Parad los dos ya - habla seria mi madre - pero vosotros os creéis que esto es normal, y además sois conscientes de quienes son sus padres, no os van a dejar acercaros a ella.
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Narra Mia:
- Bueno la que faltaba - susurro al ver sentarse a Adriana a unos metros de nosotros.
- ¿Tienes algún problema conmigo? - pregunta acercándose a mi para plantarme cara.
- Pues mira si que tengo un problema contigo y muy gordo, ¿te crees que soy imbecil?, Sergio me lo ha contado, llevas desde que fui yendo de pista regalada - hablo seria mirándola a los ojos fijamente.
- Tú te fuistes dejándolo como una puta mierda, el pobre sobre lloraba por ti y mírate tú me llamas regalada, si te has insinuado con medio equipo desde que has llegado, ¿qué te crees que la imbecil soy yo?, las paredes hablan Mía y me han contado muchas cosas - habla mirándome desafiante- estoy deseando que acabe el partido, salga Sergio y contarle que te has insinuado con su primo Jesús.
- Solo le pedi la hora y sabes por qué, - sonrio triunfante- porque mi reloj se lo había quedado Sergio después de hacer el amor con él, disfruto conmigo, con mi cuerpo, y por mucho que hagas nunca lo hará contigo - le informo girandome con un chute de autoestima.
- Ven aquí perra - habla antes de cogerme del pelo.
- A mí no me hablas así regalada, porque ni puta puedo llamarte, porque ellas por lo menos lo hacen por dinero, tú solo buscas un poco de dignidad, sin darte cuenta de que hace mucho que ya la has perdido toda - la golpeo y ella hace lo propio conmigo, comenzando así una pelea.
Narra Sergio Jr:
El árbitro pita algo que no logro entender hasta que miro hacia la grada donde estaba Mía, se está peleando con Adriana, ahora si que lo entiendo todo.
- Paren - hablo cogiendo a mi amiga de la cintura mientras el chico de antes cogía a Mía para intentar separarlas - ¿pero qué les pasa?
- Tu estupida novia, que le he podido hablar y ya ha saltado sobre mi como gata en celo - explica Adriana y yo miro a Mía.
- Mientes más que hablas cacho zorra, dejame que me escape de aquí boluda, que te voy a agarra a piñas - intenta deshacerse del agarra del chaval y este lo que hizo fue hacerlo un poco más fuerte.
- Mía para ya - hablo serio - me parece muy fuerte que le hayas hecho esto a Adriana ella solo quiere ayudarnos cuando lo vas a entender , lleva con nosotros desde pequeña, siempre ha querido lo mejor para nosotros.
- Cree a quién te de la gana me tienes harta, he tardado más de tres horas para venir a apoyarte a un estupido partido y así me la pagas, vete a la mierda - grita deshaciéndose del agarre y saliendo a correr.
- Mía espera - grito su prima corriendo detrás de ella.
- Has cometido un gran error Sergio y pronto te darás cuenta de él- habla el chico y yo suelto una carcajada.
- ¿Quién te ha dado vela en este entierro imbecil? - pregunto y él me mira serio.
- Pues resulta que soy su primo y juro que como le pase algo te la cobró- me amenacé antes de salir corriendo también.
