Sigues siendo tú - Khea. [#1-Terminada]

Capítulo 4 - Besos.

— ¡Néfera levántate! —. Me dijo Sofía y fui directo a ver la hora en el celular.

— Déjame dormir son las seis —. Balbuceé.

— No porque tenemos que ir a la escuela a las siete y vos tenés que arreglarte para ir a mi casa así busco mi mochila y algunas otras cosas —. Explicó.

— Ya voy —. Respondí.

Me levanté y fui directo al baño me lave la cara y los dientes, me mire en el espejo, «que diva única e inalcanzable» pensé «ahre re creída».

Fui a mi habitación para buscar una remera azul, un jean y una campera negra de cuero acompañada de unos borcegos del mismo color.

Fui a la cocina dónde estaba Sofía tomando un café y me serví uno para mi sin pronunciar palabra.

— Hablé con Ignacio recién, lo llame y le pregunte si nos podía pasar a buscar, me dijo que si y que viene con un amigo —. Dijo Sofi rompiendo el silencio que se encontraba en todo el lugar.

— Lo re usaba como Uber la mina —. Ambas reímos.

— Para eso es mi novio —. Dijo y me reí mas.

— ¿Cuándo viene? —. Pregunté.

— Ahora —. Respondió.

Se escucho un bocinazo afuera y ella salió corriendo mientras yo buscaba mi mochila y mi celular, salí y atrás mío cerré la puerta con llave. Vi que Sofi abrió la puerta del acompañante mientras había alguien en el asiento de atrás.

Me acerqué a el auto y me di cuenta que  la persona que estaba atrás era Ivo, justo al lado de donde me tenía que sentar.

— Hola linda —. Salió de los labios de Ivo a lo que yo no di respuesta.

— Hola Ignacio —. Dije dándole un beso en la mejilla.

— Hola minion —. Respondió.

— ¡No soy minion! —. Me quejé, odio que me traten de enana.

— Lo que vos digas —. Respondió.

Me pase todo el camino sin pronunciar palabra mientras veía mi celular.

Desconocido

Que feo eso de no saludar.

Visto.

Me encanto tu beso.

No sabia que decir, como actuar a la situación, tampoco sabía como había conseguido mi número.

Vi de reojo a Ivo y una sonrisa estaba dibujada en su rostro «Qué perfecto».

Llegamos a la casa de Sofi, se bajo de el auto y me hizo señas para que la acompañe.

Toco puerta y la madre le abrió.

— Pasen chicas —. Dijo, sofi la saludo y se fue a buscar sus cosas. — Néfe tanto tiempo —. Me dio un beso en la mejilla.

— La verdad que sí —. Sonreí. —¿Cómo está?.

— Bien querida ¿Y vos? —. Preguntó.

— Bien, por suerte.

— Me alegro, ¿Y Claudia como esta? —. Pregunto por mi madre.

— Bien, ahora esta de viaje viene en dos días —. Contesté.

— ¿Y con quien estas?.