Capítulo 6: Caer en la realidad.

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Aristóteles se encontraba trabajando, después de clases trabajaba lo que eran 4 horas diarias para poderse sostenerse. Mientras laboraba, muchas cosas en su cabeza empezaban a invadirlo. Estaba colapsando solo, una tristeza inminente a su corazón empezó a llegar.

Empezó a analizar lo ocurrido en toda la semana en el colegio y como de un verano a otro todo ya había cambiado. Y como su amistad de años con Lesly se estaba desmoronando y como podría importarle muy poco.

Analizando la situación sin darse cuenta cayó en la realidad que estaba dispuesto hacer cualquier cosa que su amigo le pidiera para mantenerlo contento. Y como eso si podría importarle demasiado. Estaba todo demasiado raro, y no podía entenderse así mismo. Estaba demasiado confuso. Y solamente
esperaba que eso no afectara en nada de lo que viniera en adelante.

     •••

Y si afectó.

Lesly llegó al salón muy emocionada para saludar a su amigo y obtuvo solamente su indiferencia, y bueno. Ya era suficiente su papel tan lamentable, si él realmente iba a querer su amistad ahora tendría que costarle a él.

Juntó todo el valor del mundo e hizo exactamente lo que su amiga Yolo le dijo en caso de obtener esa respuesta.
Dio media vuelta sobre si y se fue, pero esperaba que no fuera demasiado tarde cuando Aristóteles se diera cuenta que lo único real que había tenido se iba frente a sus ojos.

Al otro lado del salón se encontraba Temo presenciando dicha escena y en su rostro mostraba una sonrisa triunfante y miró con orgullo a su amigo y de su boca salió exactamente lo que Aristoteles adivinó lo que diría.

-Bien hecho campeón. Ya era momento que se diera cuenta que entre ustedes nunca habría nada.

-Va a regresar, siempre vuelven.—afirmó. Pero en un mundo paralelo, ¿Aristóteles regresaría?.

Ambos disfrutaron el resto de las semanas sin ningún tipo de interrupciones, Lesly ya no iba en busca del rizado y extrañamente Diego empezaba a faltar demasiado. Así que entre los chicos reforzar su amistad era algo que disfrutaban entre los dos, incluso una especie de juegos raros entre ellos empezaba a formarse. Y Temo aprovechaba cada oportunidad.

Y hoy por la tarde irían de nuevo a la casa del más bajo para jugar, esta vez sería algo diferente. No habría videojuegos de por medio, sino alcohol y retos. Parecía una idea interesante para el trío de amigos, porque si, Diego aparecería después de 4 días de ausencia.

A las 11:00 PM los chicos se encontraban muy activos, el alcohol ya empezaba a hacer efecto. Y Aristóteles se le ocurrió la gran idea de jugar "a la botellita" entre los tres. Era extraño porque solo eran ellos tres pero a la vez era divertido por que los retos podrían ser más naturales. Por ello al girar la botella una tensión increíble se hizo presenciar. Señalando a Temo y a Diego, la boquilla apuntaba que el peli-negro mandaba y Temo obedecía. Al peli-negro se le ocurrió la gran idea de incomodar a sus amigos con tal de ver sus reacciones.

-Haber pendejos, vamos a poner divertido esto y culo quien no lo haga.—reía mientras lo decía, sabía que era estúpido pero ver la reacción de sus amigos valdría la pena.— Te reto Temo... a que entre tú y Aristóteles hagan un reto de miradas y el primero en reírse tiene que darle un beso al otro.—terminó de decir y carcajeó.

-¿Es broma, no? No mames, pinche Diego joto.—reclamó Aris, ni en pedo se besaría con nadie.

-Yo no creo que sea buena idea.—Temo susurró por lo bajo, realmente no podría sostenerle la mirada a Aris, lo ocurrido en la clase de Inglés la otra vez había sido demasiado incómodo y vergonzoso, esta vez no sabría como reaccionaría siendo que el 50% de su cuerpo no se encontraba cuerdo.

-Sean mamones, es un juego esto de todos modos.— se encogió de hombros y bebió un trago más de su vaso con cerveza.

-Esta bien pero se me hace estúpido.—El rizado aceptó dicho reto, pero no pasaría a mayores.

-Tú... ¿a ti te da asco el contacto entre personas de tú mismo sexo?... quiero decir, ¿Eres homofobico, Ari?.—Temo no pudo evitar preguntar, si al rizado realmente le causaba conflicto hacer dicho reto no lo haría el tampoco. Esperaba que la respuesta fuera lo contrario a lo que él imaginaba.

-No soy homofobico, agh. Quiero decir, respeto la decisión y gusto de cada quien pero mi teoría es que no lo considero correcto. ¿Me explicó? como esos que adoptan y así. Un niño merece tener a su papá y a su mamá. Pero en fin, hagamos esto.— se encoge de hombros restándole importancia a ese tema.

El más bajo tragó seco y sintió un frío recorrerle la espalda. Sus manos sudaban y ahora si no sabría que quedaría de él después de eso. Se hincó frente al rizado y éste hizo lo mismo pasando sus manos hacia atrás para hacer sus rulos aun lado y sacudió su mirada para ponerla sobre la mirada del más bajo. De fondo una canción de Narazeth sonaba y Diego estaba siendo testigo de algo que podría ser el inicio de una gran tormenta, pero eso él ni nadie lo sabía, ni siquiera Temo.

Aristóteles estaba nervioso, ese reto en vez de resultar divertido y pretencioso estaba causándole una incomodidad absoluta, sus pupilas ya no sabían hacia qué dirección mirar, había analizado cada detalle del más bajo. Y podía notar como la respiración de Temo estaba siendo entrecortada. Como con sus ojos rogaba que por favor no se riera, como se intimidaba con tan poco y como sus orejas lo delataban, lo notó. Su corazón empezó a latir con fuerza, esos segundos estaban convirtiéndose en una eternidad. Y una corazonada horrible lo hizo sentir en el pecho al ver como todo el cuerpo de Temo se le estaba entregando por completo sin siquiera intentarlo, sin decir palabra alguna. No podía ser lo que estaba pensando, no iba a seguir con eso, al demonio con ese juego estúpido. Se paró y fue directo al baño, Diego lo siguió con la mirada y su expresión de confusión lo hizo sentirse más confundido cuando vio a Temo seguir hincado y con su mirada puesta al piso cubriendo con sus manos su rostro por completo.

Que demonios había ocurrido.

Cruce De Miradas - Aristemo #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora