Enredos

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Dahyun no fue a trabajar durante dos días, permanecía tirada sobre su cama, día y noche. Solo se levantaba para comer un poco y revisaba su celular cada cierto tiempo. No le decía a nadie todo lo que estaba sucediendo porque no quería involucrar a más personas y también era porque sentía vergüenza de todo lo que su padre llegó hacer en su tiempo de vida.

Las manos de Sana, estaban manchadas por un montón de sangre de todas las personas a las que asesino. Entre ellas, estaba la sangre de su padre y el ser que más amo en todo el mundo antes de que perdiera la vida en ese conocido ''accidente''.

Chaeyoung se la pasaba llamándola, hasta que por fin luego de muchos intentos termino aceptando la llamada y también la invitación para salir en la noche, ya que el humor de su mejor amiga estaba mejorando y no era para menos, Mina y ella estaban intentando arreglar las cosas.

Revisaba su celular, tenía varios mensajes de su madre pidiéndole que fuera a comer a casa. Eso haría, debía verla. Después de aquella visita repentina, se fue corriendo de ahí y no quiso volver hablar con su madre. No la culpaba, pero tampoco se sentía del todo bien como para mirarla. Estaba tirada sobre su cama, abrazando todas las almohadas de su cama y se perdía entre toda la suavidad de ellas. Miraba su mesa que estaba aún lado y más que nada la foto que estaba puesta aun lado.

Su celular empezaba a sonar, parecía estar recibiendo una llamada y era nada menos que Eunwoo. Al no responder le envió un mensaje, era un pequeño mensaje corto.

«Pequeña Dahyun. Solo quería saber como estabas y espero que estés bien. Quería ver si quisieras aceptar salir hoy... prometo que te divertirás»

Dahyun lo pensó mucho, pero necesitaba amigos y entre más estuvieran en su pequeña salida sería mucho mejor. Lo termino invitando, el chico terminando aceptando y se verían a las 11 en un club que Chaeyoung había reservado para que fueran.

Luego de terminar de enviar un par de mensajes más, asentó su celular en la mesa y tomó el diario que pertenecía a Sana. No era una persona que le gustará invadir la privacidad, pero tenía demasiada curiosas sobre la vida pasada de la japonesa. Fue a unas páginas más adelantadas y buscaba algo interesante, hasta que llegó a un en dónde contenía el nombre de Tzuyu.

«Hoy conocí a una chica de nombre Tzuyu, le gusta divertirse y parece ser una chica fría. No sabía que tendría este tipo de gustos, pero realmente siento que me gusta mucho. Me preguntó si alguien como ella, se fijaría en alguien quién no es nada en esta vida »

Dahyun se quedo pensativa unos segundos.

—Es verdad. Antes de conocerme, Sana estuvo muy enamorada de Tzuyu. Siempre tuve una duda ¿Por qué me prefirió a mi sobre Tzuyu?—Se quedo en silencio unos segundos—¿La chica con la que debo tener cuidado es la misma que fue a buscarme quién es prima de Tzuyu? 

Intento buscar entre sus páginas si había algo al respecto y en efecto. Una de las páginas tenía el nombre de una chica, ese nombre del cuál nunca escucho salir de los labios de Sana.

«Cuándo veo a Minjoo, tengo esa necesidad de protegerla junto a Mina. Eso, me da a entender que aún tengo un poco de humanidad en mi ser. Que aún tengo ciertos sentimientos que debería abandonar. Ella es muy apegada a nosotras, pero no sabe la verdad de nuestro ser y ella tampoco parece saber que la trajo aquí. Pensé que le sucedió lo mismo, pero no es así »

Aún lado de esas palabras estaba un dibujo y una carta que al parecer nunca fue abierto. Al parecer Sana, nunca tuvo el valor de leerla o tal vez se olvido de hacerlo. Dahyun, la abrió y al principió dudaba por no querer invadir más la privacidad de Sana.

LET ME IN 2 (SAIDA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora