Pero...¡¿15 años?! (AiBaku)

Capítulo XIV: Negación y resignación

Era una tarde bastante silenciosa y tranquila para la clase 1-A, en especial si se toma en cuenta que este era el grupo más desastroso y escandaloso de toda la U.A., no obstante el silencio sepulcral del aula no se debía a que los estudiantes hubieran decidido comportarse en clase, no, lo que provocaba aquella ausencia de bullicio entre los estudiantes era la crisis personal que parecían estar atravesando siete de sus miembros, quienes habían permanecido en un estado de completa ausencia mental desde que volvieron de sus chequeos con la enfermera de la escuela, ¿Qué rayos les habían dicho como para que estuvieran así?

Y tal vez hubiesen ignorado la actitud de sus compañeros al interpretarla como puro nerviosismo por tener que convivir a diario con la que sería su pareja para toda la vida, pero el hecho de que su siempre indiferente maestro titular no hiciera más que observar cada tanto al chico más escandaloso de la clase (que curiosamente estaba muy callado) como queriendo asegurarse de que todo estaba bien mientras este fingía no darse cuenta, o tal vez estaba tan ensimismado en sus pensamientos como para notarlo, que despertó la curiosidad y preocupación del resto de estudiantes, que ahora más que al principio deseaban saber que sucedía con sus compañeros, y si podían ayudarlos a aligerar las cosas de alguna manera.

Y fue el sonido de la campana que indicaba el inicio del descanso seguido de la salida del aula de su profesor lo que les dio la oportunidad perfecta para tratar de conseguir información de sus compañeros, la pregunta era ¿Cómo sacarlos de su ensimismamiento sin verse agresivos?

- Uraraka-chan, Mina-chan ¿Cómo les fue con Recovery Girl? kero – Fue Tsuyu la que decidió intentar iniciar la conversación, sin embargo, sabia que para involucrar a sus compañeros en esta debían estar dispuesto a hacer algunos sacrificios primero.

- ¿Eh? -Aunque sus amigas parecían un tanto desubicadas al principio, rápidamente captaron la indirecta al ver a Tsuyu mirar disimuladamente hacia las parejas.

- Erm, bueno, no fue nada en realidad, es solo que... - Mina fue la primera en reaccionar y unirse al plan de Tsuyu, a pesar de que no parecía estar realmente cómoda con ello, afortunadamente para ella, Uraraka se unió a la conversación con la firme idea de conseguir alguna información de las parejas que pudiese ayudarla a darle apoyo a su amigo de lentes.

- Si, es un poco vergonzoso, es decir, solo nos explico sobre las parejas y el celo con más detalle, así que...fue algo incomodo, creo

- ¿Parejas? Kero – A pesar de que el plan original era convencer a los otros de unirse a la conversación a través de sus amigas, lo último había llamado la atención de Usui y sus compañeros.

- Si, ya saben somos betas ¿no?, entonces cabe la posibilidad de que nuestro segundo sexo no se haya manifestado y en realidad seamos alfas u omegas – Uraraka intento explicarse, pero el tema realmente parecía haberla puesto un tanto nerviosa.

- Exacto, es por lo que Recovery Girl nos explico esos temas con mas detalle, ya saben porque si llegásemos a conocer a nuestra pareja destinada, tal ves nuestro segundo sexo se manifieste, así que debemos ser capaces de interpretar las señales – Dejando de lado el nerviosismo inicial Mina parecía haber recobrado el control de si misma lo suficiente como para salvar a su amiga de la vergonzosa situación en la que Usui las había enredado.

- Ooh, supongo que tienen razón, no lo había pensado, ¿mm? – Tsuyu se había interesado tanto en la conversación que por poco y no nota la manera ligera y hasta tímida con la que Yaoyorozu, Jirou e Iida se habían acercado al grupo – oh, chicos ¿quieren unirse? Kero

- ¿Eh? Bueno... - La primera en reaccionar fue Jirou, sin embargo, los nervios le traicionaron en el último momento.

- No necesitan avergonzarse...aunque en realidad todos lo estamos un poco – Seguido de una risa nerviosa el comentario dicho por Sero consiguió relajar a sus compañeros que parecían sentirse más a gusto sabiendo que todos en el salón se encontraban igual de avergonzados que ellos.