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Narra Sergio Jr:

- Haber ¿ y quién es la chica de la que te has enamorado? - le pregunto sonriendo mirandolo fijamente a los ojos y él niega con su cabeza - oh vamos Jesús nos lo hemos contado todo desde pequeños, cuentamelo sé que lo estás deseando.

- Bueno no sé como se llama - se encoje de hombros - la conocí el otro día después del entrenamiento, antes de encontrarme contigo - explica, por favor que no sea ella.

- ¿Es ella? - le enseño una foto y él asiente - alejarte de ella, te lo digo por las buenas, no me hagas enfadarme.

- Que seáis amigos te da derecho a prohibirme hablar con ella o no - habla Jesús y yo lo miro mal - además la chica me gusta, le voy a pedir un cita.

- Ella es la chica de la que llevo enamorado desde casi que era un moco joder, compartimos clase, dormíamos juntos, eramos los mejores amigos, y no voy a permitir que vengas tú a quitármela ahora- hablo serio levantando la voz.

- ¿Y por qué mejor no dejamos que elija ella? - pregunta él planteándome cara.

- Porque ella ya ha elegido es que no lo entiendes, el mismo día que la viste a ella acaba de salir de la misma habitación que yo porque habíamos hecho el amor - respondo mientras los dos no dejamos de levantar la voz.

- Haber lo dos ya - habla mi padre colocándose en medio de nosotros dos - qué os pasa ya, últimamente os pasáis el día peleando.

- Me quiere quitar a la chica desde que estoy enamorado desde pequeño- hablo intentado golpearlo.

- Haber tranquilidad, ¿quién es esa chica?, que es tan importante para que os estéis peleando por ella - pregunta de nuevo mi padre.

- Es Mía, joder - suspiro retrocediendo varios pasos - es la hija de la tía Raquel y el tío Joaquín - respondo y su cara cambia por completo.

- Ana ven que esto se me está yendo de las manos - grita mi madre, lo que hacía falta ahora, mi madre también.

- Ay de verdad siempre tengo que hacerlo todo yo - protesta mi madre entrando al salón - ¿qué pasa?

- Que tu hijo y tu sobrino se están peleando porque los dos quieren tener Mía Correa Mina ¿te suena? - le explica mi padre y mi madre se llama las manos a la cabeza.

- Nada de lo que me digáis va a hacerme cambiar de opinión- habla Jesús.

- Lo que te voy a pegar es una hostia que te va a volar la cabeza - hablo cabreado intentando acercarme a él
él para golpearlo.

- Parad los dos ya - habla seria mi madre - pero vosotros os creéis que esto es normal, y además sois conscientes de quienes son sus padres, no os van a dejar acercaros a ella - habla y yo suspiro pesadamente para despues salir corriendo de casa.

- ¿Pasa algo Sergio? - pregunta ella descolgando mi llamada segundos después lo que me hace sonreír.

- No pasa nada- susurro sentándome en un banco - solo necesitaba por tu voz - vuelvo a susurrar.

- Esta bien, oye ¿les puedes decir a tus padres que me recojan pasado mañana?, es que en taxí me clavan hasta el hotel - pide.

- Claro, yo se lo digo no te preocupes- sonrio.

- Te tengo que colgar, mis primos me están dando la brasa, nos vemos dentro de unos días- se despide antes de colgar.

La pequeña CorreaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora