13.

5.9K 474 65
                                    

El tiempo que estuve en casa de Taehyung se fue volando.

Los chicos habían decidido reunirse ya que HyeonJu había vuelvo al fin de Daegu, ya que unos años atrás había decidido irse a estudiar.

Él resultó ser uno de los amigos de la infancia de uno de los chicos, Yoongi.

Al pasar un buen rato ahí con todos ellos, tuve la oportunidad de conocerlos, aunque sea un poco.

Y era verdad, SunHee estaba en lo correcto, todos eran completamente agradables.

O tal vez no podía decir tanto lo mismo sobre Jungkook en este momento.

Todo el tiempo estuvo viendo a HyeonJu y al final de la pequeña reunión se acercó a él y le susurró un par de cosas, cosas que claramente no quiso contar después.

Ahora mismo me encontraba dirigiéndome hacia mi casa, sentada de copiloto en el auto de Jungkook, ya que ni eso dejó que hiciera HyeonJu, quien se había ofrecido a llevarme.

Me encontraba un poco molesta con Jungkook, no sé porqué estaba actuando de ésta forma, la cual comenzaba a irritarme y molestarme bastante.

-¿no vas a decir nada?.- me preguntó, mirándome de reojo.

-no hay nada que me gustaría decirte en este momento, Jungkook.- dije mientras me cruzaba de brazos y dirigía mi mirada a la ventana.

-¿estás molesta conmigo?.- preguntó, volteando a verme rápidamente, para después voltear nuevamente al camino.

-dímelo tú.- contesté, después dando un resoplido de fastidio.

Pronto vi que cambiaba el rumbo, ya no era a mi casa a donde nos dirigíamos.

-ey, ¿a dónde vas?, por aquí no es mi casa.- dije mirando por la ventana, sin reconocer aquel camino.

-no es a dónde voy, preciosa, es a dónde vamos.- dijo mientras sonreía, sin apartar la vista de la carretera.

Su respuesta lejos de calmarme, me hizo sentir aún más nerviosa.

-es en serio, Jungkook.- dije un poco molesta.

Su sonrisa se incrementó.

————

El camino fue un poco silencioso.

Llegamos a un lugar repleto de árboles, con una bonita banca de color café.

Era la única banca que había visto en la carretera.

Caminamos por un pequeño camino que se formaba en aquel lugar, llegando hasta un pequeño riachuelo.

La vista era preciosa.

Algo más también llamó mi atención, en uno de los grandes y fuertes árboles se encontraba una pequeña casa del árbol.

Parecía pertenecerle a un niño pequeño, aunque las escalerillas ya estaban casi por caerse, se veía bastante vieja.

-solía venir aquí con mi padre.- pronto escuché la voz de Jungkook.

-es un lugar precioso, Jungkook.- me atreví a decir.

-él me traía aquí cuando yo me sentía muy molesto o completamente destrozado.- dijo, pasando su mano por algunos arbustos.

-se escucha que tu padre es un gran hombre.- dije sonriéndole.

El volteó hacia mi, sin ninguna expresión en el rostro, para después sonreírme dulcemente.

-claro que si lo era.- sonrió mirando el cielo, para después sentarse en el pasto, frente al pequeño cuerpo de agua.

Liar |JJK y tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora