas...
- Lo mismo que ayer, no nos importa- Acotó Luke haciendo reír a Katie- ¿Quien volvió?
- Chad Smith.
- ¿En serio?
- ¿Chad Smith?¿Era ese amigo tuyo que se mudo?- Interrogó Katie
- Ese mismo- respondió Neil- Parece que a su padre lo transfirieron de nuevo y se mudan de vuelta, me lo  cruce el otro día y me dió su nuevo número.
- Cool, pásamelo y le hablo más tarde.

    Finalmente, Luke y Chad hablaron y arreglaron para verse en la plaza. Se saludaron con alegría y emoción por no haberse visto. Luego de ponerse al día y reír un rato, decidieron ir al apartamento de Luke.
      Cuando entraron, vieron a Katie con Elliot mirando la tele, Estaban solos ya que Amy y Sheldon estaban arriba en el apartamento de Penny y Leonard hablando con ellos.
- ¡Hey! Hola- saludó la rubia- ¿Como les fue?
- Genial, nos reímos como nunca Katie.
- ¿Katie Hofstadter?- cuestionó Chad con sorpresa.
- La misma- rió la rubia.
- Wow, ¡estás genial!
-Si ya había establecido eso hace un tiempo- dijo entre dientes Luke.
- Gracias- sonrió cálida.
- En fin, Luke, quería invitarte a una pequeña fiesta que voy a hacer en mi casa por mi cumpleaños.
    Los Smith eran una familia adinerada, por lo que se trataba de una fiesta elegante y de etiqueta, a lo grande como estaban acostumbrados.
- Ah, ¿vas a traer a alguna invitada no?- sonrió el rubio.
- Ehm... Bueno...
    Al ver lo incómodo que se había puesto Luke, Katie trató de pensar algo rápido para sacarlo de esa situación. Finalmente se le ocurrió algo, por lo que se acercó apurada.
- Va a ir conmigo- dijo apoyándose en el hombro del castaño- Su novia.
    Tanto Luke como el joven de ojos marrones la miraron anonadados mientras Katie sonreía orgullosa por la idea que había tenido.
- Wow, no sabía que ustedes dos...- comenzó a decir Chad.
- Si, hace... ya un tiempo- respondió nerviosa Katie.
- Eh... Si... supongo- La secundo Luke.
    Entonces, tomando a Luke desprevenido, con el dorso de la mano hizo que la mirara y lo besó. Al separarse, Luke se había quedado mirando estupefacto a Katie a la vez que está lo miraba a los ojos, estaba tan sorprendido como Chad, que los miraba con una sonrisa pícara.

TBBT: La nueva generación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora