. AVA.
Me separe lentamente de Damian, lo miro a los ojos, esa siniestra mirada que no cambiaba, no tenía sentimiento alguno, me preguntaba si lograba sentir algo, el eleva su mano y acaricia con su pulgar mi labio inferior.
-¿Que piensas hacer luego de completar la venganza?- Pregunta con voz ronca y seriedad, mi mandíbula se tensa y aparto mi mirada.
¿Que pensaba hacer?, ya nada tenía sentido, no tenía nada.
-¿Que harás tu?- Pregunto bajo, Damina parpadea y me mira de forma fija.
-Seguirte- Es lo único que responde, frunzo levemente mi ceño y me alejo, pero Damian coloca sus manos en mi cintura y me atrae a su cuerpo, lo observo tensa -Eres la primera persona que me comprende- Susurra, entrecierro mis ojos.
El es como Elliot, desastre de el también.
Hago un gesto ante esa voz siniestra susurrando en mi mente, aprieto mi agarre en la chaqueta de Damian, y me alejo un par de pasos, mi cuerpo comienza a temblar, esa voz susurra en mi mente, bajo mi mirada al sentir mis manos con un líquido tibio, entre abro mis labios y jadeo con horror al ver la sangre, comenzó a negar, el dolor en mi vientre se hace presente.
-Basta, silencio, ¡Ya no más!- Grito con desesperación, de pronto todo queda en silencio, agitada miro mis manos ya no hay nada, mis piernas débiles, mi labio inferior tiembla, caigo de rodillaz.
Damian llega a mi y se coloca de rodillas, mi mirada perdida en mirando mis manos, Damian toma mi barbilla y me hace mirarlo.
-Después de esta noche, puedo conseguir medicamento para ti, es el que yo tomo y eso detiene un poco más los delirios-
Parpadeo y lo miro, mi expresión se vuelve fría y aparto su mano de mi rostro, Damian me mira con seriedad, esos ojos siniestros que tanto conocía ahora.
-Solo trae a Elliot esta noche, lo demás, no importa- Murmuro apretando mis manos en puños, puedo sentir como mis uñas lastiman las palmas de mis manos, Damian humedece sus labios y una pequeña sonrisa maliciosa se curva en ellos.
......
Abro la puerta de mi casa, recorro con mi mirada la sala, no había nadie, las bolsas de regalos ya no estaban, no escuchaba ningún ruido, frunzo levemente mi ceño, comienzo a caminar hasta la cocina, un sentiemiento extraño me invadía, un sentimiento de persecución, sentía que alguien estaba tras de mí, me giro con miedo al sentir a alguien a mis espaldas pero no hay nadie, mi respiración se comienza a acelerar.
Escucho como alguien corre en la cocina salto asustada y dirijo mi mirada a ella, no hay nadie, trago con dificultad, ¿Que me estaba ocurriendo?, entro en la cocina, ¿Donde estaban mis padres?, doy un paso para salir mi zapato pisa algo, bajo mi mirada hay un vaso de vidrio roto, profundizo mi ceño, me inclino y comienzo a tomar los trozos de vidrio para tirarlos, hago un gesto cuando unos de ellos me corta de forma profunda en mi pulgar dejo caer el trozo de vidrio y jadeo, observo como la sangre comienza a salir.
Escucho pasos de alguien acercándose a la cocina elevo mi mirada y me congelo al no encontrar a nadie, bajo mi mirada a mi dedo herido, ya no hay nada, no hay sangre, no hoy vidrios rotos, mi mano no esta herida, trago con dificultad, mi corazón comienza a latir con fuerza, trago con dificultad y con temor salgo de la cocina corriendo.
Respiro agitada y corro por el pasillo me asomo en la habitación de mis padres, no hay nadie, humedezco mis labios me dirijo a su estudio, me detengo cuando logro escuchar sus voces, voy a tomar el tomo de la puerta pero antes escucho algo que me deja congelada.
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PSYCHO
Mystery / Thriller"Nadie es loco hasta que le toque serlo". La muerte llega al pequeño pueblo de Brigedport, ¿Quién es el responsable?.